Capítulo 18.

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No pude dormir en toda la noche, no sé qué me paso solo no fui capaz.

Estaba devastado, hoy sería imposible prestar atención en alguna clase. Me vestí con lo primero que encontré. Bajé a desayunar y me topé con que mi madre ya se había ido a trabajar. Odio pensar en eso así que trato de mantenerlo lo más lejos de mi mente posible. Al parecer hoy no sería mi día. Madie no pasaría por mí y tendría que ir caminando a la escuela, por suerte hoy me levante temprano y todavía tenía tiempo de sobra.

—Mi madre me ha dado algo de dinero esta semana—comentó Madie una vez que nos encontramos en la escuela—. Pensé que, tal vez, podríamos ir de compras este sábado.

No me vendría mal salir un poco, mi vida social es un poco escasa aquí. Sabía que mi madre no tendría problema en dejarme ir, pero por las dudas, si me llegara a arrepentir tendría una excusa.

—Claro—acepté—. Pero primero debo preguntarle a mi madre.

—Seremos Ava, tu y yo. Sera divertido, ¿Cierto?

Asentí. La primera clase del día era Lengua. Solo había un problema, de camino al Instituto recordé que mi madre no firmó mi advertencia, ¿Que podría hacer? el profesor seguro me mataría. Si falsifico la firma, ¿Se dará cuenta? Soy una estúpido sin dudas. Tenía que hacer algo y rápido. El profesor estaba unos minutos retrasados y tenía tiempo para pensar que hacer.

— ¿Por qué tanto apuro? —había olvidado por completo que Zayn se encontraba allí.

—Olvidé de decirle a mi madre que firme la advertencia—respondí apurado—. Necesito que me ayudes, rápido.

— ¿Qué quieres que haga?

—No lo sé. Tu solo firma—le entregué la lapicera y la hoja.

Zayn se quedó observando la nota unos segundos y luego firmó. Le diría al profesor que fue mi madre quien lo hizo total él no sabe cómo es la firma, o tal vez sí. El miedo se apodero de mí, no le mostraría nada al profesor hasta que él me lo pida, si tengo suerte, quizás se le olvide.

—No se dará cuenta—trato de tranquilizarme—, ¿Cuántas veces crees que falsifique la firma de mi... padre?

—Entonces es peor—dije horrorizado—. Reconocerá la letra.

—No seas exagerado. Tu solo actúa normal y no pasará nada. Claro que si le entregas la nota con esa cara de miedo algo sospechará—rió

Me callé y me quedé con la mirada en el frente. No tenía de que preocuparme, es solo una firma, nada más. Traté de concentrarme en la conversación que Harry y Madie estaban teniendo en el asiento de adelante pero lo único que escuchaba eran risas. Claro, están enamorados se ríen de cualquier cosa. El profesor llego media hora después, me pidió la nota y al parecer todo salió bien ya que me devolvió la carpeta sin decir nada. Ya me encontraba más tranquilo, no solo por el hecho de la advertencia sino también por lo de Zayn, creí que el ya no volvería a hablarme o se alejaría de mi por lo que paso ayer. Cuando se fue de casa parecía algo arrepentido, pero bueno ya está, ya no tengo nada de qué preocuparme.

El resto del día lo pasé con Ava y Madie quienes no paraban de hablar sobre la pequeña salida de tarde-noche que haríamos el sábado. A mí no me emocionaba mucho la idea ya que no necesitaba comprar nada de ropa ni tampoco quería poner en gastos innecesarios a mi madre. Lo que me entusiasmaba era que conocería el centro del pueblo, ya había ido hace unos días pero no pude recorrer los puestos ya que estaba apurado y un poco asustado. Necesitaba comprar un libro, últimamente no estaba durmiendo bien y lo único que me daba sueño era leer uno. Tenía en mente unos cuantos nombres pero también cabía la posibilidad de que me gustase otro.

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