Capitulo.-1

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       Abrí un poco los ojos y los volví a cerrar por culpa de el sol, lentamente los logre abrir, escucho y veo el agua, eso solo me confunde y hace que me pregunte :¿como llegue?, ¿dónde estoy? o la que más me preocupa, ¿quien soy?. Me paré nerviosa y sentí como el estómago se revolvía y gruñía, sentí la necesidad de comer algo urgentemente, pero no sé cómo sacar la comida ni dónde sacarla.

   Me adentro a lo que parece un bosque a ver si encuentro algo de comida, mientras voy entrando también voy perdiendo de vista la costa, me volteé por un ruido y veo a un pequeño cordero, que se queda mirándome por unos segundos pero después se va corriendo. En esos pocos segundos mi estómago había vuelto a gruñir.

   Camine todo lo que pude, hasta llegue a retractarme de haber dejado al cordero huir, pero me resignaba a darle tantas vueltas al asunto.
Cuando veo que hay un lago escondido por los árboles me acerco y al ver otro cordero corro hacia él y él también corre pero él hambre logró que lo alcanzará y me tirara encima de él, él intenta de huir pero lo sostengo del cuello, y me sentí como la peor persona del mundo cuando me doy cuenta que lo mate, pero si no lo hacía él hambre iba a matarme.

    Me siento en la roca y lo miro con ganas de comerlo crudo. Pero decido intentar hacer una fogata, que no sé cómo era que si sabía hacer eso pero no lograba acordarme de mi propio nombre.

    Cuando cae completamente la noche me empieza a entrar el frío, estoy solo con un un sostén y un short, me acerco a la fogata para calentarme las manos. Me paré un momento y con muchas hojas envuelvo lo que queda de cordero para el día siguiente.

      Me despierto por el amanecer y con más hambre que ayer. Siento que en algún momento me voy a desmayar por no comer. Me levanto de la incómoda roca y  agarro al cordero para ir comiéndolo mientras vuelvo a la costa. El miedo me entra cuando empiezan a escucharse unos ruidos muy fuertes, no puedo huir; estoy paralizada. Reaccionó cuando el sonido se hace más fuerte y corro al lado derecho, para no dar vuelta atrás.

     Cuando me paro para descansar me doy cuenta de que he dado vueltas en círculos; he llegado de nuevo al lago.

  Tenía mucho miedo, no reconocía de dónde provenían esos ruidos pero me tuve quedarme con la duda. Pero me preguntaba si era otra persona, así como yo.

La costa sería un buen lugar para quedarme porque es un lugar abierto donde si alguien pasa me podrá localizar con mayor facilidad, aunque no este tan cerca de agua dulce o de los corderos.

Mientras retomó mi camino de nuevo a la costa voy agarrando ramas del suelo hasta que no puedo más y los tiro apenas llego a donde tenía pensado.

Lo primero que se me ocurre es buscar unas sogas o crearlas, lo cual no me acuerdo pero tendré que averiguar, por el momento decidí usar unas hojas largas y no tan resistentes para amarrar las ramas. Después de mucho trabajo tenía una pared de 5.5 pies más o menos de alto y 3 pies aproximadamente de ancho.

Tenía mucha sed entonces me devuelvo a buscar el lago pero ahora dejo un camino de rocas para poder ubicarme más rápido y tener menos posibilidades de perderme. Lo conseguí más rápido de lo que pensé y puse mis manos en forma de que no se me escapara tanta gua entre ellas y tome agua, el alivio fue instantáneo y repetí la acción tres veces más. 

Me pregunté se me estaban buscando o si era una persona irrelevante, entonces me viene el recuerdo de yo gritándole a un chico y el chico tenía cara de seriedad como sino le importara, no entendía los gritos pero sabía que no estaba diciendo cosas bonitas, cuando aparece un hombre el cual es más borroso que todo lo demás y en el recuerdo lo abrazo, ahí fue cuando mi recuerdo termino y yo tenía un dolor de cabeza enorme. Muchas preguntas rondaban en mi cabeza las cuales solo causaban que me doliera más, no sentía hambre entonces me dormí ahí, de nuevo cerca de el lago.

¿Alba?(1temporada ¿Yo?)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora