At the Top of my Lists [Yoonmin] ©

☆ 16 ☆

Apenas llegó la mañana, el sol se coló a través de las cortinas. Un tanto molesto por ello, Yoongi gruñó y despertó. Se estiró un poco, abrió sus ojos y se sobresaltó al haber visto a Jimin, quien dormía a su lado. Había olvidado que aún estaba allí.

Yoongi miró a la estrella detenidamente. No llevaba maquillaje en su rostro, y su cabello no estaba peinado como siempre. No tenía puesta su cara ropa de diseñador, sino que vestía unas prendas suyas que él le había prestado para dormir. Sus mejillas habían adquirido un color rosado, y sus labios se veían abultados. Su pecho subía y bajaba lentamente, y soltaba pequeños y casi inaudibles ronquidos. Era esa la primera vez que lo veía así, y su corazón palpitó con fuerza ante tal imagen.

Era hermoso, era... tierno, muy lindo.

Hasta que despertó. Jimin frotó sus ojos y los abrió.

—Buenos días.

—Buenos días, Jiminnie.

—¿Eh?

—Jiminnnnnn, ¿no quieres levantarte y desayunar? Eso dije.

La cara de Yoongi se encontraba completamente roja por el apodo que había dicho de manera accidental.

—Espera, apenas abrí los ojos —bostezó—. ¿Ya hiciste el desayuno?

—N--no.

—¿Entonces por qué molestas con eso? Quedémonos un rato más aquí.

—L--lo siento. —Jugó con sus dedos, nervioso.

—Tú puedes levantarte y desayunar, tienes que ir al trabajo... Yoonie —dijo en un dulce tono de voz.

—¡No me digas así!

—¿Por qué? —Sonrió, burlón.

—Porque sé por qué lo haces, s--se me escapó, n--no te burles.

—No me burlo. Bueno, sí lo hago —rio—, pero me gustó tu apodo, ¿sabes? —cerró sus ojos—. Me gustaría que me llamaras así más seguido.

—¿Porque sería más creíble para la prensa?

—¿Eh? Sí, sí, por eso, sí. Por cierto, debes hablar con Jungkook acerca del viaje a Francia.

—¿Lo haré yo? Pero--

—Tómalo como uno de mis consejos de esos para cambiar. Siempre dejas que todos hagan todo por ti, es hora de que hagas tus cosas solo.

—El señor Jeon me--

—Y no lo llames así, eso solo hace que se crea más poderoso de lo que es... y no lo es, en realidad.

—Jungkook no me daría el permiso.

—Exígelo. Él te prometió días libres en las ocasiones en las que tengas que venir conmigo, no puede decir que no. Si él accedió en primer lugar, ahora no debe retractarse. Sé fuerte, ten seguridad, tú puedes.

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—Sé fuerte, ten seguridad, tú puedes —repetía mentalmente, a medida que entraba al café—. Sé fuerte, ten seguridad, tú puedes. Sé fuerte, ten seguridad, tú p--

—¡EY, LLEGASTE, BAYMAX DESINFLADO! ¿ACASO NO SABES QUE ABRIMOS HACE UNA HORA?

Yoongi hizo una pequeña reverencia y, asustado, se escabulló hacia el cuarto de descanso. Taehyung, al haberlo notado, frunció el ceño y se cruzó de brazos.