Una Gota de vida (James)

Capitulo 5

Fin de Semana. 
Ally había aprovechado el tiempo para regresar a casa donde estaba su padre; y de paso, buscar un vestido ligero para el baile del viernes. La verdad no planeaba disfrazarse, las tiendas de disfraces no estaban tan cerca de donde vivía y además en la primera boutique que visitó, encontró un hermoso vestido que lucía su figura, nada del otro mundo, pero ¡Se veía encantadora!-¿Eso usarás?- cuestionó su padre cuando Ally sacó de la bolsa el nuevo vestido.Ella asintió.-Me gusta- dijo él mientras leía el periódico.-Genial ¿Quieres algo de comer? Prepararé unos sándwiches- Volvió al guardar la prenda.-No gracias. Tomé algo de leche hace un rato--De acuerdo-El fin de semana no fue tan divertido como Ally esperaba, hizo algo de su tarea, salió a caminar en el parque cercano e hizo algunas compras para la casa ya que se terminaba la comida dentro del refrigerador.Así pasaron los días, algunos tranquilos y otros no tanto. Hasta el lunes que volvió al castillo, no había vuelto a escuchar nada de James. Le vio en clase de Lengua pero no se atrevió a decirle ni cuestionarle nada. ¡Demonios! Maldita atracción al misterio de aquel personaje.-¿Así que no te disfrazarás de nada Ally?- preguntó Lorena mientras se arropaba dentro de las cobijas.-No. Solo compré un vestido--Oh! Bueno, te verás bien. Pero solo espera que Stefany vea el disfraz que conseguí para las dos. ¡Te encantará!--¿A sí? ¿Cuál será su disfraz?--Sí. Dime cuál será- intervino la rubia quien llegaba de lavarse los dientes.-¡No! Es una sorpresa- respondió sonriente la jovial castaña – Por cierto, como miembro del periódico escolar quisiera tomar fotografías del primer baile de los nuevos estudiantes… y eso te incluye Ally--En realidad no….- Ally trataba de negar.-No respondas nada. Igual te tomaré fotografías- Ella apagó la luz.-Es cierto- respondió Stefany- Si no posas para la foto, aparecerán vergonzosas tomas de ti- Stefany se recostó.-Solo será una o dos de todas formas- finalizó Lorena.Las muchachas pasaron cerca de tres minutos más hablando sobre lo genial que sería el baile, las próximas tareas y el desayuno del siguiente día. Algunos waffles no estarían mal.**Miró por la ventana. Todo estaba tranquilo por fuera. Apenas y se veía el leve soplido del viento que llevaba consigo unas cuantas hojas secas de aquel suelo. Había pocas estrellas, pero la vista era magnífica.Al poco rato, cerró las cortinas de modo que el suave paisaje ni siquiera se note a través de la delgada y fina tela. Ahora, divisó a su alrededor. Sus compañeras estaban ya sumidas en un profundo sueño. Ella casi podía escuchar que roncaban. ¿Cómo era posible que se queden dormidas tan pronto? -La costumbre, tal vez- se dijo a sí misma.Después giró su cabeza hacia la fosforescente luz roja que le mostraba el reloj de luz.09:10 pm.Si salía rápidamente tomando camino a la biblioteca, tal vez conseguiría un interesante libro y regresaría a tiempo sin tener problemas y podría leer hasta que le diera sueño.Solo había un problema. ¿Dónde estaba la biblioteca? Buscó en el velador junto a su cama y no encontró el mapa guía de la escuela que había adquirido en el ingreso.-¿Dónde demonios lo había dejado?- se preguntó.No había de otra. Ally estaba casi segura de que lo había puesto ahí; y no pretendía tratar de dormir cuando tenía energías de sobra en todo su cuerpo.Se decidió despertar a Lorena para preguntar, no sin antes tomar su celular para observar en él, el transcurrir del tiempo, mientras trataba de encontrar el sitio.-¡Mujer!- respondió algo abrumada -¿Qué quieres? Ya duérmete--Solo dime, en donde se encuentra la biblioteca por favor- susurró Ally.-¿Y vas a salir a esta hora?- miró de reojo el reloj de luz- No creía que eras de las que buscan problemas- rió por lo bajo entre bostezos.-No estaré en problemas--No creo que tengas suficiente tiempo, pero te diré-Lorena se sentó mientras daba un rasqueteo a su cabeza y trataba de que sus ojos estén abiertos. No lo conseguía del todo, pero al menos le hablaba a Ally.-Hay dos secciones- dijo – Una está avanzando el pasillo de enfrente. Caminas hacia el fondo y giras a la izquierda y por último a la derecha. Encontrarás un letrero que dice “Biblioteca Principal”. Si no, la otra está bajando las escaleras junto al pasillo de aquí cerca, luego vas hacia el fondo y atraviesas el segundo patio, ese que tiene la pileta en el centro – hizo una señal con las manos, tratando de dibujar aquella escultura -Encontrarás otro pasillo cerca y vas a la derecha. Es fácil. Pero no te recomiendo ir a la segunda sección. Ahora, ¡Buenas Noches!--Otra cosa, ¿Hay cámaras escondidas por aquí?--Si de algo estoy segura es… que no hay ni una sola- respondió escondiendo su cabeza entre las almohadas.-Claro. Hasta mañana- mencionó Ally rendida. No pretendía molestar más a su compañera de habitación.No estaba segura si había entendido después de todo, ni siquiera había tenido tiempo de recorrer la escuela. ¡Era Enorme!Salió despacio de su habitación, algunas luces aún estaban encendidas en otros dormitorios. Los de los pasillos se apagaban cerca de cinco minutos después. Así que debía ser rápida. Caminaba con sigilo y prisa, mientras trataba de recordar las instrucciones “guía” de Lorena.Al fin, encontró la primera sección de la que le había hablado. Justo al aparecer en el pasillo, vio salir del lugar al director. Él estaba cerrando la puerta mientras hablaba con su secretaria.Ally corrió en puntillas y silenciosamente, a la vez que trataba de regresar a su habitación.Cerca de esta, observó que el directivo cambió de rumbo dirigiéndose hacia ella. ¡Era imposible que corriera hasta el dormitorio sin ser vista!Sin más, bajó por las escaleras más cercanas y tomó rumbo hacia la otra sección.Por suerte, la encontró rápido. Justo antes de que todas las luces de los pasillos se apagaran instantáneamente.-¡Diablos!- susurró.Miró su celular.09:25 pm.Las puertas estaban semi-abiertas, pero no había luz dentro. Creyó escuchar un ruido cerca, y el temor de que fuera el director quien la encontrase, le hizo entrar sin preguntárselo dos veces.Trató de alumbrar el lugar con la tenue luz de su teléfono celular.¡Tenebroso! Era como describía Ally a ese salón lleno de libros. Algunos incluso tenían telarañas y polvo sobre las portadas que alcanzó a distinguir.Caminó lenta y temerosamente por entre los estantes hasta que distinguió una luz cerca.Primero, vio un escritorio; una lámpara encendida cuya luz era como el cielo; y luego un libro abierto que era leído por un ser que no esperaba encontrar.-¡Jesús!- pronunció su mente al tiempo que quedó paralizada. Sin embargo, ni una sola letra salió de su boca.Al principio, el miedo la invadió; su mente y cuerpo se habían paralizado. La sangre se le había esfumado quién sabe a donde y por consiguiente sintió un frío recorrer su sistema nervioso.Luego, trató de calmarse sin mostrar temor ante ese ser. Se dijo a sí misma que tal vez era el miedo del lugar. Pero no, frente a ella estaba algo que no le daría ningún tipo de inquietud, si lo hubiera visto en otro sitio; o por lo menos, en otras condiciones. Le miró con cuidado; y pronto, su corazón volvía a latir lentamente.Una niña. Ella permanecía sin moverse mientras ojeaba el libro; y, sus pupilas apenas se movían con el pasar de los escritos. Pronto levantó la vista para contemplar a la visitante. La tranquilidad en la pequeña, era tan increíble que Ally llegó a pesar que era un fantasma o un alma perdida. Tal vez algo de lo que tanto hablaban sus compañeras. La infante, giró un poco su cabeza hacia el hombro como mirando a Ally con curiosidad. Ella, por su parte, pudo observarle mejor. Cabello lacio y caído sin ningún arreglo. Labios extremadamente rosados. Ojos oscuros y tan penetrantes como los que había visto solo en otra persona más, James. Pero sobretodo, tez extremadamente blanca.Cuando Ally estuvo más calmada, pensó que la niña se veía así por la luz de aquella lámpara. Es decir, solo una ilusión para sus ojos. Incluso miró sus manos ya alumbradas, y se veían igual. Intentó que su corazón continúe bombeando sangre, pero no fue capaz de pronunciar palabra. Algo, que la chiquilla, aprovechó.-Tienes miedo- afirmó volviendo a mirar su texto.-¿Tú no?- consiguió hablar.-¿Por qué habría de tenerlo?- respondió una melodiosa voz, que casi asustaba. Esa misma voz que utilizaban los niños diabólicos en las películas de terror.-Estás aquí. Sola. En medio de la oscuridad- musitó Ally sin poder evitar mirar a su alrededor.-Es mi amiga--¿La oscuridad?-La niña solo asintió, mientras daba la vuelta una hoja de su libro.-¿Có…. Cómo te llamas?- preguntó la joven, casi tartamudeando.-Soy Ciara. ¿Tú eres…?--Ally--Ally…- repitió Ciara para sí, como tratando de entender el nombre… o quizá solo memorizarlo – Oh… si... Te conozco-