Protect me.

Capítulo 33.

Me despertó la alarma del celular, mi reloj había muerto. Era temprano así que aproveché a darme una ducha bastante larga. Me vestí y bajé a desayunar. Mi madre se había tenido que ir más temprano por no sé qué razón.

Madie no estaba esperándome con el auto fuera de casa. Me tuve que caminar esas veinte largas calles hasta el Instituto y sí, por tardarme en la ducha ya se me estaba haciendo tarde para la primera clase del día.

Cuando entré al salón me di cuenta de dos cosas; Madie había faltado y Zayn había vuelto. Llamaría a Mad luego. Mientras me dirigía a mi asiento una sonrisa se formó en mis labios, traté de disimularla con una tos que al parecer nadie notó.

— ¿Cómo estás? —preguntó él tratando de comenzar una conversación.

—Bien—respondí— ¿Por qué faltaste ayer?

—Sabía que me harías esa pregunta—sonrió—. Tenía ganas de faltar, no lo sé, me dolía un poco la cabeza.

— ¿No estás mintiendo, cierto? —pregunté con sospechando.

—No te mentiría ángel—sentí como mis mejillas se encendían y él se echaba a reír nuevamente—. Comenzaré a llamarte así más seguido.

—No me gusta cuando me dices así—murmuré.

—Hace que te sonrojes, eso es lo que me gusta—no discutiría por eso ahora.

— ¿Irás al fogón del domingo? —le pregunté para que la que conversación no terminara ahí.

—Sí, no tengo nada para hacer ¿Tu irás?

—No lo creo.

— ¿Por qué?

—Madie no puede pasar a buscarme y le rogué a mi mamá que me dejara ir solo pero no hay caso—le conté—, de todas formas no tenía muchas ganas.

—El domingo a las ocho pasaré por ti—parecía más una orden que una invitación.

—Te dije que mi mamá no me deja ir solo, no podré salir de casa.

—Pues entonces dile a tu madre que te llevaré yo—me advirtió—, creo que no tendrá problema.

—En realidad preferiría quedarme en casa... —no quería que Zayn hablara con mi madre, no creo que vaya a agradarle demasiado. Ella se acordaría de él, cuando le haga las típicas preguntas estoy seguro que Zayn no tendrá problema en contestar con la verdad, y la verdad no era exactamente lo que mi madre se imaginaba para un chico.

—Vamos, ¿Qué es lo que te avergüenza? —sonrió— ¿Te avergüenza que tu madre te vea salir con un chico?

—No.

— ¿Entonces? El domingo pasaré por ti, no acepto un ''no'' como respuesta.

—Nunca aceptas un ''no'' como respuesta—le eché en cara—, lo mismo me dijiste cuando te dije que no pisaría jamás ese billar y adivina a donde fui esa noche—Zayn rió.

La conversación termino ahí. El profesor comenzó la aburrida clase de Lengua. Cada día tenía un motivo más para odiarlo.

Me preguntaba qué haría hoy sin Madie, me encantaba estar con Ava pero no era lo mismo. Ella era más tímida y reservada, además si no me equivocaba pasaría los recreos con Colin ya que él tenía que decirle unas cuantas cosas.

— ¡Niall! —gritó una voz, me giré— espérame te acompaño a tu casillero.

—Madie me contó cómo fue lo del collar—le dije a Harry, quien sonrió.