Capítulo 30

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<<capítulo anterior
Recibí la pulsera y tú nota de ven a verme, firmada con tu nombre. Me arriesgué mucho al venir aquí - me comentaba mirando por la ventana.

-No sabía si vendrías Haruka - una sonrisa se presentó en mi rostro.

-No debería estar aquí, viole la seguridad de tú casa y Shiota Nagisa estuvo apunto de descubrirme cuando la alarma sonó.  Gracias por esconderme - se giró frente a mí.

-Lo volvería hacer, me gustaste desde la primera vez que te vi en la oficina del Sr. Akabane - delinee sus labios con mis dedos.

-Yo lo note, por eso decidí venir. Pues tú también me gustas mucho Ayato - ella unió sus labios con los míos>>

Capítulo 30
Ayato POV
Nuestros labios seguían unidos, el beso se volvía más intenso, me llevó hacía mi cama, continuaba besándome y se sentó sobre mí.  Eran muchas sensaciones, lo que estaba sintiendo nunca lo había vivido, ella me mostró sus pechos y los cubrió con sus manos. Traté de evitarlo, pero el calor del momento me supero, las sensaciones que estaba sintiendo y me corrí sobre mi vientre.

Ella me miró sorprendida y después se cubrió la boca evitando su risa estruendosa.

-No hemos ni empezado y ya estás fuera de combate. Por tu nerviosismo creo que es la primera vez qué haces esto - seguía conteniendo de burlarse.

-Yo lo lamento, lo siento no - estaba tan avergonzado, acaba de quedar como un idiota y justo con ella, la mujer que quiero.

-No estoy acostumbrada a ser maestra, pero aquí no es un buen lugar para enseñarte. En mi apartamento, será más sencillo, espero que la próxima vez tengas un poco más de aguante, pues eso puede llegar a ser muy decepcionante - señaló mi entrepierna.

Me sonroje de inmediato. - ¿Nos seguiremos viendo? - le pregunté sorprendido.

-Así es, pero solo cuando yo pueda verte - se levantó y se acomodo la ropa.

-Hoy mi papi no se siente bien, solo así podrás escapar sin que nos mate a ambos, vamos - me asomé por la puerta y nos dirigimos a la entrada, desconecte la alarma, me fijé en los guardias y aproveche un momento para que pudiera salir.

Regresé a la casa, busque un vaso de agua en la cocina y subí a mi habitación. En la puerta alguien presionó mi cuello con su dedo. Trague grueso, traté de tranquilizarme y giré el rostro para observarlo. Sus ojos me miraron, dio media vuelta y regreso a su habitación.

¿Qué difícil es engañarlo?. Pero creo que hoy si lo hice, me ayudó que no se sienta bien. Si no ya no tendría con que sentarme. Esto es muy arriesgado, lo mejor es que ella no venga a mi casa, me cambie la pijama y por fin me quedé dormido.
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Karma POV
Estaba de mal humor, Shu Kun no había vuelto y ya era muy tarde. Takuma me abrió cuando era hora de cenar, pero Shu Kun no volvía. Escuche la puerta de entrada e inmediatamente baje las escaleras y lo espere.

-¿Lograste hablar con él?, espero que sí, porque ya que me dejaste encerrado como si yo fuera tú maldita marioneta. Soy tú esposo, no una mascota que encierras - le reclamé mientras subíamos la escalera.

-No pude hablar con mi padre, por más que lo espere no apareció, lo llame y tampoco respondió - abrió la puerta de la habitación.

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