NO ES PARA TANTO... ES PARA SIEMPRE. ~Capitulo 12~

34 3 2
                                    

Sara está en su cuarto y se tumba en la cama. Echa de menos a Dani, por lo que decide hablarle por WhatsApp. Teclea:

«Cari, estar sin ti es un aburrimiento. No hace nada que nos hemos visto en el festival del cole y ya te echo de menos. Te quiero.»

Dani recibe el mensaje y cuando lo lee sonríe en la pantalla.

«Si quieres hablamos por Skype, yo tmb me aburro y te echo muchísimo de menos.»

Sara contesta con un "Okis" y le parece genial la idea. En menos de un abrir y cerrar de ojos, ambos están hablando por webcam.

-Yo más-dice Sara.

-¿Qué?

-Que yo te echaba más de menos.

Dani sonríe.

-Entonces... Yo te quiero más.

Sara hace como que piensa y contesta:

-Trato hecho, pero no te acostumbres.

Los dos vuelven a reír como tontos.

-Dentro de poco hacemos medio añito juntos.

-¿De verdad? ¡No lo sabía! Sólo llevo planeando la sorpresa perfecta desde hace seis meses.

-No exageres, anda.

-Bueno, vale. En realidad desde hace dos. Pero te va a encantar la sorpresa, pequeña.

-No te vas a cansar de llamarme así, ¿verdad?

-¿No te gusta?

-¿A mí? A mí me encanta que me llames así.

-¿Entonces?

-Pues que es curioso, porque el pequeño eres tú.

-Ya, pero tú eres mi chica, mi pequeña.

-Y a mí me encanta ser tu pequeña.

-Te quiero.

-¿Cuánto?

-Hasta el infinito y más allá.

-Yo te quiero más.

-¿De verdad?

-Sí-dice la chica muy segura de sí misma.

-¿Cuánto?

-Hasta el infinito y más allá... ¡A paso de caracol!

La pareja vuelve a reír.

-Estás fatal.

-Pero me amas.

-Mucho.

-Dime una cosa, ¿cómo te enamoraste de mí?

-Ya te lo he contado millones de veces.

-Pues un millón y una. Es que me gusta que me lo cuentes.

-Pues cuando me enamoré de ti, éramos aún unos niños... Así que supongo que no fue la apariencia en sí, sino más bien la forma de ser. Eres diferente, eso me gusta. Y además te gustaban los videojuegos.

-Me sorprende como sois los tíos de simples.

-Eh, pero luego me di cuenta de que tenías una sonrisa preciosa y los ojos más bonitos del universo.

-Me apetece darte un beso ahora mismo. ¡Eres demasiado dulce!-dice Sara tapandose la cara con las manos, ya que se ha puesto toda roja.

-Dámelo entonces.

Los dos se acercan a la pantalla y la besan. No es lo mismo, pero es un gesto de amor. Uno de muchos otros. Y nunca ninguno de los dos habían sentido algo parecido por nadie. Sara con él ha sentado cabeza y Dani por fin ha cumplido su sueño de estar con la chica que robó su corazón cuando sólo tenían 12 años.

Cuando se separan, pasan un rato hablando y de repente, Sara se quita la sudadera que llevaba puesta para meterse del todo dentro de la cama. Lleva un pijama de tirantes con un escote bastante pronunciado. Es un pijama normal de verano, pero no pasa desapercibido ante los ojos de Dani, que se queda mirándolo con los ojos casi fuera de las órbitas.

-¿Qué pasa? Tampoco me mires así, anda... ¡Mira que eres exagerado! ¡No se ve tanto!

-Ya...

-¿Prefieres que me tape?

-No, no. Es sólo que me ha sorprendido, pero no es demasiado ni nada de eso.

-Vale. Es por si te sentías incómodo.

-Que va-dice disimulando.

-Dani, te conozco lo suficiente para saber cuando estás nervioso, y ahora lo estás. Sabes que tarde o temprano tendrás que vencer ese pánico, ¿verdad?

-¿A qué te refieres?

-Lo sabes perfectamente. Me refiero a que vamos a hacer los seis meses y sólo nos hemos besado. Eres consciente de que conforme vayamos cumpliendo meses juntos habrá que ir planteandose dar un paso más, ¿verdad?

Dani reflexiona antes de contestar. Tiene razón. Sabe lo que le está pidiendo, lo sabe perfectamente y no sabe si es pánico exactamente lo que siente, sólo sabe que aún no quiere pensar en eso. Quiere que surja, y con ella, por su puesto, pero de momento pensar en eso le inquieta. Además de que seguramente ella tenga alguna experiencia, al ser mayor y haber tenido más relaciones, y él... ¡Él no sabe! ¡No sabe hacer nada! Es más, todo es nuevo para él y desde que empezaron la relación siente ese miedo a hacer las cosas mal. Sobre todo esta.

NO ES PARA TANTO... ES PARA SIEMPRE. (Tercera parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora