Hace diez años...
Un pequeño pueblo cerca de Salín, llena de casas coloniales alrededor de la colorida naturaleza, no alcanzaba los cien habitantes, todos en el pueblo se conocían y confiaban los unos a los otros, era un lugar sereno y colorido, y gracias a sus campos de sembrado es como podían sustentar a las familias del pueblo. En este humilde lugar es donde pasaron su infancia Liz y Zack.
Liz vivía con su tía y abuela ya que sus padres murieron cuando tenia dos años. Zack vivía un par de casas de la de Liz, y vivía con su madre Leonor. La madre de Zack y la madre y tía de Liz eran muy amigas, por lo que Zack y Liz son amigos desde que tienen memoria casi como hermanos. Esta historia trata como desde sus ocho años de edad, Liz y Zack aspiran a convertirse en guardias reales de Myriad.
FLASHBACK
En una mañana soleada. Un pequeño Zack dormía plácidamente envuelto en las sabanas de la cama en su habitación que constaba de una ventana al lado de la cama, una cómoda del otro lado, un pequeño armario y una mesa con su respectiva silla de madera, y algunos juguetes como carritos de madera, era una habitación sin muchas cosas, humilde pero acogedora. Los rayos del sol entraba por la ventana pero el pequeño no daba señales de querer despertar. Hasta que....
- ¡Zack! - bramó una mujer entrando abruptamente a la habitación, el pequeño Zack del susto salto de la cama cayendo al suelo con todo y sabanas, y con sus ojos medio abiertos observa a la mujer ceñuda frente a él. Era una mujer de treinta y tantos años, se veía joven, tenía el cabello castaño oscuro, tez blanca y ojos verdes, se parecía mucho a Zack... o al revés, Zack se parecía mucho a la mujer a quien se dirigía como mamá.
- ¡Mamá!, ¡me despertaste! - se quejó el pequeño
- Zack, ¡estoy tratando de despertarte desde hace horas! - La mujer se acercó para apurar a su hijo - de verdad para tener tu edad duermes como un tronco ¡faltan diez minutos para que empiecen las clases!
- ¡¡¿que?!! - gritó el niño, corriendo de inmediato a cambiarse, mientras tanto la mujer se apuro escaleras abajo para preparar un desayuno al niño. Y en menos de cinco minutos Zack se despedía de su madre en la puerta.
- Nos vemos hijo, cuídate y trata de portarte bien - Leonor lo vio con advertencia. Y el pequeño de ocho años rió
- Lo intentaré - Después de despedirse el pequeño emprendió camino a su escuela, el camino era corto, en todo el pueblo solo había una escuela con un solo salón y dos maestros. Zack se caracterizaba por ser algo despistado, siempre se la pasa en la luna, y todas las veces que sus maestros lo reprenden apenas cae en cuenta que se encontraba en la escuela. No tiene muchos amigos que digamos, la única que ha estado siempre a su lado es Liz. Y justo a un lado de la vereda por la que caminaba para llegar a la escuela, se encontraba Liz, a unos metros de distancia, a su alrededor habían tres niños de alrededor de once años, y había una niña más pequeña que Liz detrás de ella, parecía intimidada por los niños bravucones, como siempre Liz protegía a los niños pequeños de los grandes y abusadores. Liz con tan solo ocho años, se interponía ante los niños grandes sin temor alguno, su mirada estaba ligeramente ceñuda y miraba a los abusadores con reproche. Aunque siendo solo una niña su pequeño rostro enojado lucía muy adorable. (no como ahora que con una de sus miradas se te hiela el alma XD). Zack se quedó quieto un momento observando la escena
- ¡Quítate mocosa, le estamos dando una lección a la niñata llorona! - habló vacilante uno de los niños.
- ¡Venga, dejadla en paz! -
- ¿por que deberíamos?, ella se sentó en NUESTRO árbol -
- ¡¡¿Son tan maduros que no tienen otra cosa que hacer más que meterse con una niña más pequeña que ustedes, por una razón tan tonta?!! -
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La Travesía de Naiara
MaceraLa protagonista de esta historia, una princesa de diecisiete que no se comporta como una, desea vivir una vida independiente en busca de su lugar en el mundo, por lo que huye de su reino, pero las cosas se complicarán cuando se adentra a país enemig...