Que, de mil veces mil, yo he amado
lo menos mil doncellas casaderas
(y otras tantas ya casadas de veras),
que soy diestro en amar; está probado.Que yo el amor sin pausa he practicado,
las nobles y plebeyas parideras,
proclaman por doquier que las oyeras;
decenas de hijos me han adjudicado.Así que guárdense ya, vuesas mercedes,
bravatas y espadas bajo capa;
que a veces ganas más si retrocedes.Mas yo os digo agora que se escapa
fugaz, tiempo de amar, si no procedes.
¡Muden sus aceros por dama guapa!