Capítulo 25.2

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Kimane: Verdad...? Luna...

Luna: Luna... Hacia demasiado tiempo que nadie me llamaba así... Es curioso, tantos años de clandestinidad para que una vulgar mestiza del mayor linaje de arcanos descubra la verdad de pura casualidad. Crees que eres la única con conocimientos antiguos? Me gusta tu nombre, Kimane. Te lo pusiste tu sola o lo sacaste de algún lado?

Kimane: Fue el nombre que me puso mi madre.

Luna: Jajaja! Sera lo único autentico que poseas, porque no se que clase de historia te dedicaras a contar, pero estoy segura que no es la original.

Kimane: Cuento la historia real, pero solo desde cierto punto de mi vida. Y tu? Muy buena idea el de adoptar la identidad de una leyenda para enmascarar tu pasado. Pero sinceramente, tu autentica identidad es muchísimo mas interesante. Luna, nigromante del hierro y primera usuaria del Éter. Dime, de donde salio ese sobrenombre?

Luna: Eso no es de tu incumbencia, y por supuesto, es solo eso. Un sobrenombre. Mi autentico nombre solo lo sabíamos unos pocos y yo.

Kimane: Hm... No es tampoco excesivamente importante eso. Lo que si lo es... Es el como un guerrero del colapso ha podido sobrevivir y esconderse tanto tiempo.

Luna: Me impresionas por momentos. No solo conoces mi identidad completa, sino que también eres conocedora del elemento olvidado. Por suerte para ti, perdí ese poder, pero no lo necesito para mi objetivo.

Kimane: De verdad esa Archimaga era tu amiga? O solo era parte de tu gran mentira?

Luna: Myra era mi amiga. De hecho, sabia mi identidad, y aun así, decidió quedarse conmigo. Eres brillante, pero en tu idea de mi hay algo que falla. Después de miles y miles de años de clandestinidad, encontré a alguien que no juzgaba a nadie por que o quien fuese.

Kimane: Que bonito... Una de los responsables de la destrucción del antiguo mundo enamorada de alguien que se dedica a protegerlo. Pues lo siento, pero tu romance se acaba aquí. No dejare que pases de este punto.

Luna: No lo entenderías ni aunque te lo explicase... Siento lastima por ti...

Luna se lanzo contra mi y volvió a la carga de una manera aun mas agresiva, pero yo sabia como defenderme y en medio de ese intercambio de golpes entre acero y brazos, encontré un hueco por el que poder atacar y de forma certera, lancé mi Kuro Raikiri seccionando su cuerpo en dos.

Kimane: Suerte en tu próxima vida...

Luna: No... Suerte a ti al cruzar al mas allá...

Sentí un frío gélido en la espalda que prosiguió por mi tripa y después se extendió a mi cuerpo entero. Algo caliente empezó a gotear por el rabillo de mi boca y al mirar hacia abajo, contemplé como la espada de Luna me había atravesado por la espalda

Kimane: Je... Que estúpida he sido... Debí haberme dado cuenta ates...

Luna: Pasa mucho.

Luna retorció su espada aun clavada en mi y el dolor me provocó una fuerte sacudida por todo mi cuerpo de modo que caí de rodillas. Cuando Luna fue a sacar su espada, agarre el filo que me sobresalía por el abdomen evitando que se separase de mi, y con la poca fuerza que me quedaba, clave mi katana en el suelo y mire a Luna de reojo.

Kimane: Disfrutalo... Kuro... Rai-Kirin...

Un estruendo rompió el cielo a la par que un enorme kirin de electricidad negra aparecía y nos miraba fijamente y justo antes de que se lanzase contra nosotras, hice el mejor gesto que podía hacer en ese momento... Le dediqué una ultima sonrisa al mundo y sentí el impacto de mi propia técnica...

Veía el cielo... Un cielo precioso... Claro y celeste... Sentí unos brazos pasar por debajo de mis piernas y de mi cuello y nunca antes había sentido tan fuerte la gravedad de la tierra. Miré para ver a la persona que me sostenía... Era Yumi. No dejaba de hablarme... Pero no podía escucharla nada y mi habla no me obedecía... Cuando me levanto y nos dimos la vuelta, ví el cuerpo de Luna con muchas quemaduras y totalmente inmóvil.

Kimane: Yumi... Para... Dejame en el suelo por favor...

Yumi: Que estas diciendo? Hay que llevarte a casa! Te tienes que poner bien! Te vas a poner bien, ya veras!

Puse mi mano sobre la mejilla de Yumi y esta se detuvo.

Kimane: Yumi... Las dos sabemos que es lo siguiente... Te acuerdas de cuando llegué?...

Yumi: No... Para por favor... No digas eso! No digas nada que suene a despedida!

Kimane: Nunca lo haría... Sabes que odio las despedidas... Jeje...

Yumi: Si... Se que las odias...

Kimane: Sabes... Hay algo que debo confesarte... Aquella vez... Cuando pasó lo de tu katana... Fui yo...

Yumi: Ya lo sabia tonta! Siempre lo he sabido... Siempre... Mira! Ya estamos casi! Mira!... Kimane... Mira... Mira por favor... Mira...

Saori: Yumi... Lo siento...

Yumi: Porque? Solo esta descansando... Ha vencido sabes? Ha vencido... Como prometió... Te acuerdas? "Prometo que vencerá a todos los enemigos del mundo!" y lo ha hecho...

Saori: Yumi... Dejala ir...

Yumi: No! No, no, no, no, no! NO!

Saori: Yumi, se acabo! Se acabo... Ya ha pasado todo... Ya se ha acabado...

El ultimo linaje arcanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora