Cosa Nostra |𝙻𝚂|

C. Undici

Y el menor se corrió de nuevo.

Soltó un gemido agudo del cuál el rizado estaba seguro que los vecinos (en especial el alfa que se le quedaba viendo demasiado a Louis) habían escuchado. Y eso le hacía sentir orgulloso. ¿A que alfa no le gustaría que todos los demás supieran que el lindo omega del departamento de hasta arriba gime por ti? La respuesta es obvia.

El nudo no tardó en bajar, gracias a que ambos ya no sentían las piernas, el último Lapdance de Louis provocó que ambos se corrieran pronto, no por que fuera la décima vez, o por que el celo de Harry se dio justo en el momento que Louis salió en panties.

Ya había pasado el día y medio del celo. Era la última vez que se corrían por el momento, y Louis aunque disfrutara la sensación, ya no sentía las piernas, temblaba ligeramente por lo mismo. Pero a ojos del alfa lucía precioso, su cabello mojado por el sudor que provocaba que su flequillo se pegara a su frente junto a los labios rojos de tanto morder por parte del alfa o las mejillas del mismo color por el esfuerzo de aguantar un celo alfa lo hacían ver hermoso. Su trasero tenía ciertas tonalidades moradas y rojas que habían sido provocadas por los apretones o golpes de parte del mayor.

Aunque para el omega no había un ser más lindo que el alfa, que estaba de igual manera sudado con ligeras gotas por su pecho y su cabello rizado que ya le llegaba por sobre el hombro, en estos momentos atado en un moño, hacían a Louis aguantar. Podría aguantar otra follada si el alfa lo necesitase.

Pero no había demasiado tiempo para disfrutar de la preciosa imagen de ambos, Harry en cuanto volvió de su celo se duchó a medias se vistió lo más rápido que pudo, y besó a Louis recordándole que pasaría por él cerca de las diez de la noche para ir a la fiesta, que procurara vestir como quisiera, pero no enseñando demasiado, añadió que si él no llegaba a responder le preguntara a Niall.

Louis prefirió no hacer preguntas del por qué a Niall, y en cuanto pudo caminar decentemente y estuvo vestido con ropa ligera, llamó al rubio.
El rubio le regañó por no avisar y perderse de nuevo, pero es que también tenía que entender un poco a Louis, esto para él era nuevo, y aunque no quisiera aceptarlo, le molestaba un poco.

Pero la tarde pasó tranquila, dieron vueltas y el omega mayor decía que podía usar y que no, comieron sushi frente a la linda fuente del centro. Con varias bolsas ya en sus manos, el moreno llegó sentándose y comiendo el medio maki que el rubio ya no quiso. Cerca de las cuatro Louis se despidió de sus amigos y se fue a su departamento para decidir que de todo iba a usar, también llamó a Harry en el camino, este tuvo que interrumpir por orden del capo la junta con los demás dones por la llamada del omega, y aunque Harry quisiera ocultarlo, la sonrisa le delataba.

Louis también recibió llamadas, más que otros días en realidad, Michael le llamó en cuanto colgó con Harry, seguido de su padrastro que a veces resultaba sobre protector, para al final hablar con Dickie enviándole fotos de como se veía y este le daba el visto bueno o no.

Mientras que Niall iba entrando a su casa de la mano de su alfa, que estuvo intranquilo desde que llegó a verlos al centro. Louis no se hubiera dado cuenta así Zayn gritara que estaba intranquilo, a diferencia de Niall, que lo notó segundos antes de que se sentara a comer.

Zayn se tiró sobre el sofá suspirando en forma de gruñido y dejando al menor sobre sus piernas, el rubio acariciaba su mejilla y le miraba con curiosidad, sus ojos brillaban delicadamente por esta.

-Ahora si, ¿Vas a contarme que ocurrió?

-Niall, ¿Donde están los papeles de nuestra boda?

-En Brasilia, me dijiste que los guardara donde nadie pudiera encontrarlos, ¿Por qué?