-¿En qué problema te has metido?- le preguntó Logan mientras encontraba a Ally caminando hacia la que sería su primera clase del día.
-¿De qué hablas?- Ella se detuvo.
-La secretaria me ha dicho que el director te está buscando. O más bien, te está esperando en su oficina- explicó-¿Qué hiciste, eh?-
Ally tartamudeó sin saber la respuesta y luego de varios segundos, calló.
-Solo ve…- Logan le sonrió tranquilamente dejándola ir. Ella agradeció su comprensión y cambió de rumbo.
El corazón de Ally latió rápidamente en señal de nerviosismo. Y aunque ignoraba el motivo por el que la requerían en la dirección, temía que fuese por… muchas cosas en realidad.
La noche anterior después de aquel beso, James solo se había separado de ella como si nada, le había dirigido una mirada de sorpresa, y luego se había marchado sin más. Se había burlado de su ser, no cabía duda.
Sin embargo, al salir de su habitación por la mañana, había encontrado una pequeña rosa roja frente a su puerta; un capullo a medio abrir mas bien. Lo tomó con cuidado como si se pudiera romper, e ingresando de nuevo, lo dejó sobre su almohada.
Desconocía si se la habían dejado a ella, o simplemente se le había caído a alguien por ahí. Nuevamente, alejó los cuestionamientos de su parte… y salió.
Antes de entrar a la dirección, tomó aire.
-Pasa… Ally- le indicó el director sin verla siquiera. Él miraba la ventana posterior – Cierra la puerta- le dijo tranquilo y ella obedeció.
La joven entró cargada de nerviosismo pero fingiendo estar completamente bien. Se sentó dejando su bolsa a un lado y cruzó sus piernas reposando delicadamente sus manos sobre ellas.
Ben suspiró largamente dándole aún la espalda.
-¿Cómo has estado?-
-Bien… Gracias- natural, respondió aunque le extrañaba a donde iba la conversación -¿Y... usted?-
-¿Yo?- Se giró hacia ella mostrando una sonrisa corta y algo sarcástica aunque no estaba segura de si esa ironía iba dirigida hacia ella o hacia él mismo –Algo… intrigado.
-¿Puedo cuestionar porqué me mandó llamar?- Sin rodeos. Todo de frente.
-Necesitaba aclarar unas cuantas cosas- le dijo sin expresión mientras se sentaba frente a ella.
La puerta se abrió. Ally prefirió no tornar la vista. El visitante entró y se dirigió hacia el director.
-Aquí tienes Ben- El corazón de Ally se paralizó cuando vio que James le entregaba los escarpines y las fotografías que ella había estado manoseando el día anterior. Como instinto comenzó a abrazar sus manos ya heladas por los nervios. ¡Diablos!- pensó.
Ben echó las fotografías a un lado del escritorio y cerró los ojos con fuerza. James colocó una de sus manos sobre los hombros de él y así, su padre pudo recibir un poco de apoyo. Con un lenguaje de miradas y asentimientos se comunicaban el uno al otro. El progenitor, nuevamente volvió a cerrar los ojos, quizá buscando las palabras adecuadas para comenzar. Ally solo observaba sin mover ni un pelo, pero al mismo tiempo sin mostrar expresiones que delataran sus nervios.
Al fin, James alejó su mano de Ben y volvió su vista a la muchacha. Su expresión era seria, pero a pesar de eso, Ally no supo identificar lo que sus ojos trataban de decirle. Parecía mas bien que sus cristales acababan de recibir la noticia de la muerte de alguien. ¡Indescriptible mirar! Sí. Así de raro, trágico y hasta temerosamente visible era.
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Una Gota de vida (James)
Teen Fiction"Una gota de vida" es una nueva novela que narra la vida de Ally quien es una muchacha soñadora considerada por los demás como "anti-social" . Actualmente vive con su padre, quien a veces puede ser un completo extraño para ella. Él decide enviarle...