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|Leyla|

Tomé un suspiro grande. Estaba parada justo antes de cruzar la calle, mirando a la nada. Quizá la gente no se daba cuenta, quizá se preguntaban que rayos conmigo...Comencé a decirme que yo sola estaba haciendo un gran problema de esto, es decir; después de todo lo que había pasado este año nada podía ser peor, ¿Oh, si?.

Eché un último vistazo a mi alrededor antes de por fin llegar a dónde se suponía me esperarían mis padres,relamí mis labios y entré al restaurante a buscarlos.

Los hallé comiendo en una mesa al fondo.


—¡Leyla!.-Exclamó Annie en cuanto me vio, papá me sonrió y mi mamá sólo miró hacia mi dirección.-

—Hola, Leyla.-Saludó mi padre con una sonrisa, me senté a la mesa con ellos.-



Annie se levantó y me dio un abrazo que yo correspondí, segundos después cada quien se sentó en un lugar.


—Me alegra que si vinieras.-Comentó mi papá, yo sólo le sonreí.—Ordenamos por ti, espero no te moleste

—Tú ordenaste.-Murmuró mi mamá, lo dejé pasar.-

—Gracias.-Le dije a él.-

—Me gustan tus botas.-Dijo Annie.-

—Mis favoritas las destruyó Skipper.-Ella rió.-

—Papá dijo que podíamos tener otro perro.

—Mientras ella se encargué de bañarlo, alimentarlo, limpiarlo...

—Venderé limonada.-Dijo ella, yo reí.-

—Ugh, vas a limpiar su popó.

—Tú limpias la de Ski.

—Si, así es.-Dije riendo, ella frunció el ceño e inclinó su cabeza ligeramente a la derecha.-

—¿Si vas a venir con nosotros?.-Preguntó Annie,dejando de comer de su rebanada de pastel de chocolate. Sonreí de lado dispuesta a contestar pero mi mamá se adelantó.-

—No Annie, ella no quiere volver con nosotros.-Mamá por fin dijo algo, después tomó de su vaso como si nada. Bien, aquí vamos.-

—¿Por qué?.-Preguntó mi prima.-

—Eso no es así.-Dije yo.-

—¿No nos extrañas?

—No lo hace, creo que fue lo bastante clara la última vez que hablamos.-Rodeé los ojos.—¡No hagas esos gestos!

—Mamá, ¿Quieres parar con esto?.-Ella me miró desafiante.-

—No estoy diciendo nada que no sea cierto.

—Yo jamás dije algo así, y no vine aquí a pelear contigo.

—De hecho, me sorprende que vinieras.

—¿Podemos cenar tranquilamente?.-Dijo mi papá.-

—No sé por qué te comportas así.-Me encogí de hombros.-

—No me estoy completando de ninguna forma.-Me respondió evasiva.-

—Annie, ¿Por qué no vas a los juegos que están por allá? Te llamaremos en cuánto traigan la comida.-Ella asintió fue hacia allá, papá nos miró a ambas después.—¿Qué les pasa a ustedes dos?.

—August...-Comenzó mamá.-

—Kelsey, es nuestra hija, no tu enemiga o alguno de tus clientes en bienes raíces.-Ella me volteó a ver.-

Will be together (2) |TASM|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora