21. Distracciones

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Fin de semana más hermoso de toda mi vida.

Pase mis días restantes en Nueva York con Dylan. Me llevo a conocer lugares como Times Square y Central Park, tan enamorados como siempre.

Kansel lo conoció. Él intento de todo para que se lleven bien, pero fue imposible. Cuando mi hermana supo por qué me dejo no quiso hablarle.

Uno menos. Veamos que hay con mi padre, mi madre y Nick.

Mi padre no sabe que el se había ido a Nueva York sin avisarme, y mejor que quede eso guardado. Por ahora su relación de suegro y yerno va bien...

O eso espero.

Cuando volvimos a Scarsdale, Dylan se quedo en Nueva York para averiguar que podrían llegar a hacer sus padres para que consigan trabajo en la ciudad en la que pertenecían.

Volvieron una semana despues luego de haber conseguido un trabajo importante en Manhattan. Debían tomar un tren desde un pueblo hasta la ciudad que nunca duerme.

A partir del lunes en el que Dylan ya estaba en Scarsdale, me buscaba a mi y a Kansel para irnos al instituto. Aunque a ella no le gustaba del todo mi novio.

Guau, si, eso se escuchaba completamente raro.

Mi novio.

***

- Una manzana para mi lectora favorita - dijo Dylan mientras ponía la fruta delante de mi libro.

La acepte sin despegar la línea de letras impresas en la hoja y le di un morisco.

- ¿Y Kansel? - pregunto sentándose a un lado mío.

Paso su brazo por mi hombro y sonreí.

- Ella no quiso almorzar con nosotros hoy - dije guardando el libro dentro de mi mochila -. Fue con las demás chicas a organizar algo del baile de primavera.

Suspiro y echo la cabeza hacia atrás.

- Me odia - contesto Dylan pasando la mano por su cara.

Ya estábamos por entrar a la estación más colorida y bonita del año: la primavera. Y así es como nos encontrábamos sentados los dos solos en el patio del instituto para tener nuestra privacidad solo por media hora.

Si. Éramos la pareja del año, según Elizabeth Crowd. Nos encontró hablando muy cercanamente un día que estábamos escondidos detrás de unos casilleros. Dylan me había besado y esta recorrió que éramos novios por toda la escuela.

Ahora todos sabían quienes eran Charlotte Markhall y Dylan Devine. Todos se preguntaban si yo era nueva, pero yo les contestaba que ese instituto fue el único al que fui durante toda mi vida.

La pura verdad es que, como Dylan era atractivo, llamo la atención de que este con una rarita como yo. Y a el no le importó nada.

Aunque eso de ser un poco famosa me estaba estresando...

- ¿Cómo mantienes tu cabello así? - dijeron mis compañeras plásticas mientras caminaba hacia mi casillero.

No aguantaba tener a esas muñecas de plástico mal traficado sin cerebro.

Pensé en una respuesta más falsa que su amabilidad.

- ¿Cómo mantienes el tuyo? - dije sonriendo con diversión.

Todas rieron agudamente. No había entendido la gracia, pero reí igual. Al dar la vuelta para abrir el casillero borre la sonrisa y rodee los ojos mientras descargaba todo de mi mochila.

- ¿Es enserio? - pregunto Kansel cuando le había dicho todo eso.

Fue un momento para reír entre nosotras. Siempre las evitábamos, y venían con nosotras solamente porque Dylan era mi novio. Querían aprovecharse de mi para robarse, desde que se hizo pública nuestra relación, el chico más atractivo de la escuela.

Corona De Lágrimas (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora