¡Al fin libres! Ya vacacionando y libres en la conciencia.
Nos dirigimos a la playa, Samira llevaba un triquini y yo un biquini. A ella la cubría un vestidito y a mi una campera grande con un pantalón deportivo tiro alto.
Dos de los chicos llevaban Maya y camisa y los otros dos no.
Nos instalamos, pusimos la sombrilla, la hielera y las toallas. Más las sillas plegables.
Samira y Joel no esperaron para ir a jugar a voley, y yo para meterme al mar. Pero... El ser friolenta no te ayuda mucho en esas ocasiones. Esperé a que el sol subiera más, me quité el pantalón y me puse bronceador, ya que estaba MUY blanca. Luego la campera y también me puse.
Me acosté a disfrutar lo rico que estaba el sol. Me acosté en mi toalla de sol hasta que me dió calor y volteé.
-¿Si sabes que todos te están mirando, no?- miré al provocador de aquellas palabras.
-No, no tienen porqué.- seguí en lo mío.
-Me están dando celos.- ahora sí lo miré bien.
-Me estás jodiendo ¿Verdad?- negó.
-Bueno, dame un beso, aquí, y que vean que salgo contigo.- lo rete.
-Nos van a cargar.- me encogí de hombros.
-ese es tu problema.- me volví a recostar.
En ese momento sentí como el sol se apagaba para mí y al abrir los ojos tenía un Travis encima mío.
-¿Travis, qué ha...- mis palabras fueron retenidas por el inesperado beso de Travis, comencé a levantarme y quedar sentada, el en cuclillas y yo rodeando su cuello.
Sentía como mis compañeros se callaban y las olas se detenían...
-Ahora nadie va a molestar.- sonrió pícaro mirándome.-erea hermosa.-
-¿Pero ustedes no eran hermanastros?- dijo Matías muy confundido. Llegaba a dar ternura.
-Si ¿Y?- contestó Travis para mí sorpresa.
-Tienen razón.- dijo Samira.-No hay sangre que los una.- me tendió la mano y me levanté, Travis se colocó a mí lado.
-Ya qué ¡Vamos a jugar!- gritó Joel.
Todos comenzamos a jugar a Beach Volleyball. Y me gustó ese rato, fue agradable y despejado de malas vibras.
Travis, quién estaba atrás mío, iba a rematar una pelota la cuál se la tiré muy alta, en el interin, palmeó una de mis pompis y llegó justo para rematar y hacer un tanto.
Me puse colorada.
-Perdón.- dijo sonriendo pícaro y abrazándome.- ¡Es que me tienta!- comentó como niño chico.
La tarde transcurrió risueña. Llegó el atardecer y nos metimos recién al mar, era tan cálido... Travis me abrazó de la cintura y caminamos hasta que el agua me llegó poco más arriba de la cintura. Me volteé hacia él y nos besamos.
-¡Wuuuujuuu!¡Viva el amor juvenil!- gritó Matías mientras tiraba agua hacia arriba.
-¿Quién dice que sea solo juvenil?- comentó Joel.
-Por ahora lo es.- retrucó Matías.
-Ya quisiera tener uno así...- dijo Samira apenada, Santiago miró para abajo.
-¿Quién quiere una carrerita?- grité sacándolos de contexto a todos.
-Yo.- gritaron al unísono.
-Bueno, el que llaga primero a la silla del salvavidas gana.- agarré la mano de Travis.
-Preparados, listos ¡Ya!- hice la que iba a salir y sostuve a Travis para que no se fuera, pero él pudo con mí fuerza y de paso caí al agua. Estúpido y lindo Travis...
Ya con mí plan arruinado, sólo quedaba llegar para ganar. Nadé, nadé con todas mis fuerzas hasta poder llegar. Iba tercera. Y gané en segundo lugar. Otra vez quien me ganó fue Travis ¡Maldito, maldito, maldito!
¡Aby, deja de maldecir, maldita sea!
Volví algo desanimada a levantar campamento, Travis me tomó de la mano, no lo miré.
-Ey ¿Qué pasa?- dijo Travis notando mí "entusiasmo", nótese el sarcasmo.
-Me mataste el plan...- me miró confundida, suspiré.-la carrera era para poder quedarnos solos allá un ratito.- ahí calló.
-Por eso me agarrabas...- se golpeó la frente.- perdón, soy un tonto.- me abrazó.-te lo voy a compensar ¡Ya verás!- yo negué sonriendo.
-No, no importa.- lo besé.
A la noche fuimos a cenar, tenía tanto sueño que en la ducha me tarde una eternidad. Y para cambiarme también.
Salimos y fuimos a un restaurante típico de la zona, vendían mariscos y con Samira pedimos sushi vegetariano. Los chicos pidieron casuela de mariscos.
Al ir al departamento, nos cruzamos con otros jóvenes, estrellas tanto y tanto, nos hicimos conocidos.
3 chicas y 2 chicos. Dos de las chicas eran pareja, Penélope (morocha de piel bronceada) y Amelia (Algo rellenita, rubia y ojos hermosos). Y la tercera se llamaba Britney (Morena y ojos verdes). Los chicos se llamaban Antony (Rubio ojos cafés) y Dylan (un Moreno y alto de ojos almendrados).
En una etapa de la noche, Britney, quién no nos había visto juntos como se debía a Travis y a mí, comenzó a hablar muy amistosa con Travis. Colocaba sus manos detrás de su espalda mientras caminaba y le hacía juegos. Yo por mí parte, estaba celosa... Porque Travis le seguía la conversación.
Pero en mi mente decía, está bien... No pasa nada, él no es así ¡Pero no me está prestando atención! Y además ¿Quién se cree para llegar y de la nada coquetear?
-Aby.- me llamó Travis. Fui de mala gana.-Ella hace baile igual que tú.- fingí una sonrisa.
-¿Ah sí?- aparente asombro.- ¿Qué clase de baile?-
-Hago bachata, mí niña.- dijo con tonalidad cubana mientras sacudía su cuerpo.
-Y a ésta que le pasa...- susurré.
- Serías buena compañera de baile.- me guiñó el ojo.
- Pero si la bachata es entre hombre y mujer.- la miré raro.
-¡Las reglas se cambian, mí niña!- no entendí si era indirecta o filosofía, y su acento seguía sonando raro...
-Travis ¿Qué le pasa?- dije.
- Le gustas.- dijo con simpleza.
-¿Qué?- exclamé.
-¿No te diste cuenta que cuando caminabamos te miraba?- negué con la cabeza, perpleja por la noticia.
-¿Crees que los chicos también sean homosexuales? ¿¡Y por qué no le dijiste que salíamos!?-
-1- no, no creo. Ni espero. 2- se lo dije.- no sabía si creerle, así que me quedé callada hasta llegar al departamento.
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No Podemos, Somos Hermanastros... [Editando]
Romance¿Que pasaría si tu padre se enamora tres años después de la muerte de tu madre y te estás mudando con una nueva mujer? Y ¿si ella tiene un hijo del cual empiezas a sentir cosas? Después de la muerte de la madre de Abu, su padre comienza a sali...