— ¿Ya entró?
— ¡No! —repitió MinSeok por quinta vez mirando al menor sobre él. Se miraron sin expresión alguna y finalmente rieron al unísono.
JongDae se dejó caer sobre el pecho del mayor un tanto avergonzado, pero divertido, siendo acariciado por las suaves manos ajenas. No, no era la primera vez de MinSeok. Pero sí de JongDae. Así que pensó repetidas veces en sí ponerse el condón o no, porque mágicamente había uno sobre la mesita de noche junto a su cama, aunque empezaba a sospechar de quién sería. Por un momento escuchó un sonido en el baño mientras se besaba con su amado chico, y la imagen de ChanYeol encontrándolos en esa situación para después golpearlo, no hizo más que asustarlo por completo y por ello le era mucho más difícil adentrarse en el mayor.
Moría de vergüenza, por supuesto. Pero estando con él se sentía bien, tranquilo... Aunque también temía haberlo decepcionado, porque seguro ChanYeol se encargó de darle mucho placer en cuanto fue su primera vez, y eso de cierta forma lo odiaba. Bueno, odiaba a ChanYeol y ya. En cambio él era un total inexperto que ni siquiera había visto algo de porno en su vida, excepto por aquella vez que llegó del colegio temprano y encontró a sus padres haciéndolo en la cocina. Agh, en seguida sintió cómo la comida regresaba a su garganta. Eso definitivamente llegó a ser un trauma y ante éste para nada bonito recuerdo, provocó que aquel mini JongDae descansara, sin intenciones de levantarse de nuevo. Sí, JongDae era único en su especie.
— Sí quieres puedo hacerlo yo.
— ¿Hm? ¿De qué hablas? ¡Por supuesto que no, no, no, no y no! —MinSeok rió y no dudó en acercarse a él para así abrazarlo por la espalda empezando a repartir besos por ésta—. Ya dije que no, Min.
— Tsk, no eres divertido... No te preocupes, ¿sí? —dijo MinSeok una vez captó la preocupación en los ojos del trigueño. Sonrió abrazándolo con cariño dejando los besos de lado—. Mi madre está en casa y no quiero que nos escuche... Así que otro día podríamos hacerlo, sólo tranquilo. No pasa nada.
— ChanYeol no es tan idiota como yo...
— Pero tú eres el único idiota que amo, Kim JongDae —sonrieron y se unieron en un dulce beso nuevamente. Hasta que la madre de MinSeok tocó la puerta y tuvieron que vestirse lo más rápido posible.
🌈
— ¿ChenChen? —volteó en cuanto escuchó su nombre y aquella boba sonrisa que mantenía en su rostro desapareció.
— Hola, Baek —susurró fingiendo una pequeña sonrisa. El bajito por su parte ignoró el hecho de haber encontrado al trigueño mirando como estúpido al que parecía ser MinSeok y simplemente se tomó la libertad de sentarse en sus piernas abrazando su cuello. Aún no iniciaban las clases del día y tanto él como JongDae habían llegado temprano, aunque también gran parte del salón... Quizás el profesor iba a llegar tarde. En fin. Quería saber si las cosas entre ambos estaban bien después de aquel beso del cual huyó, claro.
— ¿No estás molesto? —BaekHyun preguntó y JongDae rió nervioso negando repetidas veces.
— ¿Qué? ¿Por qué debería estar molesto, uhm?
— Ah... Bueno, no lo sé —le sonrió nuevamente llevando sus manos al rostro del trigueño, acarició sus mejillas acercándose con lentitud para así besarle, sino fuera por el repentino ataque de tos que tuvo el contrario—. ¿Amor?
— Y-yo, Baek, necesito agua —volvió a toser y BaekHyun se levantó enseguida buscando la botella con agua de su novio. Inconscientemente volteó a ver a un lado, así hallando a un MinSeok con el ceño fruncido que desvió la mirada de inmediato hacia ChanYeol quién descansaba sobre su mesa recibiendo comida por el mayor. Pff... Había algo extrañado. No habían más besos por parte de la pareja desde que JongDae se hizo presente... Y esta vez sí, estaba casi seguro que había visto celos.
Sus ojos se cristalizaron ante la simple imagen de MinSeok y JongDae juntos y negó, negó una y otra vez. Eso no sucedería, hizo un cambio por completo para merecer al trigueño y se consideraba mucho más bonito que MinSeok...
— ¿Min, pasa algo?
— No, nada, Channie... Sigue comiendo. Yo necesito ir al baño —se levantó haciendo ruido al chocar un par de sillas y no tardó en ser seguido por la mirada de JongDae.
— Ya regreso, Baekkie, ¿sí? —esta vez fue JongDae, y BaekHyun no hizo más que asentir en silencio.
No... Eso no estaba pasando.
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Besos Robados [ChenMin]
FanfictionDe besos robados en la mejilla a besos robados en la boca. Algo tan bonito como la amistad de dos niños, con futuros juntos planeados y demás, se ve arruinada por la distancia. Aún así, vuelven a encontrarse, aunque no es lo mismo de antes y defini...