CAPITULO 27

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[Día del accidente - 3 años atrás ]
[Narra Leah]
El dolor empezaba a hacerse más insoportable con cada golpe, mis ojos ya estaban cansados de estar indagando por este mundo y ahora poco a poco se estaban cerrando...

Pero de pronto una alarma empezó a escucharse por toda la escuela, con las pocas fuerzas que me quedaban trate de abrir los ojos y vi como ellas salían corriendo desesperadas ,dejándome allí en el suelo.

-Por favor ayúdenme - susurré. Me arrastre; con mi último esfuerzo trate de levantarme, apoyándome en la pared y con pequeños pasos camine hasta la salida.

Llevaba mis manos presionando mi estómago por el dolor sentido a consecuencia de los golpes.

-Ayuda- replicaba, pero parecía no haber nadie; se sentía como si fuera el fin ,como si todo ya estuviera destinado a ser así, las calles estaban vacías, solo el soplo del viento impedía el completo silencio.

-Ahí esta- Gritaron, al voltear a ver, me di cuenta que eran ellas. Aún no estaba consciente de donde aparecían estas fuerzas inexistentes que me hacían correr.
Corrí y corrí hasta más no poder, tanto así que las perdí de vista. En busca de alguien solo entre a una vecindad, tocaba desesperada las puertas pero ninguna se abría; subí al segundo piso pero era lo mismo, sin esperanzas llegue hasta el final del pasillo y como si fuera un milagro ,aquella puerta estaba abierta.

—Ayuda por favor — Hable acercándome a la puerta—por favor

Al no encontrar respuesta y no tener a donde más ir ,poco a poquito fui entrando.

—¿Hola?—de pronto escuche algunos sollozos que venían de la otra habitación, me fui acercando hacia esa pieza y logre ver a una mujer en el suelo, arrinconada en una esquina de aquella oscura habitación.

—No te acerques—Grito mirándome con sus ojos llenos de lágrimas y esa agonía en la mirada ,pero ¿Cómo podía dejarla así? ,cojeando y haciendo caso omiso a sus palabras me acerque hasta ella.

—¿Qué le paso?—sin poder hablar señalo al frente con su mano temblorosa, voltee y pude ver a un hombre herido en la pared de al frente, su polo estaba lleno de sangre pero aun así intentaba levantarse. Al ver eso caí y sin dudar me puso detrás de ella.

—Vete de aquí y por favor no llames a la policía — tomo mis manos y las apretó con fuerza.

—Ven conmigo—murmure ayudándola a levantarse.

—Ninguna de las dos saldrán de aquí—Alzó la voz ese hombre mientras se colocaba en la puerta—creíste que tú y él se escaparían de mi—se dirigió hacia ella.

—Al menos déjala salir—Hablo ella.

—¿Crees que soy estúpido?. Esta idiota ira de frente a la comisaría y yo no pienso ir a la cárcel

Sin pensar, dirigí mi mirada hacia la mesa y en un ataque de nervios tome el cuchillo que estaba encima.
—¡No se acerque!—Grite poniendo el cuchillo frente a él—ya está herido si esto apenas lo inca será su fin y yo no tengo nada que perder porque este también es el mío

Asustado retrocedió agarrándose la herida; era la primera vez que daba cara a un problema, era la primera vez que hacia esto; quizás suene ilógico y hasta tonto pero tener a una persona a quien querer salvar te da fuerzas. Esas mismas fuerzas hubiera querido ser yo para otra persona...

No solté su mano y sin dejar de apuntarlo con el cuchillo salimos de allí.

—No tengo un plan así que será mejor que corramos—tomo mi mano y la puso en su cuello.

STIGMA (TAE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora