Un Novio & Cuatro Amantes (One Direction & Tu *HOT*)

Capitulo 25

Las manos de Harry no pierden el tiempo, y buscan el broche de mi sostén.

─¿Lista?─ susurra a mi oído, pero no me da tiempo a responder. Bajo los brazos y dejo caer la prenda, separándome de Louis.

Este abre la boca ante el gesto inesperado de Harry y se me queda mirando. ¡No puede estar pasándome otra vez! Corren los segundos y Louis permanece de pie, con la mirada fija en mi cuerpo semidesnudo.

Avergonzada, corro y me escondo detrás de Harry, envolviendo su cintura con mis brazos. Él suelta un jadeo al sentir mis pechos contra  su espalda, pero, en lugar de alejarme, me presiono más contra su cuerpo.

─Louis, no sabes tratar a una mujer─ le regaña el rizoso. Intento con todas mis fuerzas no reírme, pues Harry hizo exactamente lo mismo aquella tarde en el baño. O sea, nada.

─Lo siento, _____─ asomo los ojos, casi asustada, con mis labios apoyados en el omóplato izquierdo de Harry. El ojiazul me mira realmente preocupado y arrepentido.─ No lo volveré a hacer.

Después de un minuto en absoluto silencio salgo de mi refugio- ubicado en la espalda de Harry- y muerdo mi labio. Eso que acabo de hacer fue lo más inmaduro que he hecho nunca.

Se cansarán de mí cuando se den cuenta de que soy una simple niña inexperta, si es que no lo han hecho ya. Y, en este preciso momento, no me agrada la idea.

Incapaz de sostenerles la mirada por más de cinco segundos, miro hacia mis pies. Soy una idiota.

Oigo los pasos de Louis, que se aproxima. Toma mi rostro entre sus manos y me besa. Tal vez no les importe cuán tonta puedo llegar a ser cuando de sexo se trata. Quizá me acepten como soy.

Le devuelvo el beso. Tomo una de sus manos y la coloco en mi seno. No para mi propio placer, sino intentando compensar lo que acabo de hacer.

Las manos de Harry vuelven a acomodar mi cabello y empieza a depositar besos mojados por mi espalda descubierta. Desaparece la percepción de mis sentidos un momento y luego alguien toma mi pie derecho. No me queda más que asumir que es él.

Harry se deshace de mis zapatillas y calcetines mientras que Louis continúa besándome y masajeando mi pecho. Por primera vez en mi vida me decido a tomar la iniciativa e introduzco mi lengua en su boca.

No me considero una gran besadora pero, a juzgar por el modo en el que Louis se presiona contra mí y profundiza el beso, supongo que me defiendo bien en el área.

En este momento me olvido completamente de Niall. Lo único que siento es calor. Fuego. Lujuria. Y placer.

Louis muerde mi labio y tira de él con una sonrisa pícara y una mirada juguetona. Es probable que esté sangrando y admito que duele, pero no puedo evitar reír.

Mientras tanto, Harry se encarga de deshacerse del resto de ropa que llevo puesta. Me quita los pantalones y luego besa mis talones, se eleva hacia mis tobillos, mi pierna, la parte de atrás de mis rodillas y se detiene en mis muslos. Luego vuelve a iniciar el procedimiento con la otra pierna.

Siento que me cosquillea todo el cuerpo, sobre todo en cada punto de mi piel en el que Harry deposita sus tibios y húmedos besos.

Louis se ocupa de atraer mi atención, atrapando mi pezón con su boca. Suelto una serie de gemidos entrecortados por la falta de aire. En vano, muerdo mis labios intentando contenerlos.