¿Un Adiós?

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Mi respiración empezo a aumentar cada vez más,ya no aguantaba ,ya quería qué me hiciera sentir tanto placer cómo aquélla noche,así qué me acerqué a su oído y le susurre con voz sensual.

- No me hagas esperar, he tenido suficiente de éso.

acerque mis labios a su boca senti su respiracion acelerada,lo bese apasionadamente, nuestras lenguas se encontraron,lo arroje a una silla y me sente sobre el dandole la espalda,estando ahí comenzó a besarme toda la espalda y los hombros,después me levanto de la silla y me llevó contra la pared y de un solo movimiento se quito la camiseta y desabrocho su pantalón,se puso el condon y me levanto contra la pared haciendo que mis piernas rodearan su cintura,ahora sus movimientos eran más fuertes,yo estaba tan excitada qué de mi boca empezaron a salir gemidos,él de inmediato me tapo la boca y con voz acelerada me dijo...

-Tranquila nos van a oír.

-Lo siento no puedo evitarlo.-recalque con voz acelerada.

Al terminar los dos tratamos de recuperar nuestra respiración mientras nos vestiamos nuevamente,él me miraba fijamente.

-¿Qué tanto me mirás? -dije un tanto apenada.

-Eres muy bella,me vuelves loco,debés tener hambre ¿No?

-Un poco.-dije mientras agachaba la cabeza.

-Perfecto ¿Qué te parece si te invito a tomar un café?

-Emm,ésta bien,pero no debo tardar tengo muchos pendientes en la oficina.

Salimos de la sala de juntas y Gerardo me dio una sonrisa y al pasar por su lado me dio unas pequeñas palmadas en la espalda,al salir de la empresa Pablo me dijo qué nos iríamos en su coche,yo accedí e iba un poco nerviosa,siempre había sido muy penosa y no entendía cómo el me hacía perder la cordura si apenas conocía su nombre.

-¿Es tú novio?.-preguntó José Pablo en un tono seco.

-¿Quién? -pregunte extrañada.

-El dueño de la empresa.

-¿Gerardo? No,él sólo es un buen amigo aparte de ser mi jefe.-dije soltando una pequeña sonrisa. si qué José Pablo era un hombre extraño ¿Por qué me habría preguntado lo de Gerardo? ¿Será qué está celoso? Ya no se ni qué pensar,a lo mejor el si tiene una novia,dudo qué no la tenga con lo guapo qué es.

-Pues es qué te mira cómo si estuviera enamorado de ti.-dijo en tono seco.

-Claro qué no.-respondí frunciendo el ceño.

-¿Y tienes novio?-seguía preguntando Pablo en un tono seco.

-No.-respondí en un tono serio al recordar lo de Santiago.

Cuándo llegamos a la cafetería me abrió la puerta del coche,quien lo diría qué aparte de guapo y buen amante es caballeroso,en seguida me ofreció su brazo y entramos a la cafetería,nos sentamos en una mesa y Pablo ordenó.

-2 jugos de naranja y dos ensaladas de quinoa,por favor.

-Enseguida señor.-dijo el mesero haciendo una pequeña reverencia.

Al pasar unos dos minutos nuestra orden llego a la mesa,le di las gracias al mesero y comence a acariciar la boca de la taza,José Pablo me miraba fijamente mientras le daba un sorbo a su café.

-¿Por qué no me mirás Laura?

-Me intimidas mucho.-dije tragando saliva.

-¿Por qué?-preguntó Pablo fijando su mirada en mi.

-Háblame sobre ti y tú familia.

-Pues mis papás viven en Argentina,tengo un hermano se llama Jonathan y está a punto de graduarse de la universidad.

-¿Y tú?

-¿Yo? Pues realmente no hay mucho qué decir, cómo sabes vivo en un departamento con mi mejor amiga Alondra y somos muy unidas,de ahí en más mi vida se reparte en puro trabajo,en mis tiempos libres me gusta mucho leer.

José Pablo  prestaba mucha atención a lo qué yo decía...

-¿Y qué me dices sobre ti?-pregunté mientras le daba un sorbo a el jugo de naranja.

-Pues de mi realmente no hay nada qué decir sólo soy un hombre de negocios,lo siento Laura tenemos qué irnos,tengo una junta muy importante.-respondió José Pablo mientras dejaba dinero sobre la mesa.

Al salir de la cafetería nos dirigiamos a su auto,de nuevo me ofreció su brazo pero está vez iba caminando demasiado rápido.

-Y tú ¿Tienes novia? -pregunte extrañada.

-No,éso no está en mis planes. -respondió seriamente.

Me quedé callada mientras le entregaban las llaves de su coche,él me miraba fijamente y con su mano comenzo a acariciar el contorno de mis labios yo cerre los ojos esperando su beso y sólo sentí qué me dio un gran abrazo,yo le correspondí el abrazo y al soltarme me miró a los ojos...

-No te conviene estar cerca de mi Laura,tienes tiempo de alejarte antes de qué sea tarde.-dijo José Pablo en un tono seco,antes de poder decir algo le entregaron las llaves de su coche y nuevamente me abrió la puerta,yo estaba desconcertada realmente no entendía lo qué pasaba,si no era hombre para mí entonces qué es lo qué en realidad quería,¿Por qué su comportamiento tan extraño conmigo? Y sobre todo si pretendía alejarme de él por qué habría investigado dónde trabajo y cómo por qué me había dicho qué me necesitaba,eran tantas preguntas las qué inundaban mi cabeza.

-Sube al auto Laura.

-No,adiós Pablo.-respondí dando la vuelta y alejandome de él.

-Espera Laura ¿A dónde vas? -preguntó extrañado.

Ya no le respondí nada y me aleje lo más rápido posible,tome un taxi y le indiqué la dirección del trabajo,todo el caminó seguí dándole vueltas al asunto... no puede ser qué esto me afecte tanto,haber Laura lo acabas de conocer y tú nunca te encariñas tan rápido qué es lo qué está pasando,cuándo llegue al trabajo fui directamente a mi oficina y ahí estaba Melissa esperandome.

-Laura qué bueno qué llegas,hay un joven qué se la ha pasado marcando y preguntando por ti.

-¿Dijo su nombre?

-Sí,se llama José Pablo Minor.-dijo Melissa mientras leía un papel.

-Si vuelve a llamar no me lo comuniques Meli,le inventas cualquier cosa pero no quiero hablar con el y por favor no le pases mi número de celular.

-Está bien Laura,compermiso.

Decidí no pensar más en José Pablo así qué empecé a distraer mi mente en trabajo,por suerte tenía demasiados pendientes así qué no tendría tiempo para pensar en el,se me fue toda la tarde trabajando y a las 7:30 llego Alondra a mi oficina.

-Laura ¿Nos vamos?

-Si claro.-dije mientras ponía mis manos sobre mi cara.

Salimos de la empresa y nos fuimos en mi coche al departamento,al llegar Alondra me ofreció de cenar y yo sólo le dije qué estaba muy cansada y quería dormir,así qué me dirigí a mi habitación y me recoste en la cama


El Límite del DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora