Pov Anastasia
Regreso a la mesa y no me sorprende encontrar a mi padre solo y almorzando, en total tranquilidad. Como si nada hubiera pasado. La ensalada que pedí esta ahí pero no me apetece, no con él frente a mi siguiendo cada movimiento. Me siento frente a él y le presto atención a todo menos a la comida.
—¿No vas a comer? —pregunta limpiando su boca con la servilleta. Niego y se encoge de hombros haciéndome saber que no le importa. —No importa el berrinche que hagas Anastasia, ya la decisión esta tomada y no hay vuelta atrás.
—Como si no tuviera mas opciones. —siseo con ironía.
—Realmente no la tienes. —lo miro y su mirada cargada de furia me asusta. —El martes a primera hora debes presentar tu renuncia y hacerlo normal, sin levantar ninguna sospecha. —De mala gana deja la servilleta sobre la mesa, se levanta y deja un billete de cien dólares sobre la mesa. Sale del lugar, pero no lo sigo.
Minutos después recojo mi bolso y vuelvo al pabellón. Es increíble como el desánimo se apodero de mi y llegar al lugar que tanto soñé, y no sentir ningún tipo de emoción. Deambulo por el lugar y me detengo a hablar con algunas personas. El nido de mi garganta hace que mi estadía aquí ses poco llevadera, así que, me despido de Claire y me encamino al hotel.
Sé que Christian me espera pero en este momento no soy la mejor compañía para nadie. Vago por las calles mirando una que otra vitrina de las tiendas que dejó a mi paso. Una en particular llama mi atención y no dudo en entrar.
Estoy segura que Josh y Ava aquí, levitarian de felicidad y durarían horas y horas deambulando por los pasillos sin saber que elegir. Todos los vestidos y complementos son hermosos, realmente perfectos. Y visualizó a mi hija en ese vestido color coral que esta en la vitrina el día de la entrega del reconocimiento final en el colé.
Me acerco a una de las dependientas y ordeno el vestido, con las zapatillas, el cintillo y los accesorios. Mientras, buscó un detalle para llevarle a Ava y a Chris. Encuentro unas pulseritas tejidas a mano y con las iniciales en plata, escojo una para cada uno y le pudo que me lo pongan para regalo, al igual que el vestido.
Diez minutos después mi animo a cambiado considerablemente de solo imaginar a mi hija feliz con su regalo. Regalándome una de esas sonrisas que me iluminan el alma y que me aseguran que todo va estar bien. En todos estos años Josh ha sido un referente de fortaleza, de lucha y de el mas puro amor. Ese amor que no conoce condiciones, ni tiempo, ni espacio. Escucharla decirle que me extraña me parte el alma, pero todo esto es por ella. No quiero, mas bien, no voy a permitir que Clark o mi padre decidan en su futuro o creen imposiciones que la hagan infeliz y si para lograrlo tengo que irme al fin del mundo con ella lo haré.
—Trecientos veinticinco dolares. —dice la joven frente a mi devolviéndome a la realidad. La miro y me sonríe con picardía, me apresuro a buscar mi monedero y cuando voy a levantar la vista, una tarjeta negra se desliza por el mostrador. Conozco esa mano a la perfección y así mi vista continua ascendiendo hasta toparme con su mirada oscura y tenso rostro.
Trago en seco y el exhala el aire que parece contenía para no llamar mi atención.
—Hola. —susurro con un hilo de voz. El solo asiente y traga en seco. Su mirada se centra en mis labios y pienso que me va a besar, pero eso nunca pasa.
La dependienta le entrega su tarjeta y la otra chica los paquetes, empieza a caminar hacia la puerta y solo puedo agradecer por el servicio e ir tras él. Cuando salimos a la cera le entrega las bolsas a Taylor y le dice algo que no logro entender, este se apresura a guardarlas en el maletero y Christian me abre la puerta trasera del auto. Subo, buscando hacer contacto con sus ojos, pero no lo logro. Segundo después entra y lo veo desabotonar su chaqueta.
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Sin daños a terceros
FanfictionYa había renunciado a sentir mariposas en él estomago, a sentir nervios por la presencia de alguien, a soñar despierta y sonreír mientras pensaba. Amor, solo el de mi primogénita y padres. Pero llegaste tú y en un segundo todo cambio , te vi, me vis...