Nadie es perfecto al 100%
Eso Candice lo sabía. Pero ella tenía que ser perfecta, desde siempre se había presionado a ello.
Sin embargo cualquiera puede equivocarse cuando de tener un corazón roto se trata. Y así cuando su novio la dejó de un día pa...
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—Así que... ¿te encontraste con el tipo que te dio tu primer beso jugando a la botellita?
—Sí.
—¿Y te quedaste viéndolo como una tonta, verdad? —cuestionó divertida.
Lydia asintió ante Sasha. Habían parado en un minimarket, sólo para comprar comida chatarra y devorársela en el auto de la susodicha. Estaban caminando por uno de los pasillos del lugar, cuando divisaron a una pelirroja gritándole al encargado, lo cual, enfureció a Sasha.
La chica conocía al sujeto, eran amigos desde que frecuentaba la tienda, y no le agradaba ver a una tipa tratándolo pésimo, sólo porque una lata de espárragos se había caído, y había ensuciado un poco sus zapatos y sus tobillos.
—¡Ten más cuidado! ¡¿No ves que ahora yo tendré que volver a casa y lavar mis zapatos para que no queden con olor a espárragos?! —Suspiró y le echó una última mirada al pobre trabajador—. Si me vuelve a caer algo, te juro que llamaré a...
—¿A quién? —espetó Sasha—. ¿A los idiotas de tus padres para que te enseñen a tener modales? No fue su intención.
—No te metas, no es tu asunto, haciéndolo parece que la que no tiene modales eres tú. —Se dirigió ahora al chico—. Y a ti, más te vale no volver a tirar una lata de asquerosos espárragos.
Él asintió muchísimas veces y la pelirroja se retiró con las manos vacías, dejando en la tienda las bolsas con lo que, antes pretendía comprar. Sasha se encogió de hombros y se dirigió a Jake.
—Deberías defenderte mejor, niño. No estaré siempre merodeando por aquí como para dedender tu trasero —habló en tono de broma, pero lo decía en serio.
Lydia se acercó un poco y le extendió la mano al muchacho, quien parecía ser bastante tímido a su parecer.
—Hola, soy Lydia.
—Mucho gusto, Lydia. Soy Jake.
Se sonrieron y Sasha se acercó a Jake para pasar su brazo por detrás de sus hombros, bruscamente. Pero claro, con amistad. Tenían una relación complicada.
Jake tenía 17 años, pero iba a la escuela San Malcom, no a Green Bean como Lydi. Estaba enamorado de Sasha, pero ella no lo tomaba en cuenta de esa manera, prefería que fueran amigos pues, se consideraba muy mayor para él por tener 20 años cumplidos hace un mes. Era un año mayor que sus amigas. Y a pesar de que Jake Holloway tenía la misma edad que su mejor amiga, ella no quería verse a sí misma, ni que la llamaran "asaltacunas".
