Maestra. ➳ Javier Mascherano
Capítulo 6
" En lo de Luis "— ¿No era una reunión tranquila? ¿Con asado y mate? — eleve mi voz para que Lionel escuchara. El ruido de la música y el canto de algunas personas era demasiado fuerte.
— Al parecer sólo lo dijo para que viniéramos, ya viste como es... y cómo somos — rió. Es verdad, ambos sabíamos que estás cosas no eran de nuestro agrado, todos sabían eso en realidad.
— Muy astuto... — admiti repitiendo la acción de mi amigo y compañero argentino.
Me acerqué a los sillones, pasando por entre la gente y saludando a aquellas personas que conocía del club o por amigos en común.
Tomé un vaso de supongo coca cola y me senté allí. De inmediato tomé mi celular y me puse a ver pelotudeces, en instagram, twitter e incluso facebook. A eso en mi mundo se le llama aburrimiento personificado.
— Hola
No logré levantar mi vista de la pantalla que ya estaba recibiendo un beso en mi mejilla. No me separé sólo por educación.
— Ho-hola. — contesté nervioso al darme cuenta que era nada más y nada menos que Mariela.
— ¿Todo bien? No pensé que te gustaran estás cosas, tenés pinta de ser un tipo serio.
— No me gustan, me engañaron para venir. Igual no soy serio, sólo cuando es necesario.
— ¿Y en una fiesta es necesario?
— Mmh, sí.
Ella sonrió y otra vez mi cerebro pensó en decir y hacer mil cosas indebidas.
— ¿Viniste sólo?
— Sí. ¿Qué haces acá? ¿Sos amiga de Luis?
— No, mi novio sí. Vine como acompañante.
— Ah.
Era inevitable no demostrar mi desagrado ante su respuesta. Odiaba el hecho de que estuviera en pareja.
— ¿Bailamos?
— ¿Q-qué? N-no. Soy muy malo.
— Lo mismo dijiste cuando actuamos y terminaste siendo tremendo actor. Dale, vamos.
Accedí con una sonrisa en mis labios aunque no muy seguro aún.
La canción era "Bonita" de J.Balvin. No podía ni imaginarme bailando eso, sería de seguro el papelón más grande de mi vida. Seguro ella saldría corriendo para que no la vieran conmigo, no me hablaría más e incluso se reiría a carcajadas.
Era impresionante como bailaba esta mujer, creo que en mi vida vi a una persona tan hermosa bailar así, tan sexy y feliz. Sonreía con sus hermosos labios, y bailaba con su perfecto cuerpo. Me hacía sentir cada vez más embobado, fascinado.
Perreaba, se movía con sensualidad siguiendo el ritmo de la canción. Se acercaba a mi por momentos y tocaba mi torso o brazos.
Seguimos bailando gran parte de la noche, no podía negar que un poco de excitación me generó.
— Perdón, te robo a mi mujer — apareció un hombre muy fachero, el mismo del restaurante. Sí, su novio.
— Estás re en pedo. — dijo Mariela con asco, bastante molesta. — no me gusta cuando haces eso.
— Bueno nena no te pongas así. — contestó tocando su culo y apretandolo.
— Salí estúpido — lo empujó — no me va cuando te pones en pajero y desubicado.
— Dale bebé yo sé que te encanta cuando te hago gemir.
— Fijate como volves porque así no podes manejar. Cuidate.
Se alejó de allí tomándome del brazo con fuerza.
— No me quiero ir al carajo pero, ¿Podrás alcanzarme a la parada del colectivo?
— Te llevo a tu casa, tranquila.
El hombre volvió con los hombros y pecho levantado, haciendo con impotencia que Mariela lo mirara.
— ¿Con este te vas? Pelotuda.
No actúe antes por el simple hecho de no quedar cómo un desubicado pero no podía permitir que le faltara el respeto de esta manera.
— Pelotudo serás vos que te pones violento con unas copas de más. Haceme el favor de aprender a cuidar a una mujer y hacerla feliz antes de ponerte en pedo con tus amigos.
— ¿Querés que te haga mierda, idiota?
— Vos hace lo que se te cante el culo, yo no soy igual. Y ahora, estoy ocupado, si me permitís me voy a comportar como un caballero y me voy a encargar de cuidar a tu novia porque al parecer no podes hacerlo vos. Volve a ponerle una mano encima que me voy a encargar de que te pudras en una cárcel.
— No te lo permito. No te acerques a mi mujer.
— Nos vamos, Javi. — dijo Mariela y solo accedí, tomándola con suavidad de la cintura.
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Maestra. ➳ Javier Mascherano ✔
Hayran KurguJavier Mascherano es uno de esos papás que odian las reuniones de padres, los actos escolares y los grupos de whatsapp donde según él, sólo hablan boludeces. Sin contar su odio profundo por retirar a sus hijas y tener que esperar en la puerta, oblig...