¿Quien eres?

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Youngjae caminaba, como todas las mañanas hacia el Instituto. Un día normal, él estaría decaído por ir a la escuela.

Pero hoy salía el nuevo juego de realidad virtual de la empresa Samabic. El juego que tanto ha estado esperando durante dos años. El juego Luminia.

Estaba demasiado feliz por eso, aunque no pudiera comprarlo hasta el sábado. Pero la sonrisa no podía desaparecer de su rostro.

Por otro lado, sabe que si compra el juego su madre se va a enfadar con él, incluso le castigara si lo descubre, pero lo tenia todo planeado para que no lo viera jugar.

-Youngjae. ¿Viste a Jaebum?-pregunto su amigo, Bambam.

-¡Que!-se asusto Youngjae

Bambam se rió.

-Estabas tan sonriente que pensé que viste a Jaebum.

-No lo digas tan alto. No quiero que nadie se entere y menos él.-Youngjae miro a su alrededor. 

Él sentía un amor platónico hacia Jaebum. Ya había aceptado que aquel chico tan guapo, tan... todo, no se fijaría en él.

Él no era tan guapo para Jaebum, pensaba Youngjae

Youngjae sabia que a Jaebum le gustaba los chicos, ya que lo había visto con algunos, y el no encajaba con el tipo de chicos con quienes salían.

-Otra vez te fuiste a tu mundo-le dijo Bambam, sacándolo de sus pensamientos- ¿en que piensas?

-Estoy pensando...¡Que hoy sale el nuevo juego!-dijo emocionado.

Bambam rio.

-Sabes que como se entere tu madre te mata

-Lo se, pero es que... no puedo... lo necesito.

Bambam negó.

Ya habían llegado al instituto

-Bueno, Youngjae, nos vemos en el descanso-se despidió Bambam.

Bambam se fue a su clase dejando solo a Youngjae. Él siguió andando por el otro pasillo hacia su clase cuando se encuentra a Jaebum.

¿Porque no había nadie mas en el pasillo en este momento?, pensó Youngjae.

Jaebum se giro y lo miro.

Tuvieron un mínimo contacto ya que rápidamente Youngjae bajo la cabeza mirando a sus pies, caminando rápidamente hacia su salón. 

Deseando que no se escuchara su corazón en el silencioso pasillo.

Llego a su clase y abrió la puerta.

-Otra vez llegando a clase tarde-dijo el profesor- la próxima vez avisaremos a tu madre.

Youngjae asintió y se sentó

Él juraba que estaba colorado, era la primera vez que estaba solo con Jaebum y que este lo notara o ... lo que aun no puede creer que lo mirara. Con esos ojos tan intensos.

Aun estaba nervioso después de bastante tiempo de lo ocurrido.

Ya por fin terminaron las clases. Recogiendo sus cosas para volver  a casa, recibió un mensaje de Bambam.

"Lo siento Youngjae. Me tengo que ir antes, surgieron problemas"

Youngjae sabia a que se refería  seguro era su madre, diciéndole que se diera prisa en volver a casa y no entretuviera por el camino. Como siempre.

"Esta bien. No te preocupes" Le contesto Youngjae.

Tenia demasiados libros que llevar que no consiguió meterlos de nuevo en la mochila. Por lo que dejo unos cuantos libros fuera y los llevo abrazados contra su cuerpo.

Justo ya saliendo por la puerta del instituto otra vez a esa persona que hace que todos sus sentidos se fueran. Nunca le hablo, no le salen las palabras, se pone demasiado nervioso. Ni siquiera coordina bien sus movimientos. Se vuelve torpe.

Al verlo, bajo de nuevo la cabeza mirando a sus pies e intentaba esquivar a las demás personas, de las cuales, solo podía ver sus zapatos y parte de los pantalones.

Cuando de repente choco con una persona que no había visto. Por suerte no se le cayeron los libros.

Se dio la vuelta, para disculparse.

Levanto la cabeza, pero se encontró a la persona que menos esperaba. Si Jaebum 

 Youngjae se quedo de piedra perdido en los ojos de Jaebum.

Nueva historia con temática de videojuegos y 2jae, por supuesto. Iré explicando durante la historia.

Las actualizaciones serán lentas.

Espero que os guste.