Max

Capítulo 6.

El resto de la noche creo que transcurrió tranquila.

Les envié un mensaje a Meg y Jeremy diciéndoles que estaba cansada y que me fui a casa.

Luego de comer él preparó la habitación de invitados para mí y dormí plácidamente, a la mañana siguiente desperté, me llevó a mi casa para que me duchara, pero me dijo que no podía llevarme al instituto como había planeado porque tenía cosas que hacer.

Y aquí me encontraba, tomando un té helado con Jeremy en una cafetería cercana al instituto, decidimos venir a tomar algo luego de que nos informaron que debíamos irnos a nuestros hogares por una invasión de abejas.

- Entonces, ¿qué dices? — Estaba tan sumida en mis pensamientos que no oí nada de lo que dijo Jere.

- ¿Mmm? —Hice un sonido con mi garganta con el que él entendió que no estaba prestando atención.

- Alex, estas muy distraída el día de hoy, ¿te encuentras bien? — Me preguntó mirándome de forma preocupada.

- No, Jere, tranquilo, estoy bien, solo estoy recuperándome del fin de semana — Respondí para tranquilizarlo. — ¿Qué decías?

- ¿Segura? — Yo solo asentí con la cabeza y él continuó hablando. — Bien, decía: si quieres ir en la noche a la playa, podemos hacer una fogata, comprar algunas cervezas, ya sabes.

- Debería decir que no, porque es lunes — Hablé mientras fingía estar debatiéndome con una de mis manos en mi mentón. — Pero ya que mañana no tenemos que asistir a clases... diré que si — Finalicé sonriendo.

- ¡Genial!, pasaré por tu casa a las nueve — Informó mientras se levantaba. — Bueno, en realidad Meg me pasar a buscar y luego iremos por ti — Continuó hablando mientras caminaba de espaldas hacia la salida del lugar. — ¡Nos vemos luego, Alex! — Gritó antes de girarse y salir por la puerta.

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Mientras caminaba a casa decidí colocarme mis audífonos y simplemente le di a reproducir, comenzó a sonar 'Look What You Made Me Do' de Taylor Swift, no era su fan, pero debo admitir que la canción está genial.

No tenía nada que hacer, así que decidí caminar un poco por el parque.

Estaba tan distraída imaginándome un videoclip mientras escuchaba la canción que estaba sonando (¿Quién no lo hizo?),
que no había notado que alguien estaba caminando a mi lado.
Me sobresalté y retuve un grito al ver de quién se trataba.

¡Diablos!
Que susto.

Quité mis audífonos de mis oídos y los dejé colgados en mi cuello.

- ¿Qué haces aquí ? — Pregunté con un tono de voz frío. No me gusta que se aparezca de la nada.

- ¿Acaso no puedo caminar a tu lado por el parque? — Respondió a mi pregunta sin ninguna expresión en su rostro mientras veía hacia el frente.

- Al menos podrías actuar como una persona normal y decirme que estás aquí — Contraataqué mientras continuaba caminando, ahora hacia mi casa.

Él no dijo nada, sólo se mantuvo caminando a mi lado hasta que llegué a la entrada de mi casa.

- Bien, adiós — Me despedí a la vez me giraba para adentrarme en mi hogar.