Cuando terminé de putear al Milo por wsp lo bloquié y guardé mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón. Luego con la Cami fuimos a pagar mi libro de dibujos a la caja.—¿Que pasó?— preguntó la Cami curiosamente. —Tení cara de asesina en serie hueon.
—Ah, nada.— agite mi mano en el aire restandole importancia. —Ayúdame a buscar a mi mamá mejor, ¿Ya?— dije mientras guardaba el vuelto en mi pantalón.
La Cami asintió dudosamente y no dejaba de mirarme con sus ojos entre cerrados.
Recorrimos toda la tienda y pasamos por cada pasillo que había buscando a la señora y no la encontramos por ninguna parte.
—Anto, estoy cansada.— mi mejor amiga se detuvo.
Al parecer a alguien le falta hacer más educación física hueon.
—Yo creo que tu mamá se fue y nos dejó aquí solas.— dijo mientras volvía de su mini pre-infarto.
—Ya filo, vamos a buscar mi mochila, despues nos vamos a mi casita y preparamos una huea rica para comer ¿Bueno?— propuse y la Cami asintió.
—Pasemos a comprar nutella.—
hizo un leve puchero de cabra chica.—Y chocolate suizo— soy la mejor amiga del mundo, lo se. —y también hagamos pizza para la once.
—No. Mejor unos panqueques con harto manjarrrrrr.— la Cami sólo le dan antojos de panqueques cuando el Andrés toca su puerta.
—¡No, ya sé! ¿Calzones rotos?— añadi.
—¡Oh si! A la tía le quedan súper ricos.— la Cami se limpió un poco de saliva que le estaba corriendo por la cara. —Hueona se me hace agua la boca.— se rió.
—No si me di cuenta.
No es porque sea mi mamá pero cocina muy rico, le gusta hacer sopaipillas, pan amasado y todo tipo de cosas que tenga que ver con la cocina. Cuando tenía dieciséis trabajó en un Hotel, empezó lavando platos, después pidiendo las órdenes, después el jefe le tenía buena y la dejaba hasta en la caja o a veces la dejaba a ella a cargo cuando él tenía que ir de viaje. Mi mamá le ayudó a ganar cualquier plata al viejo. En el Hotel aprendió a cocinar todo lo que sabe y mi papá le compró un libro de cocina super gigante, parece enciclopedia la huea. Al final tuvo que dejar de trabajar porqué se embarazo de mi hermano a los dieciocho, el Mati las caga hasta pa nacer. Al final creó que después el Hotel se quemó, así de mala cuea. Se va mi mamá y se quema la huea sflñdhf. El sueño de mi mami es ponerse con un local de comida.
Por otra parte, está mi Matichu. No somos los mejores hermanos del mundo pero igual lo quiero. Nos llevamos por pocos años de diferencia el tiene diecinueve y yo voy a cumplir dieciocho. Pero a veces ni nos pescamos, cada uno se la pasa metido en su pieza y sale con sus amigos. Lo bueno es que nos gusta el mismo tipo de música y no nos ponemos a pelear por el equipo, aveces nos ponemos a cantar y bailar juntos o nos gritamos de una pieza a la otra que le suba el volumen.
Subeme la radio que está es mi canción, ah.
Lo malo es que a veces cuando andan pretendientes a la siga mia el hueon tiene que conocerlos primero y si no les cae bien, cagaron. Es peor que mi papá hueon pero por lo menos ahora sólo tengo que aguantar a un hombre en la casa y no dos.
El único hueon que le agrada para mi es el Milo ¿Y saben por qué? Porque también es su mejor amigo, el hueon no se podía buscar otro mejor amigo, tenía que ser el mismo mío, aunque nos criamos los tres juntos y es entendible siendo vecinos. El Mati lo único que quiere es que me casé y tengamos hijos con el Milo, a veces lo webea y le dice cuñado.
ESTÁS LEYENDO
Chino culiao
Humor«Yo no voy a dejar que mi hijo cometa el mismo error de su Papá.» #28 EN HISTORIA CORTA♡. 18 de Diciembre 2017. #15 EN HUMOR♡. 24 de Febrero 2018. ¡Gracias!