NO ES PARA TANTO... ES PARA SIEMPRE. ~Capitulo 6~

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El teléfono suena y uno de los cuatro chicos que viven en el piso va a cogerlo mientras se peina sus rizos.

-¡Teresa! ¡Teresa! ¡Tere! ¿Dónde estás?-grita Harry por todo el piso.

-¿Qué? ¿Qué pasa?

-Es para ti, son tus padres.

-¡Mamá! ¡Papá! ¡Qué sorpresa! Pero... ¿Por qué llamáis? ¡Si llamáis hacedlo por Skype! ¡Que os costará menos!

-Ya, lo sabemos. Pero esta es una ocasión especial... Hemos recibido tus notas de todo el curso y estamos muy orgullosos de ti.

-Ah... Con que es por eso... ¡Me alegro de que veáis que me he esforzado!

-Claro, si eso ya lo sabíamos, da igual que hayas sacado todo sobresalientes o no, el caso es que has tenido que hacer mucho esfuerzo y tener mucha constancia por eso de estar en otro país y por eso papá y yo te queremos felicitar. Incluso te hemos comprado una sorpresa.

-¿Sí? ¿Qué es?-pregunta Teresa entusiasmada.

-Pues... Si te lo decimos, ya no será una sorpresa.

-Tenéis razón...

-¡Cuéntanos! ¿Qué tal te va por ahí? ¡Ya queda lo mejor de todo! ¿No? ¡El verano!

-¡Sí! Por aquí todo genial... ¡Los chicos y yo tendremos nuestro merecido descanso!

-¿Sabes algo de Louis? Si le han ido bien las notas o algo...

-Creo que sí, pero sólo se eso y que su madre volvió pronto porque su abuela se recuperó casi del todo y lo se porque me lo han contado los demás, si no... ni idea.

-¿No estaba en tu instituto?

-Sí, en otra clase, pero... Sí, está en mi curso. Lo que pasa es que no hablo mucho con él desde que decidí marcharme.

-Entonces no sabes si sigue con la novia o que, ¿no?

-Ni idea, imagino que sí. Se querían mucho, tenían sus roces pero hacían una bonita pareja.

La misma que hubiesen hecho ella y el chico de no ser por los malentendidos y por el miedo que tenía él a tener que elegir a una.

-Bueno, esperemos que se arregle antes de que te tengas que volver a casa. Erais muy buenos amigos.

-Sí.

Después de unos segundos de silencio, los cuales Tere aprovecha para controlar las ganas de llorar que le han surgido al recordar a su Louis, la conversación continúa:

-Bueno, Teresita, vamos a ir colgando ya. ¡Qué nos va a costar un ojo de la cara!

-Vale mamá, un beso a papá y a mi hermano.

-¡Un beso cariño!-grita su padre desde la otra línea.

-Adiós, os quiero.

Tere cuelga el teléfono y ya puede derramar algunas lágrimas. ¿Cómo puede ser que después de todo este tiempo no sólo no haya conseguido olvidarse de él sino que además no ha podido evitar echarlo más en falta? Y es que el amor es así, duele y es injusto, al igual que incomprensible.

NO ES PARA TANTO... ES PARA SIEMPRE. (Tercera parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora