Cap XLV

588 32 20
                                    

Durante la noche del jueves 17, Nastya y Daniel hacían arribo en Moscú, el castaño, luego de dejar a su novia y el equipaje en casa de Nastya, se dirigió al apartamento de su amiga; sin imaginar en que estado la encontraría, pues si para él era difícil procesar el rompimiento de la ahora ex-pareja, para Julia obviamente sería mucho peor; y si, tenía muchas dudas y preguntas, pero lo principal para Daniel era apoyar a su morena amiga.. bueno a Elena también, aunque la poca información que tenía de la ruptura de la pareja, encasillaba a Elena como la 'culpable.' Daniel sin embargo prefería otorgarle el beneficio de la duda hasta al menos poder hablar con ella, ya luego sacaría sus conclusiones, pero eso luego, lo primero era Yulia, y precisamente, en ese momento, por tercera vez consecutiva tocaba el timbre del apartamento de la ojiazul, al abrirse la puerta, su mirada se topó con lo que parecía una caricatura grotesca de su amiga, en su expresión podía percibir sorpresa y molestia, su rostro lucía apagado, pues el brillo que su mirada mostró durante los últimos meses era inexistente, se encontraba frente a una imagen que se le hacía conocida, aunque con unos cuantos años más encima, porque la Yulia tenía frente a si, era, sino la misma, una muy parecida a la Yulia con la que se topó años atrás, lo que evidenciaba la proporción del efecto provocado en la morena por esa ruptura que nadie vio venir.

D: "Sorpresa." Musitó, aunque hasta para él sonaban vacías sus palabras mientras estrechaba a la morena en un abrazo necesitado por ambos.

Y: "No sabía que venías." Murmura con voz apagada contra el pecho del castaño, y si, una parte de ella se alegraba de verlo.. o intentaba, porque no podía considerar que la alegría tuviera algo que ver con ella, no en la última semana.

D: "Por eso mismo, sorpresa." Insiste dejando un beso en la oscura cabellera de la morena justo antes de que el abrazo se rompa y poder entrar al apartamento, cerrando la puerta detrás de si, echando un fugaz vistazo al lugar que parecía exactamente el mismo en el que estuvo la última vez, todo parecía en perfecto orden, incluso las fotos de la ya no pareja adornaban algún mueble.. como si nada hubiera cambiado en ese aspecto, solo era una ilusión porque Elena no estaba allí, solo su recuerdo.

Y: "¿Cómo está Katherine?" Indaga sin querer hacer algún comentario ácido sobre la no grata sorpresa que Daniel le dió, no que le molestara su presencia, en verdad lo había echado en falta, había deseado estar a su lado en los momentos difíciles también.. pero sabía que ahora él tocaría un tema que a Yulia para nada le apetecía.

D: "Mucho mejor, aunque bueno, no quiere seguir las indicaciones del médico." Comenta mientras sus pies al igual que los de la morena se desplazan hacia la cocina. "Te manda saludos, y dice que espera verte pronto.. quizá venga cuando el médico la autorice a viajar." Le cuenta estando ya sentado en uno de los taburetes junto a la barra, mirando con extrañeza la copa de vino blanco que reposaba en la barra.

Y: "Podrías haberte quedado unos días más con ella.. y bueno, me gustaría verla también." Habla mientras busca una copa para Daniel, ofreciéndole lo mismo que ella bebía, vino blanco.

D: "Mamá está en casa hace días, su estado es mucho mejor, solo tiene que cuidarse un poco.. ya sabes y no que me haga caso.. al contrario, queriendo atendernos a Nastya y a mi hacía más esfuerzo." Su voz sonaba suave mientras que su mirada se alternaba entre el rostro de Yulia y la copa de la que ahora bebía un trago de vino.

Y: "¿Qué tal resultó eso?" Indaga sin muchas ganas, aunque la verdad prefería hablar de ese tema una y mil veces, sabiendo que lo otro era inevitable, pues Daniel tenía el signo de interrogación dibujado en la mirada, sabía la morena que se esforzaba por no hacer preguntas aún.

D: "Aunque Nastya estaba muerta de nervios, se llevan más que bien." Responde con una tenue sonrisa. "Bueno, aunque mamá no dejó de lamentarse porque no fueras tú.. creo que nunca lo superará." Bromea robando una pequeña y casi imperceptible sonrisa a su ojiazul amiga.

Ella me recuerda a él.Where stories live. Discover now