20 - Esto es una pesadilla

714 71 32
                                    

Louis se encontraba en la puerta del hogar de Harry y aún no se atrevía a tocar el timbre.

Después de haber llegado desde hace unos minutos sentía que sus piernas le temblaban y se estaba poniendo nervioso cada vez más.

Mientras tanto dentro de la casa estaba Anne preparando la comida animadamente.

Des había llegado pronto del trabajo y se dirigía a la cocina por un poco de agua.

Al llegar a la entrada se quedó observando a su esposa que cantaba alegremente y pensó que así como se encontraba de animada y tranquila podrían hablar sobre su hijo sin que se pusiera mal.

Así que aclaró su garganta para llamar la atención de su esposa.

— ¿necesitas algo Des? – ella preguntó sin apartar su mirada de las verduras que cortaba.

— Anne necesito hablar contigo – comenzó Des tratando de no sonar tan nervioso como lo estaba.

— ¿sobre qué? – la mujer preguntó a pesar de que presentía de lo que se trataba.

— sabes a qué me refiero Anne, a nuestro hijo – dijo suavemente para no presionarla.

— no creo que sea el momento porque... – la mujer trató de excusarse pero fué interrumpida.

— es el momento y de hecho nos estamos tardando en hacerlo porque nuestro hijo necesita aclararnos muchas cosas y nosotros necesitamos escucharlo – habló Des tratando de no molestarse.

— pero es que no sé... – Anne se negaba a hablar.

— pero es que nada Anne, ya va a pasar una semana y nuestro hijo está sufriendo demasiado al no saber qué es lo que pensamos y he estado esperando que quieras hablar con él pero veo que no quieres así que ya no esperaré nada porque estoy dispuesto a escucharlo – el hombre habló serio.

Anne permanecía de espaldas sin decir nada pero después de pensar un poco habló.

— tienes razón, creo que es el momento de enfrentar la realidad y escuchar a mi niño – lo dijo con un tono desanimado.

— me alegra que por fin aceptaras porque el nos necesita, somos su familia y...– Des se detuvo de hablar al escuchar el timbre.

— iré a abrir – se ofreció Des.

— no, deja voy yo... creo que es la vecina que me iba a traer unas cosas que le presté – dijo Anne saliendo de la cocina dejando a un lado el delantal.

Al abrir la puerta se sorprendió al darse cuenta de que no era la vecina, era Louis.

— ¿qué haces aquí? ¿qué quieres? – Anne preguntó poniéndose sería.

Louis bajó su mirada mientras jugaba con sus dedos temblorosos por los nervios y porque se dio cuenta de que la mujer lo miraba con molestia.

— y–yo necesito hablar con usted – Louis sentía su corazón acelerarse.

— ¿de qué? ¿de cómo te burlabas cuando entrabas a mi casa haciéndote pasar por una chica? – Anne comenzaba a molestarse al recordar las veces que hablaron tan animadamente.

— no es así yo nunca me burle de usted todo, tiene una explicación – el castaño contestó tratando de no hacerla enojar más.

— una explicación que no me interesa escuchar, no de tí porque quiero que mi hijo me explique todo así que no te quiero cerca de él – sentenció la mujer dispuesta a cerrar la puerta.

— ¡escúcheme por favor! – gritó el ojiazul evitando que Anne le cerrara la puerta en la cara.

— ¡no me interesa escuchar tus mentiras! ¡vete de mi casa! – a la mujer le molestaba la insistencia del chico.

Olivia  | L.S | (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora