Hace tiempo que Helen y Lu han vuelto con los demás del grupo. Ha sido bastante triste para la cumpleañera despedirse de su sorpresa, pero al fin y al cabo, no puede quedarse en su poder a los chicos de AURYN... Le gustaría, pero no puede. Se consideraría secuestro y es evidente que la excusa de "Es que estoy loca por ellos..." no daría resultado.
Poco a poco, cada uno de los chicos y chicas del grupo han ido abandonando el lugar. Se han despedido de Álvaro y Cristian y han cantado cumpleaños feliz a las tres chicas una vez más, seguido de besos y abrazos de no sólo sus respectivos chicos, sino también a lo que se refiere a muestras de afecto entre amigos.
Alberto, Bea, Cris y Marcos se han ido en metro mientras Clara y Ali, quienes ya se llevan cada vez mejor desde lo que ocurrió con Álvaro y Clara, ya que esta recapacitó poco a poco y les pidió perdón a ella y a Raúl, acompañadas de sus dos chicos, Juan y Raúl, se han dirigido hacia las motos.
-Nosotros nos vamos a ir también, chicos-les dice Álvaro a Alex y a Lu-. Cristian y yo tenemos que preparar las maletas.
-Espero que os vaya muy bien allí.
-Gracias, Lucía. Ha sido un placer estar en vuestro grupo, aunque sólo haya sido durante poco tiempo-agradece Cristian.
-No las des, nos habéis caído a todos genial, al principio hubo algún que otro roce... Pero ahora estamos todos muy unidos, lástima que os tengáis que marchar.
-Si, eso es cierto-dice Alex dándole la razón a Lu-. Pero vendréis de vez en cuando, ¿no? Igual por Navidades estáis por aquí y celebramos mi cumpleaños todos juntos.
-Haremos todo lo posible por venir a veros.
-Eso, eh. No os olvidéis de nosotros... Que os mato-dice Lu con una mirada amenazadora fingida.
Todos ríen y se despiden. Alex les da a cada una palmada en el hombro y Lu un abrazo.
En poco tiempo, la pareja formada por los dos chicos se aleja y Alex y Lu se quedan solos en el paseo de la Malva Rosa.
-Bueno, ya estamos solos.
-¿Qué hacemos ahora?
-¿Te apetece irte a casa?
-¡Qué va! ¿A ti?
-Pues la verdad es que no... Prefiero quedarme aquí contigo-dice sonriendo-. ¿Y si damos un paseo?-propone al final arqueando las cejas.
-Vale, buena idea-contesta entrecerrando los ojos y sonriendo.
El chico aprovecha que ella cierra los ojos y le planta un beso, más bien corto, pero que luego se convierte en uno mucho más largo y en un siguiente y en un siguiente, todos con el fondo del atardecer'. Un precioso atardecer entre el sol y el mar.
Comienzan a caminar cogidos de la mano entre risas y besos. Está claro que la magia entre ellos no se ha perdido. Él le sigue mirando a ella como cuando le recitó ese rap para expresar lo que sentía por ella. Y ella le sigue mirando a él como se presentó en su casa y le dijo: "Buenos días princesa." Tres palabras que quedaron en su memoria y en su corazón para siempre.
-Ya va siendo hora de volver a casa, a penas hay gente ya por aquí y está anocheciendo.
-Tranquila, princesa. Estás conmigo y yo te protejo.
-Que tonto que eres...
-Pero me amas.
-Y tanto.
Tras contestarle, ella le besa de nuevo.
-¿A dónde quieres ir ahora?
-Pues... ¿Entro en este bar y pedimos algo?
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NO ES PARA TANTO... ES PARA SIEMPRE. (Tercera parte)
RomanceLas sonrisas enamoran, pero las actitudes decepcionan. Todos tenemos esa parte malévola que surge cuando sufrimos de celos por alguien. ¿Se le deben dar segundas oportunidades a alguien que te ha decepcionado tantas veces? Atrévete a leer el final d...