Desperté de mi corto sueño con la garganta seca, y digo corto porque el insomnio había decidido llegar para quedarse.
Mis pensamientos estaban revueltos, igual que mis cabellos después de un buen sueño. Pero éste no era el caso, mis cabellos se encontraban así por las vueltas que daba para conciliar el pequeño sueño que logré alcanzar...
Bajé a tomar agua, normalmente tenía una botella, odio bajar por la obscuridad... Me da miedo.
Llegando al último escalón, éste rechinó, justo ahora que bajo yo. Por lo general nunca lo hacía a ese ruido.
Me acerqué a la cocina y escuché que alguien más estaba ahí, escuché como dejó un objeto y comenzó a caminar a mi dirección. Su respiración se sentía agitada y pesada a su vez. Ese ser que me acompañaba tosió.
Mi respiración comenzó a cortarse, mis movimientos eran torpes. Él estaba a escasos centímetros de mí...
No pude evitarlo y un sollozo salió de mí.
-¿Quién eres?- dije casi al borde de un colapso.
-¿Aby?- al reconocer esa voz, todo mi cuerpo desvaneció, desvaneció por alivio. Estaba agachada con mis manos en mi cabeza.
-Seras tonto...- dije en un susurro.
-¿Dónde estás?- dijo avanzando. Se ve que quiso prender la luz, pero al intentarlo se tropezó conmigo que seguía en el suelo, logrando que cayera hacia atrás con él en cima mío.
Otra vez la misma incomoda situación... Y más que yo estaba con un short muy corto y él...¡Dios mío! Estaba sin camisa.
-Yo... Lo... Siento. No quise, no quiero... Digo... Perdón.- dijo tartamudeando y nervioso.
-Si, está bien. No te muevas mucho, será peor.- trató de levantarse, yo igual, pero volvió a tropezarse y terminar nuevamente cerca mío... Demasiado diría yo.
Nuestros alientos se mezclaban, mi corazón latía a mil... Él estaba ahí, a escasos centímetros. Y no podía reaccionar, como si el tuviera... Un pedacito de mí que me impide alejarlo.
De un momento a otro, él acercó sus labios a los míos, no reaccioné de inmediato. Me dejé llevar, no entiendo qué pasó por mi cabeza en ese momento, simplemente... Lo besé ¡Dios mío, lo besé!
Nuestros cuerpos estaban casi completamente unidos, pero no me resistí a enroscar mis piernas a su alrededor, como no me resistí a él, como no me resistí a nada...
Era un beso tierno, lleno de amor, lleno de... Protección. Uno que me decía, que no importa que pase, él siempre va a estar...
Y reaccioné, no sé si de la mejor forma, pero reaccioné.
Lo empujé, tapé mis labios y para finalizar, le propine una cachetada.
-Perdón, no debí pegarte.- no pude verlo, pero sentí una sonrisa a través de la sombra.
-Disculpame a mí... Yo no debí haberte besado.- se disculpó él.
-¿hermanos de nuevo?- pregunté.
-Hermanos de nuevo...- afirmó.
Nos levantamos y él fue a su pieza. Yo tomé agua y...¿Que rayos acaba de pasar?
Me dirigí a mi habitación, y a mitad de las escaleras me di cuenta de una cosa... Estaba sonriendo.
8:30.
Aquí estaba, sin querer moverme. La cama me había atrapado en ella... Hoy tenía planeado bajar a mi cochera, en donde tenemos nuestro "GYM". Pero, literal, no me podía el cuerpo.
A las 12:00 había quedado con Ethan... Pero ahora se me hará incluso incómodo verlo...
Creo que me voy a quedar un rato más...
10:32.
Por Dios ¡No sabía que podía dormir así! A veces me sorprendo de mi propia vagancia...
Pero he de aceptar, que esas horas de más, estuvieron deliciosas...
Me levanté de un brinco, estiré y bajé a desayunar. Comí algo ligero ya que probablemente termine a las 12:40.
Una vez lista mi rutina, transpirada y asquerosa fui a bañarme. Al finalizar me coloqué ropa deportiva, nuevamente. Bajé.
-¡Buenas tardes!- comentó riendo mi padre. Me lo encontré cocinando.
- Hola...- dije brindándole una sonrisa.
-No pensé que durmieras tanto...- dijo incrédulo.
-En realidad, me desperté antes, pero fui a bañarme ¿Los chicos?- dije sin interés tomando agua.
-Salieron al parque.- dijo picando cebolla.
-¿Ethan los está cuidando?- dije dudosa.
-¿Quién es Ethan?- golpeé mi cabeza.
-Quiero decir, Travis.- el volteó.
-Si, ahora responde ¿Quién es Ethan?- rodé los ojos.
-Un amigo, papá.- miró con los ojos entrecerrados y solo se limitó a asentir.
Salí hacia el parque, ya que no tenía nada mejor que hacer. Quería estar con mi hermanita.
Al llegar, pude divisar a Travis, por ser el más grande, y a una dulzura en el columpio.
Simplemente me acerqué y comencé a jugar con mi hermana.
-Podemos hablar.- dijo Travis. Simplemente asentí pero agregué algo.
-Ahora no, déjame un rato con mi hermanita.- él asintió y se fue a jugar con mis hermanos a la pelota.
Por algún motivo me daba gracias verlo jugar. Por lo general lo jugadores de básquet le hacen al fútbol. Tienen coordinación, por lo que veo, Travis es uno de esos.
-¡Upa!- decía mi hermana alzando los brazos. La cargué sin protestar y me dirigí donde ella lo pidió.
-¡Oigan, hacen trampa!- protestó Travis en contra de mis hermanitos. Una risa se me salió, él me miró y sonrió.
Probablemente me sonrojé al ver sus ojos y la manera en la que él me sonreía. De verdad... No sabía que me pasaba con él, no sabía por qué actuaba así... Me sentía muy confundida.
Debía hablar con él...
(N/A no sé si estoy loca, pero me emociona escribir los pensamientos de Travis.)
Pov's Travis
No podría estar más confundido... Sé que durante mucho estuve queriendo hacer eso, pero ahora no se cómo sacarla de mi cabeza. Sabía los riesgos que correría y aún así lo hice...
Pero verla ahí, tan alegre, con su sonrisa...¡Y encima a veces sonrojada! No puedo creer lo que me causa...
Si tan solo habláramos y las cartas se den a mi favor...
Si tan solo mi mente se aclarara...
Ésto está mal... Pero... La quiero.
-Travis ¿Podemos hablar?- dijo la individua en la cual estaba pensando.
-Por su puesto.- dije algo extrañado.
-Debemos olvidar lo que pasó, debemos seguir como hermanastros, como lo prometimos. Pero...- me sentí mal por dentro, pero no lo demostré.
-¿Pero qué? Tú me seguiste el beso. No puedes negar que te gustó ¿Qué? ¿Es por ese tal Ethan?- ataqué.
-Travis...- dijo con la cabeza agachada.-Yo no...-
-No te preocupes, tampoco fue nada para mí...- dije lo más frío que pude, y creo que fue lo mejor que pude haber hecho.
Pov's Aby
Yo no quería decir eso... Yo te quiero...
Y no me dejaste terminar... Pero no importa, no sientes nada, eres otro simple mentiroso, un Don Juan y mi Estúpido hermanastro.
¿Cómo puede alguien hacerte sentir tan mal en sólo segundos?
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No Podemos, Somos Hermanastros... [Editando]
Romance¿Que pasaría si tu padre se enamora tres años después de la muerte de tu madre y te estás mudando con una nueva mujer? Y ¿si ella tiene un hijo del cual empiezas a sentir cosas? Después de la muerte de la madre de Abu, su padre comienza a sali...