¿Alba?(1temporada ¿Yo?)

Capitulo.-5

No puedo, no sé qué hacer, todos los problemas vienen de él, Axel. Hemos empeorado, no conseguimos tanta comida como antes, no hemos agrandado la casa, y el no hace nada, literal, no hace nada. Pero no lo puedo botar, no quiero.
El me gusta, el, el y nadie más. Lo conozco desde hace una semana, pero siento cercanía hacia el, hoy le quiero preguntar, que le parecería conocernos mientras buscamos conejos.

Entro en la casa, con mi conejo, solo falta el de él.

Lo veo en el suelo sonriendo y con un pescado, lo primero que me viene a la mente es "consiguió comida".
Avanzó hasta sentarme a su lado devolviéndole la sonrisa.

-Mira lo que pesqué.-Dice entusiasmado, suelto una carcajada y asiento con la cabeza.

-Hoy comeremos los dos pescado y conejo.-Dice mostrándome que va a compartir, pero lo de conejo lo dijo en tono de pregunta.

Asiento de nuevo.

-Estás callada, ¿Que te paso?.-pregunta encarnando una ceja.

-Nada.-Digo encogiéndome entre los hombros.

-Yo si te quería decir algo aparte de lo del pescado.-Dice y lo miro fijamente.

-¿Que te parecería si construimos una casa para los dos?.-Dice y se remueve el cabello. Me gusta su idea, después de todo igual compartiremos techo.

-Me parece bien.-Cuándo término la palabra, el sonríe y acerca sus labios a mi mejilla.

Siento como el calor me sube hasta las mejillas.

El me sonríe nervioso y no puedo evitar alargar los labios y sonreír.

Cuando llevábamos un rato sin movernos se escucha un ruido a fuera, los dos salimos corriendo y no vimos nada.

De nuevo sonó "Boom", no me dio tiempo de reaccionar cuando ya me constaba respirar.

Axel me abrazo poniendo mi cabeza en su pecho mientras trataba de caminar a la casa. Siento un peso sobre mi, Axel se desmayo.
No.
No.
No.
Me agarro del brazo y arrastrándolo entro en la casa. Me quito la camisa y la engancho en el hueco de la pared.

Me acerco a Axel que está  acostado en el suelo, me arrodillo a su lado.
Siento como su respiración se vuelve más débil y recuerdo:
-Tranquila.-Me repetía un hombre de barba. Me costaba respirar en ese momento, me veía joven.

Una mujer se acercó a mí y dijo:

-Por favor, tú puedes...-cuando iba a decir mi nombre vuelvo al presente.

Axel, debo centrarme en el.
Me acerco a él y le digo las mismas palabras que me dijeron a mí antes.

-Tu puedes Axel, sobrevive, Hazlo por mi, por favor.-Digo y me pongo a llorar.

No sé porque, pero reacciono juntando nuestros labios.

Cuando me separo, él empieza a toser...