Capitulo 2

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Pov Christian

Juro que tenerla a ella entre mis brazos es una de las sensaciones más gratificantes que he sentido en mi vida, luego de sostener a mi hijo por primera vez.  Su aroma embriagador me transporta a otra dimension, a esa donde solo somos ella, la musica y yo.  Su cuerpo emana una calidez impresionante y la forma en que se
aferra a mi, me invita a protegerla a no separarla nunca de mi.

Desde que la vi llegar supe que élla seria diferente, pero me equivoque, ella es unica.  Su mirada azul intensa tiene la capacidad de sumergirme como pez en el agua,  ese rubor en sus mejillas denota una ternura escondida detras de un matrimonio que no la hace feliz. Toda ella despierta despierta mí instinto protector y dudare un segundo en ponerlo en practica.

 
Clark Collins es un patan y sin temor a equivocarme un maltratador y manipulador por excelencia. Un irrespetuoso que no le importa abochornar a su mujer delante de otros. Se nota que no valora lo que tiene a su lado, por eso no dude en seguirle el juego a Elliot y admito que valio la pena cada céntimo que pague por bailar con ella. Se que estoy cometiendo una locura pero no puede  ser menos de ahi,  ella me hechizo.

La musica termina y con ella nuestra burbuja se desvanece, desearia dejarla entre mis brazos pero veo a Leyla acercarse y por la forma en que me mirá, sé que esta enojada y no dudara en hacer un escándalo.

—Excelente baile, Señora Collins. —con resistencia me separo de ella, doy un asentimiento de cabeza y dos paso hacia atras.

—Gracias, Señor Grey. —susurra confundida ante mi manera tan brusca de separarme. Yo tampoco queria soltarte, pero era necesario.

—El próximo baile es conmigo. —dice Leyla cuando esta a nuestro lado y se engancha de mi brazo.

—Por supuesto. —Nos miro a los dos, se da la vuelta y desaparece.


—¿Bailamos? —pregunta Leyla. Yo asiento,  la tomo en brazos y nos dejamos llevar pot la música.  Solo que con Leyla no hay magia, hace mucho no la hay.

Media hora despues regresamos a la mesa y los Collins ya no estan. Miro a todos lados y siento una opresión en mi pecho.

¿Se fue sin despedirse?

Tomo mi copa de un solo trago y vuelvo a recorrer el lugar con la mirada.

—Hace poco se fueron.  —dice Elliot. Lo miro intento negar que no se de lo que habla.  —Anastasia y Clark. Él estaba algo enojado por perder un debate y ella solo pudo aceptar e irse.

—Es un imbecil. —siseo.

—De los grandes.  —confirma. —No sabe la mujer que tiene al lado y ella no se decide a dejarlo de una vez por todas. —Leyla y Mia llegan a la mesa y Elliot se calla. Entablamos temas triviales hasta que alguien se nos une poniendo alerta todos mis sentido.

—Clark. ¿Ana donde esta? —pregunta Kathe preocupada.

Con insolita arrogancia, toma una copa de uno de los meseros,  desabotona su chaqueta y se sienta en la mesa. Me desfia con la mirada, bebe dd su copa y finalmente habla.

—Ella decidió regresar en taxi a la casa. Sabes que Anastasia  es muy aburrida y no le gusta este tipo de eventos. —Kathe asiente y mira a Elliot pidiéndole ayuda, ella sabe que algo anda mal. —Señora Grey, —dice dirigiéndose a Leyla. —Ceo que me debe un baile. Claro, si el Señor Grey no se enoja.

—Lo que es igual no es ventaja.  —dice ella mirandome. —Ademas, estoy dispuesta a pagaselo. —responde Leyla, el se pone de pie y le tiende su mano. Los veo alejarse  y Kathe toma su celular,  si no me equvoco le esta marcando. Solo que ella no contesta.  Tres intentos mas y ya no puedo esperar.

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