Cap. 29

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El ambiente estaba algo pesado y tenso. Jungkook se había vestido y se habia quedado dormido en el sofá. Lee lo había estado observando y cuidando mientras sentía la pesada mirada de Hoseok quien fumaba un cigarrillo.

- Es increíble que haya caído tan bajo - resopló Lee acariciando el cabello de Jungkook.

- Por favor - se quejó Hoseok - como si no supieras las cosas que la lujuria te hace hacer... - rodó los ojos y siguió fumando.

- No se puede fumar aquí - Lee tomó bruscamente el cigarrillo y lo lanzó por la ventana - ponte bien la ropa que aún no terminamos el caso.

- Pues no creo que Jungkook quiera ir con el caso - lo señaló con los ojos y dio en el punto débil de Lee. Si su Jungkook dormía entonces no podía molestarlo.

La tensión sexual entre los tres era tan delgada que se podía romper en cualquier momento, pero ya lo dijo Hoseok, estar embriagado por la lujuria jamás ha dejado nada bueno...

(...)

Se que lo que hice quizá esté mal, no sé como pasó, no sé si fue algo que dijo, pero los pequeños labios de mi compañero Jeon llamándome así... Hobi... me hizo delirar. Sé que quizá sea más enfermizo querer que Jungkook reemplace el lugar de mi Taehyung... pero son tan iguales; que Jeon Jungkook tiene que ser mío.

(...)

Tanto tiempo aguarde por el momento preciado de tener a Jungkook entre mis brazos y hacerlo mio... tantas noches hacía cosas pensando en él, en que de verdad me viera como algo más que su compañero, colega o amigo. Y cuando lo tuve completamente para mí lo arruine, ¿¡por qué demonios no me pude detener!? Los labios de aquel hombre están grabados en  mi mente, tan solo de recordarlo... y su cuerpo... qué será de mí.

(...)

La noche pasó, los tres durmieron incómodamente en aquella oficina, Lee junto a Jeon en el sofá y Hoseok en la silla de cuero del escritorio, la noche les había caído y los tres estaban confundidos como cansados que nadie volvió a casa esa noche, además de que mañana sería un día largo.

(...)

Los pájaros comenzaron a cantar, mi cuello dolía un poco, dormir en el sofá no es nada cómodo; la luz del sol entrando por la ventana llegaba bruscamente a mis ojos provocándome arrugar el entrecejo, bostecé un poco y quise ponerme de pie, pero de inmediato un dolor punzante se hizo presente en mi cadera y columna.

- ¿Qué acabo de hacer? - susurré asustado... anoche había tenido sexo con... ¡imposible!

Miré a mi alrededor y Hoseok y Lee estaban dormidos, así que aproveche y salí de ahí lo más pronto posible.

- Larga noche trabajando, ¿eh? - el jefe me habló llamando mi atención, en ese momento me congelé.. lo habíamos hecho en la oficina; ¿y si alguien nos había oído? - pude ver que se quedaron hasta tarde, los demás no pudimos hacerles compañía esta vez, todos estábamos cansados así que los envié a casa temprano - caminó hacia mí con un café en su mano - ¿todo bien? te ves algo tenso - y en ese momento trató de tocarme...

- ¡No me toque! - un grito salió de mis labios mientras podía ver como el jefe caía al suelo junto con su café... todo paso tan rápido. No podía creer que... lo haya golpeado sólo porque quiso tocarme el brazo; pero algo en mí entró a la defensiva cuando se acercó.

- ¡Mierda, Jungkook! - gritó molesto sacudiendo sus ropas manchadas de café.

- ¿Qué está pasando, Jeon? - escuché la voz de Hoseok mientras la puerta de la oficina se abría, un escalofrió recorrió mi cuerpo y la herida que hacia varios meses ya no me molestaba me estaba causando unos horrendos dolores de cabeza. Sentía la mirada de todos sobre mí... algo estaba mal.

- Todos aléjense de mí - apenas salió mi voz hiperventilando y salí corriendo de ahí con un nudo en la garganta.

Mi mente estaba en blanco, no pensaba ni en mí, ni a donde ir, ni en los casos si quiera.

- Vamos Jeon... se profesional - me dije a mi mismo tirando de mis cabellos, no podía estar perdiendo la cabeza por algo tan tonto. Entre en pánico, no sabía a donde ir, y entonces recordé... - Rap Mon... - él era el único que me ayudó cuando todos me creyeron loco... Quizá pueda ayudarme ahora.

Recordaba a la perfección su dirección, más no recordaba su rostro aún; ¿Iría a ver a alguien que ni siquiera sabía cómo era? En esta situación... Sí.

(...)

Jungkook caminó entre las calles de Corea buscando aquella vieja peluquería donde asistían todas las noonas y unnies, siempre el mismo corte... Pasando por aquellas casas abandonadas y vandalizadas hasta el fondo, ahí estaba la vieja casa de RapMon.

Cerró los puños con fuerza algo nervioso, hasta que por fin se animó y tocó la puerta.

Esperó unos segundos y nadie respondió.

- ¿Rap monster? Soy yo... Ju-Jungkook - tartamudeó un poco al hablar. Pero seguía todo en silencio. Estaba dispuesto a irse cuando la puerta se abrió lentamente.

- Querido amigo... Creí que ya no volverías - entre la penumbra de aquel hogar se asomó un rostro moreno de labios gruesos, cabello rosado y marcados hoyuelos; era la primera vez que Jeon veía la cara de aquel hombre.

- Rap Mon... ¡Ah! - se encorvó un poco al sentir un punzante dolor en la cabeza... como si tratara de forzarse para recordar algo.

- ¿Estás bien? - dijo con voz serena con un imperceptible tono de burla - pasa... Por favor.

Jeon asintió sosteniéndo su cabeza con algo de dolor mientras entraba con Rap Mon tras él. Jungkook intentaba seguirlo entre la penumbra lo mejor que podía, seguía solamente el sonido de sus pisadas hasta que en un momento éstas pararon y entonces se escuchó un ruido sordo.

-Adelante Jungkook... siéntete como en casa- se pudo escuchar el sonido de lo que asumió era Rap Mon moviéndose en un sillón. Guiándose con sus manos buscó el dichoso sillón y se sentó.

-¿Y bien?- preguntó Rap Mon al mismo tiempo que se escuchaba un sonido de vasos de cristal chocar ligeramente- ¿qué te trae por aquí?- tal vez Jungkook no podía ver lo que él hacía pero con los sonidos era capaz de imaginarse sus acciones.

-Necesito tu ayuda...- dijo en un tono nervioso.

-¿Por qué?- un sonido de un líquido se hizo presente- ¿Ocurrió algo anoche con tus compañeros?- Jungkook se tensó de solo pensarlo...había dado justo en el clavo.

-N-no, no quiero hablar de eso

-¿Hmm?, ¿por qué tan nervioso oficial?- dijo en un tono burlón- Acaso... ¿tiene algo que ver con su compañero Lee?... O tal vez aquel criminal, ¿Hoseok?- Jungkook no pudo responder y simplemente tragó saliva.

-Bueno no es necesario que me expliques, tu silencio lo dijo todo

Jungkook pudo notar el brillo del vaso de cristal relleno de alguna sustancia que le ofrecía Rap Mon y con timidez lo tomó.

-Cambiando de tema, te agradezco que vinieras aquí, me ahorraste la molestia de tener que llamarte

-¿Por q...?

-Han secuestrado a Jin- la voz de Rap Mon de un momento a otro se hizo grave y a pesar de que Jugkook no lo podía ver sabía que probablemente tenía una expresión seria.

-¿Quién?

-Jimin...


P.R.E.Y. (BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora