"De donde vengo y a dónde iré será lo único claro en mi mente."
Jimin estaba bastante tranquilo. Ya era su segundo día en Busan y tercero fuera de la ciudad (tuvo que esperar todo el día para que llegase su maleta). Para su sorpresa, estar en casa no fue del todo una mala idea porque, aunque aún tenía un gran problema para bailar, había aireado sus ideas y, en cambio, su mente había volado a la posibilidad de que la musa de Suga fuera una fan. Había una chica que todos conocían que siempre le decía a Suga que iba a demandarlo por ser lindo ¿Qué posibilidades habían de que eso pasara?
En todo caso, estar ahí le había permitido aislar su mente de los dolores y concentrarse en algo más banal, como buscar la musa de Suga. Había visto videos durante toda la tarde y había tomado los datos suficientes como para poder bombardear a Suga de preguntas en tanto lo viera, en una de esas tardes donde su hyung estuviera especialmente animado para contestar todo lo que le él preguntara. Se sintió especialmente renovado para volver a casa, pero no en ese momento, primero quería fingir que era un chico normal, que no era perseguido por todo el mundo cada vez que intentaba salir de casa al medio día y, así, con un poco de suerte, podría sentir de nuevo la vibra que lo hacía bailar todo el tiempo.
(...)
Suga estaba entrando en una especie de crisis. Nadie lo había notado hasta verlo golpear su cabeza contra la puerta del estudio de práctica donde todos juraban estaba Jimin. Al principio, estaba bien. Entendían que Jimin estuviera algo estresado y quería intentar explotarlo en el baile, pero en aquellos 3 días no había música, ni llanto, ni personas deambulando por el apartamento en las madrugadas. No había rastro de aquel chico. Todos supusieron que había ido con algún amigo y había perdido la noción de tiempo, pero Suga tenía una corazonada que se cumplió cuando llamó a aquel extraño idol con el que Jimin hablaba meses atrás. Supuso que estaría con él, que habían ido a algún lugar y que todo iría bien, pero escuchar a aquel chico diciendo "No he visto a Jimin desde los MAMA, lo siento, Suga hyung" fue como recibir un puñetazo en el estómago que le quitó todo el aire. No era sólo eso, sino una opresión en su pecho, un dolor en la boca de su estómago o una presión en su nuca que dolía como una carga al hombro, Jimin estaba perdido y Suga no podía tranquilizarse con la incógnita en la cabeza, por eso estaba en el estudio, dando golpes a la pared con su frente, repitiendo mil veces la última conversación que tuvo con Jimin, buscando algún indicio de su paradero, alguna iluminación de la divina providencia que le diera un lugar dónde buscar.
-Taehyung-ah.
-¿Sí, hyung?
-¿Has hablado con Jimin?
Taehyung respiró hondo y observó a su mayor desde el suelo del salón de práctica, donde había estado a la espera de que su hyung dejara de golpearse, o que Hoseok apareciera y se llevara al rapero del lugar, porque había sido advertido muchas veces sobre las posibles consecuencias (que incluían golpes y ataques de ira) de mover a Suga cuando estaba en total ansiedad. Taehyung había oído esa pregunta más de 17 veces aquel día, todas por parte de la misma persona, todas entonadas con la misma frustración y estrés en el tono rasposo que Suga tenía. A Taehyung se le hacía cada vez más difícil mentir y a Suga se le hacía más difícil creerle. No era que desconfiase de Taehyung, pero él nunca estaba nervioso para responder, excepto cuando estaba mintiendo, Suga estaba desesperado sólo de ver a la gente mentir.
-Tae, esto es urgente. Necesito saber si has hablado con Jimin.
Hablado, escrito, enviado, se habían visto por Skype inclusive. Tae estaba totalmente en contacto con Jimin y no podría jamás decir mentiras, porque ese era Taehyung, demasiado honesto para mantenerse callado con los secretos de nadie. De hecho, agradeció en su totalidad cuando vio llegar a los chicos, en especial a J-Hope, verlo sacar de allí a Suga y llevarlo al salón fue realmente bueno, sintió su corazón ralentizarse en alivio, lo que no duró mucho, al ver a todos sentarse frente a él, mientras Suga hyung conjeturaba sobre él y Jimin y hacía comentarios hirientes contra su persona. No sabía cómo sentirse, si debía ofenderse o dejarlo pasar, sólo tenía claro que quería huir de allí, que no quería ver los ojos suplicantes e iracundos-Suga tenía unos ojos que ululaban del dolor a la ira en cortos instantes y Tae le asustaba de sobremanera contestar en medio del enojo o lastimarlo en el dolor-. Sin embargo, supo que no sería posible escapar de la situación cuando vio a Suga intentar salir del sofá, en un intento de acercarse a él, lo que lo llevaba a encogerse en su lugar, a la espera de un golpe, que lo mantuvo nervioso. Puede que él amara mucho a su hyung, pero se sentía apresado en una jaula junto a una fiera hambrienta que iba a despedazarlo de un zarpazo.
-Maldita sea, Taehyung, dime si sabes algo, yo sé que tú sabes algo. Lo puedo ver y estoy sopesando golpearte en este instante.
Taehyung tembló y agradeció ver la sombra de Jungkook, cuando éste se puso frente a él, aguantando a Suga cuando arremetió contra su persona.
-Suga hyung, estás presionando demasiado a Taehyung.
-No lo estoy presionando, Jungkook, sólo estoy teniendo una conversación donde pregunto dónde, maldita sea, está Jimin.
-Suga, relájate.
-No me puedo calmar, no puedo. No más de esa mierda. Estoy harto de calmarme. Siempre debo calmarme y entonces callarme y ser un idiota y ver cómo Jimin se me escurre de las manos.
-J-Jimin debe estar bien, seguro está bien, él siempre está bien—Yo ¿Ya llamaste? Él puede contestar, tal vez...
Todos se callaron cuando el teléfono de Taehyung hizo eco con un "Excuse Me!" en la voz de Jimin. Todos sabían que era el tono especial del chico. Suga se abalanzó sobre Taehyung y le sacó el teléfono del bolsillo delantero, contestando tras una pobre pelea, donde las temblorosas manos de Taehyung y los intentos de derribar a Suga fueron infructuosos.
-¡TaeTae, tuve una gran idea! Ayer fui a pasear con Sana, la perrita de la señora Dong. Y vi a una chica con la camisa de Bangtan. Tuviste que ver eso, fue tan hermoso. En fin, pensé que podría ser una fan, no lo sé. ¿Recuerdas esa chica que siempre amenazaba con denunciar a Suga hyung? Bueno, podría ser alguien como ella. ¿Debería preguntarle cuando llegue a casa?
Jimin tuvo un par de gritos, donde la palabra Eomma resonó en la cabeza de Suga. ¿Estaba con su madre?
-Bien, ¿Qué opinas Tae? Mamá está a punto de quitarme el teléfono.
Todos en la sala contuvieron la respiración. ¿Qué haría Suga? ¿Jimin sabría lo que estaba pasando?
-¿Tae, estás ahí? Puedo llamar más tarde, si quieres
-Espero que te quedes malditamente quieto en Busan, porque iré por ti, Park Jimin.
No escuchó las palabras de Jimin como respuesta, sólo colgó y le lanzó el teléfono a Taehyung hacia el pecho, provocando que el menor se encogiera en su lugar, en total pánico.
-Maldito mentiroso.
Suga salió del lugar con una mirada impenetrable, directo hacia su cuarto. A Suga no le costó nada dar con sus cosas rápidamente, él era diligente cuando la rabia se cruzaba con sus objetivos. Todos se miraron, mientras Suga estuvo lejos de salón principal, intentando tener un pensamiento claro, algo bueno que pudieran decir para reparar el error. No lo tuvieron, así como no tuvieron palabras para decirle algo a Suga cuando pasó la puerta con una pequeña maleta y su mochila en la mano, gritando un "Me voy a Busan, perdedores" y huyendo del lugar. Maldita sea, Suga iba a hacer todo un drama, y no podrían advertir a Jimin de todo esto.
EN MI DEFENSA, ESTUVE REALMENTE OCUPADA...
Ok, iniciaré dejando una tendida disculpa por mi lentitud. Prometo cumplir los horarios ahora que tengo mis merecidas vacaciones.
Además de eso, quiero compartirles que ya me gradúo el viernes jejeje
A nadie le importa pero igual les cuento.
Con respecto a la novela, debo decir que los siguientes capítulos son fuertes. So... Supongo que debo recomendar leer con atención porque se vienen detalles.
No siento más, me despido
Anchor & Rope
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Relatos de una Musa Perdida♤Yoonmin♤
FanfictionDonde Jimin busca como perro tras su cola