My Daddy; Min YoonGi. ¡LEMON! (1)

Capitulo 20.

— Por favor, te daremos lo que quieras, pero danos a nuestra hija. — rogó el padre de Aneu con lágrimas en sus ojos.

— No. — respondió cruzándose de brazos — ¿Ahora la quieren? Después de tanto que ella los llamaba y ustedes la ignoraron. Ja, idiotas.

— Era porqu— fue interrumpido por el pelinegro.

— Por que nada. — sonrió jocoso — Las cosas ya se dieron y ella se quedará conmigo quieran o no. Es mi esposa, así que yo decido que hacer.

— Lo que tienes es una horrible obsesión por nuestra querida hija. — esta vez se atrevió a hablar la madre de la castaña.

El pálido se encogió de hombros con una sonrisa. Se dió la media vuelta para irse, pero de nuevo la madre de la chica habló haciendo que Suga se detuviera.

— Juro que si ella lleg—  la risita que dejó salir Min la callo.

— No cometerá tal cosa. — hablo con obviedad — No es tan estúpida. — finalizó con una cansado suspiro ignorando las miradas de sus suegros, comenzó a caminar dejando a la pareja detrás

Aneu.

— Ah, vamos TaeHyung. — relamí mis labios nerviosa —Contesta.

Llevaba casi una hora marcando el número de TaeHyung, pero este no me contestaba, ni siquiera los mensajes. Me sentía mal porque no estaba con él. Además de lo que le dijo Suga, disculpen My Daddy. Estoy harta de estar en este maldito cuarto sin hacer nada. Nunca lo había visto y es muy curioso ya que en la puerta está la letra C; ¿qué significará? Aish, me estoy quebrando la cabeza por cosas sin sentido. Me acosté en la enorme cama y cerré los ojos, en ese momento escuche que alguien abría lentamente la puerta.

— ¿Aneu? — me levanté de inmediato y pude ver que era Ángeles — ¿Qué haces ahí?, ¿estás enferma? — entró por completo y cerro la puerta.

— ¿C-como entraste? — la mire sorprendida, ya que My Daddy le había puesto seguro o eso creía.

— Ah, bueno digamos que por la puerta, ¿o por dónde tenía que entrar?

Le lance una almohada y comenzó a reírse. Tomo asiento en el borde de la cama y me volteo a ver, entre cerré los ojos con una ligera sonrisa. Sabía que tenía algo en mente, pero no me quería decir, si pero no, estaba dudando mucho.

— ¿Qué tramas?

— ¿Por qué esa pregunta? — mordió sus uñas. Ella se encontraba nerviosa, pero.. ¿por qué? — Bueno es que.. aish.

— ¿Qué sucede, Ángeles? — me acerque un poco más a ella.

— Bueno, es sobre TaeHyung. Él.... él... — jugaba con los dedos de sus manos mirando al suelo — Me enteré que tuvo un accidente.

— ¿¡Qué!? — abrí enorme los ojos. Estaba sorprendida y me dolía el pecho, mis manos comenzaron a temblar.

— Tranquila.. — agarro mis manos.— Es por eso que llegue sin avisar.

— ¿Está bien, cierto? — no me respondía y estaba muy desesperada — ¡Ángeles! ¿¡Está bien!?

— ¡No grites!

— ¿¡Cómo no quieres que grité, si tú no me contestas y te quedas callada!?

— Es que, es que, ni siquiera sé cómo decírtelo, ¡no me compliques esto! Y déjame pensar en las mejores palabras para no lastimarte.

Nos quedamos en silencio. Ángeles seguía nerviosa y solo la escuchaba suspirar una y otra vez. Me estaba desesperando. La voltee a ver con el ceño fruncido esperando que de una buena vez me dijera.

— Te diré; TaeHyung..e-él...quedó vegetal en el accidente.

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¡nuuuuu! NUestrO TAEIUUUUn, hermoso. /cry in México.

Estado vegetativo: se produce un estado vegetativo cuando el cerebro (la parte del encéfalo que controla el pensamiento y el comportamiento) ya no funciona, pero el hipotálamo y el tronco del encéfalo (las partes del encéfalo que controlan las funciones vitales, como los ciclos de sueño, la temperatura corporal, la respiración, la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la consciencia) siguen funcionando. Por lo tanto, la persona abre los ojos y parece despierta pero, por lo demás, no responde a la estimulación de una manera significativa. No puede hablar y no tiene conciencia de sí mismo o de su entorno.

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