Tu Recuerdo

8. De vacaciones

Jazmín  POV

Había llegado a casa, bastante cansada, como siempre sin poder aguantar en dolor en mis pies por los jodidos tacones que siempre debía de usar para trabajar. Siempre me quejé preguntándome « ¿Quién fue tan jodido en imponer los tacones para trabajar?».

Este era el momento donde extrañaba mis zapatos tenis de suelas bajas y roídas por el tiempo.

— ¡Mamá!—saltó Mandy de una vez a abrazarme.

—Hola cariño—dijo tirando los zapatos de tacón dando patadas al aire y estos salieron volando hasta chocar con la pared— ¡No soporto más estos tacones endemoniados!

Mandy rió escandalosamente.

— ¡Espero no usarlos nunca más en la vida!

—Mamá—dijo Mandy frunciendo el ceño— ¿A qué se debe ese carácter tan liberal?

Suspiré.

—Connor me dio vacaciones—dije muy bajito. Mandy abrió los ojos como platos— ¡Connor me dio vacaciones! —estaba vez había gritado— ¡Baile de cinco segundos!

Mandy y yo nos pusimos a bailar como locas en la casa. Paré de hacerlo al contar cinco. Estaba tan cansada que no sentía nada de fuerzas en mí. Me dejé caer en el sofá de la sala.

— ¡Eso significa que tendremos tiempo para nosotras! —dijo ella muy alegre.

—Sí, sólo quince días—dije suspirando.

— ¡Qué bien!

—La verdad es poco tiempo—dije desanimada.

—Pues, sí—dijo Mandy sentándose a mi lado—. Pero si lo aprovechamos bien, puede que nos rinda.

—Sí—dije soltando una leve sonrisa—. Puede que sí.

—Quiero que me permitas hacer algo—pidió ella.

— ¿Algo como qué? —la miré ceñuda esperando que con eso me estuviera tratando de decir…

—Que me dejes poner todas tus películas, videos, documentales de One Direction.

— ¿A qué se debe ese interés?—le pregunté extrañada.

Ella rió divertida.

—Es que estuve escuchando hace algunos días una canción de ellos y me gustó mucho. No sé, tengo curiosidad.

—Pues, a tu edad me llamaba la atención los Beatles, aunque nunca fueron la música favorita de tus abuelos—reí.

— ¡Veamos This Is Us! —gritó y se levantó del sofá con mucho entusiasmo, tanto que me asustó.

—Pero, yo pensé que mañana…

—Mañana, nada, mamá—dijo ella con tono exigente—. Yo quiero que empecemos a disfrutar de tus vacaciones ahora mismo.

La miré con los ojos como platos.

—Pero estoy muy cansada, solo quiero comer.

— ¡Mamá!—reclamó—. Pide una pizza y ya. Haré palomitas.

Suspiré.

—Solo espero no quedarme dormida.

—Yo te estaré despertando.

—Bueno—suspiré de nuevo.

— ¡Pide la pizza! —Dijo tomando el teléfono de la casa y tirándolo al sofá a mi lado—. Yo prepararé la película, las palomitas y los refrescos.