8. Fumar

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Jimin había desaparecido del departamento. Había trasladado lentamente sus cosas a la sala de práctica del edificio. Si Jin no le dejaba su plato de comida dentro, Jimin no hubiese comido ni un bocado. Jungkook había intentado sacarlo un par de veces, pero Jimin lo había convencido con un "iré a dormir al cuarto, lo prometo" que jamás sucedió. Taehyung solía quedarse algunas noches en el estudio, acariciando la cabeza de Jimin y, si tenía suerte y pasaba algún miembro con la suficiente fuerza para cargar con su hyung, podía llevar a Jimin a la cama cuando su cuerpo ya no respondía de cansancio. Hoseok, en cambio, tuvo que instalarse en el cuarto de Jin temporalmente porque Yoongi estaba teniendo ataques de ira y nadie lograba calmarlo más que él, lo que mantuvo el cuarto totalmente vacío, y hacía que la casa se sintiera deshabitada. Namjoon tuvo un par de altercados con Yoongi, porque ya no sabía de qué manera acercarse para mejorar la situación, que lo tenía en un bloqueo temporal y lo estaba retrasando con su trabajo. El temperamento de Suga tenía en una alteración incipiente a toda la banda. Ya iban en la mitad de junio y no tenían ninguna canción preparada, todo gracias a los estragos de un Jimin lejano y un Suga alterado.

Después de los primeros días de Jimin dentro del estudio, exiliado de su hogar, la línea vocal se había decidido por tomar turnos para visitar a Jimin y vigilar que no colapsara como lo hizo años atrás. Uno de tantos días, donde Jin se encargaba de cuidar de su dongsaeng, ambos estaban sentados, espalda contra espalda, con la cabeza apoyada en el hombro del otro, mirando hacia el techo blanco, donde las lámparas titilaban y pedían a gritos un cambio de bombilla.

-¿Alguna vez sales de aquí, sin que te arrastremos?

-Suelo ir a la terraza antes de que anochezca.

-¿Por qué?

Jimin se había hecho esa pregunta días atrás, cuando se había acurrucado en el puf de su hyung, olisqueando el vago olor que aún estilaba la tela. Pronto, el olor iba a desaparecer y Jimin no tendría evidencia de la veracidad de sus charlas a media tarde. Ese día, se preguntó una y otra vez por el porqué de seguir sentándose en aquella vista, cuando sabía que la razón de ir allí no llegaría jamás.

-No lo sé, es una sensación agridulce.

-¿Quieres contarme qué pasó?

Jin estaba preocupado. Jimin no había hablado con nadie del tema durante casi 2 semanas y cada día se ponía peor. ¿Qué era lo que atormentaba al pequeño chico como para no poder verbalizarlo?

-No.

-Sabes que cuentas conmigo. Estaré aquí todo lo que me necesites.

-Lo sé, Jin. Sólo estoy intentando saber qué pasa.

-¿No sabes qué pasa?

-Si lo supiera, sabría cómo solucionarlo.

(...)

Suga iba a ajustar una primera semana dentro de su estudio. Hoseok no le había dicho nada por consideración a la depresión de su amigo, pero realmente apestaba, y no se refería a la situación. Con la nueva adaptación del elevador para el ala de los estudios, Suga había descubierto que no había necesidad de salir si pedía domicilios a su dirección, con lo que no tendría que toparse con Jimin ni por accidente ni compartir con nadie en el apartamento, porque, precisamente, eso era lo que buscaba, absoluta soledad para enloquecer en paz.

-¡Cariño, ya llegué!

El grito de Hoseok fue acompañado por una sonrisa lo más similar a la que tenía el protagonista de la escena que imitaba. Suga intentó sonreír, pero su ánimo no estaba en condiciones suficientes para hacerlo.

-¿Cómo estás, amigo?

-Bien.

Suga no estaba bien. Estaba soportando unas inmensas ganas de explotar en llanto, recordando aquella tarde donde fumó 5 cigarrillos en la terraza. Jimin hablaba en un susurro, diciéndole una y otra vez que los sentimientos que tenía cuando escribió Lie estaban volviendo. A Suga le costó mucho recordar las noches de llanto silencioso y bailes fuertes que Jimin había pasado en ese entonces. Solía decirle a Taehyung que no quería estar más allí, que sentía que se había equivocado al creer que ese era su lugar, que ya no sabía ni quién era. Suga recordaba las dolorosas semanas donde Jimin estuvo en rehabilitación por ataques de ansiedad y los mismos pinchazos de dolor lo recorrían sólo con imaginar a Jimin, parado frente a él, con esa misma mirada que le daba cada vez que lo iba a visitar, los ojos desorbitados y la voz monótona, producto del sedante que usaban en ese entonces, era la epifanía del dolor en el corazón de Suga, y eso tendría que quedarse dentro de él para siempre, porque jamás se arriesgaría a decirlo y mostrar el dolor que le causaba verlo escurrirse entre sus manos como agua tibia.

-¿En qué estás trabajando ahora?

Los ojos desorbitados de Suga se movieron hacia la figura de su amigo y luego hacia el block de notas que estaba lleno de palabras y trazos extraños.

-No lo sé. He tenido unas cuantas ideas pero aún no decido nada.

Hoseok tomó el cuaderno y leyó la desprolija letra. Era la primera vez que veía tanto desorden en sus cuadernos. Él solía ser ordenado y diligente cuando iniciaba a escribir. Tampoco paraba ni quedaba en trance. Él era una simple máquina cuando tenía una idea y su mente no paraba hasta que había un bosquejo claro de lo que quería hacer.

-Si unes unas cuantas frases, sería un buen concepto, la verdad.

-Supongo. No lo sé, ya no me concentro como antes.

J-hope tenía que ser sincero, estaba irritado con la situación. Jimin no dormía, no comía, se sobresforzaba, se aislaba y no hacía nada productivo por su convivencia grupal. Y Suga se había sumido en la depresión y la ira, en la ley de no bañarse, no comer sanamente y dedicarse a tocar todas las melodías deprimentes que podía tener en su repertorio (para eso no cerraba la puerta aislante del sonido, eso sí dejaba que todos lo oyeran, como si fuera un castigo hacia el menor por haberlo abandonado).

-¿Qué tal si tomas un baño y sales a escribir a otro lugar, Min?

-No, Hobi.

-No es una sugerencia. Es una orden, hyung.

Namjoon se asomaba por la puerta con una mirada autoritaria. Aquella mirada sólo la había conocido un par de veces, cuando la amplia paciencia de su líder se agotaba plenamente, y el resultado en ese par de veces había sido desastroso, en general.

-Este lugar huele asqueroso. Ve a limpiarte y sal de aquí. Haz lo que quieras, pero deja que entre aire, al menos. Parece que alguien murió aquí.

-Su alma murió aquí, Joonie.

Suga salió sin dar pelea, principalmente porque, paulatinamente, se estaba cansando de tener peleas sin argumentos, así que simplemente salió del lugar, rezando por no ver a Jimin por los pasillos. No lo vio. Tampoco estaba en su cuarto, ni en la sala de juegos, ni en la zona de práctica (aunque el lugar se veía como si fuera la nueva habitación de su dongsaeng). Se sintió animado y decidió tomar una ducha y subir a la terraza, porque todo apuntaba a que Jimin estaba fuera del edificio. Se dio el lujo de tomarse su tiempo en la ducha y usar algo que lo mantuviera cómodo y fresco. Por primera vez, no usó ninguna camiseta que Jimin le hubiera dado o ninguna prenda que conllevara a un recuerdo con él, y se sintió renovado y listo para mejorar. Tomó sus cuadernos y su lapicero color marrón y subió las escaleras hasta el último piso, abriendo la puerta que daba con la bonita caseta que Jimin y él habían construido para sentarse a diario una de esas tardes donde había fumado 3 cigarrillos. Tarareó una tonta melodía mientras caminaba cabizbajo, pensando en lo bonito que sería poner algunas luces y unos bonitos focos de suelo.

Notó demasiado tarde la presencia de Jimin, acurrucado en el lugar que alguna vez ocupó para fumar, sollozando contra la tela del puf. Yoongi se quedó helado. ¿Debía decir algo? ¿Huir? ¿Gritarle por invadir, incluso, su espacio material? ¿Odiarlo y repudiarlo más que antes? ¿Palpar un poco su espalda para darle apoyo? ¿Tomarlo entre sus brazos y jurarle que todo iría bien? ¿Besarlo hasta que sus sollozos se volvieran gemidos? ¿Acunarlo entre sus brazos y jurarle su amor hasta cansarse? O sólo, sentarse a su lado y encender un cigarrillo para fumar.







Sé que teníamos un trato por 2 capítulos semanals, but, salí de la ciudad y olvidé terminar esto. So, aquí está. Lamento la tardanza y prometo recompensarles por esto.

Kisses and hugs.

Anchor'n Rope

Relatos de una Musa Perdida♤Yoonmin♤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora