Olivia | L.S | (en edición)

30 - No puede ser

— ¿qué? – Des preguntó dudando de haber escuchado bien.

— ellos deben estar juntos – Anne repitió segura de sus palabras.

— pero si no has querido escuchar a Harry desde que nos confesó que es gay y ni hablar de cómo trataste a Louis ¿porqué ahora dices eso? – el hombre no entendía a su esposa.

— lo que pasa es que me di cuenta de que Harry ya no es un niño, debo dejarlo crecer y decidir lo que quiere y lo que le gusta – Anne habló sintiendo sus ojos aguarse.

— ¿qué fué lo que te hizo cambiar? – Des estaba más sorprendido conforme ella hablaba.

— hablé con Louis y entendí muchas cosas que Harry no nos ha dicho y que lo hacen sufrir, yo no quiero que siga así – la mujer comenzó a derramar las primeras lágrimas.

— ¿a qué te refieres? – preguntó desconcertado.

— Harry nos ocultó que es gay y nos mintió sobre Olivia porque... piensa que somos homofóbicos – Anne sollozó al decir lo último.

— no es cierto, no puede ser – Des no lo podía creer.

— así es Des, nuestro hijo pensó que lo rechazaríamos y por eso inventaron todo eso sobre la novia ¿te das cuenta de que Harry no confío en nosotros? – Anne no podía dejar de lamentar eso.

— pero nunca hemos hablado mal sobre ese tema ¿como es posible eso? – Des sentía un nudo en su garganta.

— ese es el problema no hemos hablado con él de ningún tema, porque pensamos que es un niño para saber de esas cosas – ella explicó mirándolo cabizbaja.

— oh Dios... es nuestra culpa que no confíe en nosotros pero ahora debemos hacer algo para solucionar todo esto antes de que empeore más – Des habló decidido.

— por supuesto, esperemos a Harry para hablar con él para aclarar las cosas y que deje de pensar que no lo apoyamos – Anne habló convencida mientras le tomaba las manos a su esposo.

— está bien, por nuestra familia... – Des la rodeo con sus brazos cariñosamente.

— por nuestra familia – repitió su esposa sonriendo levemente.

Harry y Liam caminaban lentamente por la acera platicando animadamente.

— ya falta muy poco para el gran partido, estoy seguro de que ustedes van a ganar – Liam trataba de animarlo.

— gracias amigo – el rizado habló sin muchos ánimos.

— hablas como si no estuvieras emocionado es el partido que has estado esperando desde que te nombraron capitán del equipo – el ojimiel lo miró confundido.

— si pudiera elegir entre el partido y estar con Lou definitivamente elegiría a mi Lou... sin él nada tiene sentido – Harry habló cabizbajo.

— no digas eso me gustaría poder hacer algo para que estuvieras mejor, no me gusta verte triste todo el tiempo – el ojimiel trataba de consolarlo.

— gracias por preocuparte por mí, eres el mejor amigo que se puede tener por eso espero que nunca sufras lo que yo estoy sufriendo y al contrario quiero que encuentres a la persona que te haga muy feliz porque te lo mereces – Harry le sonrió levemente.

— gracias Harry tal vez ya la encontré – Liam sintió sus mejillas calentarse.

— ¿de verdad? ¿es quien no me has querido presentar? – el ojiverde preguntó curioso.

— s–si pero tengo miedo a pesar de que ayer me dijo que me quiere y yo le contesté que yo también pero ¿y si no es de la forma en que yo lo hago? – Liam no podía dejar de pensar en eso.