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|Peter|


Llegué tan rápido como mis telarañas me lo permitieron. ¿Qué que fue lo que encontré?

Varias personas siendo atendidas medicamento y ni rastro de la chica misteriosa. No hay mucho que yo pudiera hacer ya, aunque aún así me pasé para verificar que todo estuviera en orden. Una vez hecho esto nada me impedía buscar dónde se fue o dónde estaba.

Me refiero a que, no pudo haber ido muy lejos,¿Cierto? Busqué el edificio más alto y cercano posible, me sostuve de la pared y miré a los lados. Traté de estar lo más atento posible y seguía sin notar algo extraño o fuera de lo normal.

Esto era estresante. ¿Qué rayos pasaba conmigo y por qué ya no era capaz de encontrar una buena pista?.

Suspiré mientras movía mis hombros para relajarme un poco, en algunas pantallas gigantes seguían hablando de lo sucedido hace no mucho. Me obligué a pensar en algo mejor que hacer cuando una cosa voló desde un sitio enterrándose justo al lado mío.

Fruncí el ceño, una vez que lo tomé era como una especie de flecha, con una bandera negra o algo así. Mi atención fue hacia la ciudad de nuevo, en busca de algún movimiento en las cercanías y, ¡Bingo! cabellera ondeándose a lo lejos.

Me dirigí allí, cuando bajé en aquella azotea con el anuncio gigante en letras luminosas, me mantuve alerta, minutos pasaron.

Cuando estuve a punto de gritar un "¿Hola?" el sentido arácnido se encendió, me di la vuelta a tiempo para sostener a la chica a punto de desplomarse.

La observé con detenimiento, siendo honesto se veía devastada; bastante agotada y con heridas, noté que apenas y podía mantenerse consciente. Sin embargo parecía bastante decidida a evitar eso último.

Te encontré...estas...estas aquí.-Dijo con voz entrecortada.-

¿Quién eres tú?.-Dije con total confusión.-

Él viene, él vine. No hay tiempo.-Trató de levantarse, pero no pudo.-

¿De qué estás hablando? ¿Quién viene?

—Spiderman, debes tener cuidado...n-no...no se detendrá contigo. 

Negué con la cabeza, no entendía a que se refería. Los pensamientos comenzaron a abrumarme. Me hacían falta respuestas y algo me decía que no obtendría mucho.

—Y la chica.-Mi atención volvió a ella.—Hay que...tenemos que hacer algo.

¿Pero que...? ¿Oye de que...no,no,no. No te duermas. .-Ella cerró los ojos.—¿Me escuchas? No lo hagas eso sólo lo empeora porque yo...

No tenía caso que yo completara eso, ella ya no estaba consciente.

Suspiré, vi a un lado de ella.

¿Eso era una katana?

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—¿Así que tu sólo, la llevaste ahí?

—Yo, bueno si. ¿Qué más se supone que debía hacer?.

—Dejarla...Peter, no estoy muy segura. Es decir, no sabemos quién es ni qué es lo que quiere. Puede ser una psicótica asesina en serie.-Gesticuló con las manos.-Tenía un sable con ella.

Will be together (2) |TASM|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora