Capitulo.-21

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Estar con Axel me hace feliz, pero esa felicidad trae consigo dolor y tristeza. Me quiero quedar cerca de Axel pero el dolor que me da quererlo es mucho. Quiero que tengamos una casa y vivamos como personas normales, pero se que eso no se podrá cumplir porque los males están detrás de nosotros. El porque a que los males nos persigan lo tengo claro, y la solución también. Para que cada uno pueda seguir avanzando y no hacia el peligro, me voy a ir del hospital que me trajeron me voy a alejar de Axel, tanto insistir en estar con el no a salido bien.

Me levanto con cuidado de la camilla y se instala un dolor en mi pierna, pero con tantos dolores que he sentido lo ignoro camino hacia la mochila que siempre llevamos Axel y yo, saco el único conjunto de ropa que tengo, y me cambio la bata por un pantalón de Jean y una blusa azul claro también saco nuestros ahorros para pagarle a algún taxi. Camino hacia una ventana en de la habitación, me asomo y descubro que estamos en el segundo piso, busco el seguro de la ventana y lo quito. Abro la ventana y saco un pie a fuera y hago lo mismo con el otro, me apoyo de un relieve del edificio y después doy un paso hacia adelante para caerme. Mis piernas chocan contra el piso con todo mi cuerpo, me levanto ignorando el dolor de la pierna que ahora es más fuerte.

Camino lejos de él hospital y de Axel.

Veo un taxi a lo lejos y le levanto la mano para que me vea, el auto se acerca a mi y cuando está en frente se baja un chico más alto que Axel, debe medir más o menos 1.95, sus facciones son muy fuertes, sus ojos son de un azul más brillante que el de Axel, la nariz la tiene delgada y el chico se acerca a mi y me susurra cerca del oído lo que hace que me estremezca.

-¿A donde quiere ir?.-Me dijo con cortesía, se me corto la respiración con esa pregunta porque no me sabia la respuesta.
Rápidamente se me ocurre un plan.
Me acerco y le susurro.

-A un Hotel que sea barato y este muy lejos.-le digo bajo en su oído.
Me monto en el taxi, el taxi huele a colonia de hombre y está muy limpio. El chico arranca y pone música en la radio del carro, no me conozco las canciones pero el ritmo me encanta.
Después de un rato el chico para el auto y dice.

-Ya llegamos.-Dice y me mira expectante mientras que yo miro la mansión que hay al frente.

-¿Dije un Hotel barato?.- digo yo, esto puede ser grande pero pinta de barato no tiene. El chico soltó una carcajada ronca y contesta.

-Es mi casa, eres muy joven te aseguro que no tienes ni dieciocho años, no podrías pagar el hotel, y tranquila solo me diste pena y te traje para mi casa.-Dice con un tono amable y dando a entender que me está ayudando de verdad. No me importa que sea por pena.

-Muchas gracias, cuánto te tengo que pagar por esto.- le pregunto porque adivino que no lo hará a lo gratis.

-Nada, es un favor, te puedes quedar solo un día porque mis padres vienen mañana.-Dice y no me contengo y lo abrazo diciendo gracias miles de veces.

El me ayuda a bajar y caminamos hacia una puerta de cristal blanco como toda la casa. Es muy grande y se que no estoy  acostumbrada pero todo lo hago para estar lejos de Axel, un segundo lejos y ya me pasan cosas buenas y espero que a él también le pasen cosas buenas por eso hago esto.

El chico habré la puerta y me dice;

-No tendrás que preocuparte de que hayan más personas y caerles bien porque vivo solo, a demás te prometo que yo no te haré nada.-Dice y lo abrazo.

-Gracias por todo esto, creo que eres la mejor persona que conozco en mi vida.-Le digo, no estoy mintiendo, es la mejor persona pero no a la que más amo.

-¿Como te llamas? Yo soy Jacob Brown.- dice él con tono amable y me sonrojo de la confianza que tome para abrazarlo tantas veces y ni saber su nombre.

-Mi nombre es Alba Hagnons.

¿Alba?(1temporada ¿Yo?)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora