Max

Capítulo 23.

Desperté debido a que alguien estaba dejando un recorrido de besos a lo largo de mi cuello.

- Max — Hable alargando la "a".

- Alex— Dijo roncamente, su voz sonaba aun mas sexy por la mañana.

- Quiero continuar durmiendo— Trate de alejarme, pero me atrajo hacia él nuevamente. — Voy a estar de muy mal humor si no me dejas seguir durmiendo.

- Siempre lo estás, así que, no habrá diferencia— Dijo esta vez mientras mordía mi cuello.

- Claro que no, tú eres el que se la pasa de mal humor todo el tiempo— Gire entre sus brazos para así quedar frente a él.

- Bueno— Su ceño se frunció. — Eso es porque tú me haces enojar.

- Si claro, soy yo la culpable— Dije sarcásticamente.

De repente una idea cruzo por mi cabeza, ¿qué tal si le regresaba el favor que me hizo anoche?

Bueno, no era una experta en eso, en realidad no sabía casi nada, pero, por algo se empieza, ¿no?

Comencé a besar su cuello seductoramente, dejando que mi lengua se paseara por el de vez en cuando.

- Alex — Gimió para luego aclarar su garganta.— ¿Qué estás haciendo?— Preguntó.

- Nada — Dije inocentemente.

Me subí sobre su cadera y pude sentir claramente el duro bulto que se encontraba aprisionado por su ropa interior.

Baje por su pecho y continué dejando besos hasta el comienzo de sus boxers.

Mire hacia arriba y lo encontré viéndome, con su labio inferior entre sus dientes, esperando mi próximo movimiento.

Baje su ropa interior dejando su gran y de verdad, gran paquete a la vista.

Lo tome delicadamente con mi mano y comencé a bombear lentamente de arriba hacia abajo.

Max se encontraba con los ojos cerrados y la respiración acelerada.

Pasé mi lengua a lo largo y cuando llegue a la punta decidí meterlo a mi boca.

- ¡Maldición, Alex!— Gritó sobresaltándome.

- ¿Qué ocurre? ¿Estoy haciéndolo mal?— Pregunte algo asustada y avergonzada.

- No nena, claro que no, estas haciéndolo muy bien— Se inclinó un poco hacia mi y beso mis labios.  — Tan bien que estás volviéndome loco— Sonrió.

Al oír eso mi seguridad volvió y comencé a succionarlo mas rápido, mientras que con mis manos acariciaba sus testículos.

Max no paraba de gemir y maldecir.

- Nena, hazte a un lado— Habló con la respiración muy acelerada mientras me tomaba suavemente de la mandíbula y me alejaba de su pene.

Sabía perfectamente porque hacía eso, estaba por llegar a su orgasmo.

Lo tome nuevamente con mis manos y lo masturbe rápidamente hasta que vi cómo estallaba en un gran orgasmo.

Wow, esto es tan raro, tenía mis manos cubiertas de su semen y parte de mi pierna también.

Me puse de pie y me dirigí hasta el baño de mi habitación, lave mis manos y pase un toalla húmeda por mi pierna para quitar todo rastro de semen.

Cuando volví a mi habitación encontré a Max en la misma posición en la que se encontraba antes, pero ahora su gran "amigo" se encontraba nuevamente dentro de sus boxers.

Me senté a su lado y acaricie su cabello.

- Princesa— Habló lentamente.— Eso estuvo genial — Suspiró—Me hiciste acabar en 5 minutos— Me miró interrogativo.— Nunca le has hecho esto a nadie, ¿verdad?— Preguntó con preocupación en su voz.

- No, claro que-e no, es decir— Intente hablar, me sentía algo avergonzada ya que no sabía mucho de este tema.

- Es decir ¿qué, Alex?— Me interrumpió mientras se sentaba con su espalda apoyada en el respaldo de la cama.

- Es la primera vez que hago esto, así que, no lo se— Lo mire y tenía una traviesa sonrisa pintada en sus labios.

- Así que— Habló mientras tomaba mi mano y me empujaba hacia él, hasta tenerme sobre su regazo.— Soy el primero al que le das un orgasmo— Beso mis labios.— Y soy el primero que te da un orgasmo— Jugó con un mechón de mi cabello.

Asentí tímidamente.

- Pues bien, entonces— Tomó mi barbilla. — Debes saber que seré el único que te enseñara todo sobre el sexo.

Apoye mi cabeza en su pecho y abrace su cintura, mientras el acariciaba mi cabello.

- Me encantas, Alex— Dijo luego de un rato en el que solo jugaba con mi cabello.— Más de lo que crees.

Lo mire.

- Tú también me encantas, Max — Bese su cuello.— Aunque a veces entres en tu lado loco posesivo, que me prometiste trataras de controlar.

- Bueno — Aclaró su garganta, mientras tanto yo acariciaba su mandíbula, la cual estaba cubierta por una fina capa de barba, sexy. — No es fácil que todos  quieran meterse con mi novia.

Detuve mis caricias en su rostro y lo mire fijamente a los ojos, él ya se encontraba con su seria mirada fija en mi.

- ¿Novia? Creí que iríamos lento— Hable ignorando el cosquilleo en mi estomago.

- Vamos, Alex, luego de lo que hicimos seguiremos con tu estupido plan de— Hizo comillas con sus dedos — Ser amigos— Resopló —No seguiré con eso, que por cierto, nunca estuve de acuerdo, solo lo acepte para que me dejaras estar cerca. Pero se acabo, ahora eres mi chica, mi novia.

- ¿No deberías preguntarme primero al menos?— Hable entre sarcástica y burlona.

- Se cual sera tu respuesta, no es necesario.

- Hazlo— Cruce mis brazos.

- Alex — Dijo cansado.

- Max— Dije yo seriamente.

Me miro fijamente hasta que noto que no me daría por vencida.

Si señor, soy mus obstinada.

- Alex

- Alex Smith— Lo interrumpí fingiendo seriedad.

Moría de risa por dentro.

- Alex Smith — Bajó su mirada y suspiró.— ¿Quieres ser mi novia?— Me miró sonriendo sexymente.

- Mucho mejor— Tome mi mentón como si estuviera meditándolo.— ¿Puedo pensarlo?

Solté una gran carcajada al verlo hacer algo que siempre critica de mi, rodar los ojos.

- No, no puedes, ahora solo, bésame.

Me tomó de la nuca y junto nuestros labios. 

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Bieeeeeen, aquí está el tan deseado capítulo.

Noto que hay nuevas lectoras que dejan su voto y comentario. Eso me encanta. ♥️ ♥️ ♥️

Gracias por leer.

- Ina ♥️