39

1.4K 274 72
                                    

Todo llega en algún momento, aunque no se quiera.

Youngjae quedo castigado.

Su madre descubrió que se había comprado el juego hace mucho tiempo y por ellos no había rendido en clase como debía. Aunque había aprobado todas, pero estaba enfadada por mentirle.

A pesar que ya eran las vacaciones de verano su madre le quito todo, e incluso el móvil. Estaba totalmente aislado y sin poder salir de casa.

Su madre lo tenía limpiando o haciendo actividades que ella misma le mandaba. Ahora mismo se encontraba haciendo deberes de matemáticas.

Esa semana había sido totalmente horrible.

No sabía nada de sus amigos, ni de Jaebum y tampoco que había sucedido en el juego. La duda de que Defsoul le haya escuchado gritar su nombre verdadero le carcomía. Seguramente ya sabía que lo conocía, ¿pero él sabrá quien es?

El timbre de la puerta principal sonó y su madre abrió la puerta.

-Hola, ¿está Youngjae?-esa voz.

Era Jaebum, ¿Qué hacía en su casa?

-Está castigado.-contesto su madre-¿Quién eres?

-Soy un compañero de clase.

Su madre se pensó si dejarlo pasar o no.

-Debo hablar algo con Youngjae, después me marcho.

La madre finalmente acepto y lo dejo pasar.

-Está en su habitación.-le indico

Jaebum subió las escaleras en dirección a la habitación de Youngjae.

Allí lo encontró sentado en su escritorio.

-Así que matemáticas-dijo sonriendo, mientras miraba el cuaderno lleno de cuentas y números.

-No te rías-se quejo Youngjae.

-¿Qué paso?

-Fui descubierto.

Jaebum asintió.

-Yo...-comenzó Youngjae.

-Lo sé-dijo Jaebum interrumpiendo.

-¿Qué sabes?

-Que eres Ars

-¿¡Desde cuando!?-exclamo confuso Youngjae-¿desde qué grite tu nombre en el juego, hace una semana?

Jaebum negó.

-No. Aunque eso fue divertido – rió- Fue antes de terminar el instituto. Exactamente el día que te castigaron.

-¿Cómo...?

-Estuve esperándote a que salieras del aula de castigo, pero fuiste al servicio y vi un cuaderno en tu pupitre, ponía en el Ars, por lo que supuse que eras tú el del juego. Aun no entiendo porque no me dijiste nada, aun sabiendo quien era yo.

-Yo... es que

-Me enoje al principio, pero ahora quería saber hasta dónde aguantabas, y por lo que vi demasiado-dijo un poco decepcionado.

-Quería decírtelo, pero no quería que te rieras de mi

-¿Por qué lo haría?-pregunto sentándose en la cama

-Porque me equivoque y elegí a un personaje de chica

-¿Qué tiene de malo? Gracias a eso hemos estado juntos en el juego, aunque no me hayas dicho la verdad.

-Yo dije que mi nombre empezaba por Y. Tu también dijiste que el nombre del chico que te gustaba empezaba por Y, ¿Quién es?

-¿Estas curioso sobre eso?

¿Quien eres? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora