Relatos de una Musa Perdida♤Yoonmin♤

18. Aunque

Aunque no era la primera vez que aquel chico lo hacía, Yoongi tembló fuertemente cuando sintió que su espacio personal era atacado por aquel bonito rubio que se extendía sobre él, rozando sus caderas para no caer al suelo.

Para ser sincero, podrían pasar mil siglos y él jamás podría habituarse a la cercanía de Jimin cuando estaban juntos. Es que, 3 semanas después de aquella primera vez donde se acercó a apagar la llama de su encendedor y encender, de ese mismo modo, la llama de su deseo ferviente por él y su imaginación flotando en mil y un escenarios donde podría abrazarlo contra él, tal vez besarlo, algunas veces tocarle en las zonas más dulces y recónditas de su cuerpo, explorar hasta la última pulgada de tersa piel, hacerle rogar y adorar tal y como él lo hacía.

Jimin le sonrió ampliamente y se alejó de él, sonriéndole abiertamente, no sin antes alejar parte de su flequillo de su rostro. El menor, para variar, tenía una mirada de calma y cariño profundo, que endulzaba aquellos orbes carbón con los que le miraba. Yoongi respingó un poco y se encogió en su puf, fingiendo sentir frío de la corriente de aire en la azotea y Jimin se levantó, aprovechando para bailar suavemente al mismo ritmo de las suaves melodías que se escuchaban desde los pisos bajos. Lo vio disfrutar la suave tonada de la guitarra y el repiqueteo dulce de las teclas del piano.

Yoongi, por un instante, los imaginó a ambos en una casa decorada, llena de sus fotos, iluminada fuertemente, Jimin bailando mientras él tocaba para él desde el piano, cantando en la cocina, tal vez corriendo tras niños pequeños. Se imaginó a ambos en la azotea, sobre una manta, tal vez abrazados, tal vez besándose, o sólo mirándose, incluso tomados de la mano. Se imaginó la forma en que una vida se podría construir con suma facilidad a su alrededor y, tal y como semanas antes, sonrió y se sonrojó fuertemente, siendo Jimin un ajeno espectador de su enamorada imaginación.

-Yoongi ¿Puedo hacerte una pregunta?

-Ya la estás haciendo, Minnie.

Jimin soltó una suave risita, sentándose en el suelo frente a su hyung.

-Jackson hyung ha dicho que los hyungs y él van a ir a Jeju el fin de semana y me ha invitado a ir. Él dice que sus miembros quieren que vaya. ¿Quieres ir conmigo?

-Seguro, suena bien ¿Por qué no?

Le sonó genial, para variar, y, de hecho, aunque él lo quisiese negar, había empezado a entusiasmarse a la idea de un fin de semana con Jimin, a un espacio a su lado. Jimin, por su parte, sintió una extraña alegría por ello y, sin ser realmente consciente, la calidez y la ansiedad le llenaron fuertemente.

Para pesar de ambos, esa fue su última sesión en la azotea por ese mes, ambos simplemente se dedicaron a vivir fuera de su burbuja. Yoongi, sorprendentemente, había encontrado un momento para drenar la multiplicidad de emociones que lo aglomeraban en medio de aquella canción que lo esperaba a medias desde semanas atrás, se vio enfrascado en terminar con aquellas letras que habían aparecido casi por arte de magia en sus dedos, ansiando ser escritas.

Jimin, por su parte, se había dedicado de lleno a practicar con Hoseok y a revolotear alrededor de Namjoon para escuchar lo que llevaba del álbum, demasiado emocionado por lo que veían formándose a raíz de sus propios sentimientos, de aquellas charlas de madrugada donde su hyung y él se llamaban y él simplemente se permitía hablar abiertamente de todo lo que estaba sintiendo, de aquella naciente flor que acariciaba su pecho.

Así como había llegado su invitación, de repente, llegó el final de la semana, el jueves. Jimin agradeció el tenue viento que lo abrazó mientras esperaba en la salida del edificio central de BigHit Entertainment, en medio de aquel arduo sol que indicaba el inicio del verano, esperando por Hoseok hyung, que aún hablaba con la recepcionista para que reservara el salón de práctica para ellos la semana siguiente, porque ya estaban listas las primeras canciones y su hyung ya había preparado las coreografías junto a su coreógrafo, ya estaban listos para iniciar sus preparativos.