Las cosas cambiarían. Debí saberlo.
La perpetua tranquilidad que creí que tendría se evaporó rápidamente, en cuestión de semanas. Con la aparición de Bella Swan en nuestras vidas, reordenando todo, cambiándolo a su modo. En ocasiones, al mirarla, me sentía irremediablemente fuera de lugar, como si todos los demás, cada acontecimiento, sucedieran porque así debía ser.
Todo excepto yo. Incluso Bella, recién llegada parecía encajar.
Quizás, le decisión que llevó a Carlisle a encontrarse conmigo aquel día, hacia tantas décadas atrás no debía suceder. De ese modo, habría muerto y la vida habría seguido su curso.
Con Bella apareciendo en el momento idóneo, encontrándose con Edward y siguiendo un perfecto libreto de novela. Sin mí, importunando en medio de ambos.
Todo cuánto veo es diferente, ajeno a mí, recalcándome que, de alguna manera que no consigo entender, yo soy la única pieza que no embona en este complejo rompecabezas.Además de Josh, parte genuina de la vida que solía tener, es como sentirme fuera de lugar. Por mucho que Esme y Rosalie se esfuercen en hacerme creer que todo va bien, que la distancia creciendo entre Edward y yo es solo una cuestión de imaginación, sé que la realidad dista mucho de ello. Desde aquella fatídica cita, el creciente abismo entre los dos, de seguir así, me rompería en pedazos.
—Vengo en un momento— murmuró Edward, sin mirar a nadie en particular. Su voz, como muchas otras veces, consigue sacarme fuera de mis ensoñaciones.
Al igual que cualquier otro día, nos encontramos en el colegio, siguiendo la misma rutina de adolescentes que he comenzado a detestar. A pesar de los años, la inmortalidad y cada suceso que he experimentado, no me siento precisamente como debería ser siendo adulta, si alguna vez lo hubiera sido siendo humana.
Tampoco especialmente joven, pero definitivamente, no con la mentalidad de una anciana. De alguna manera, es como haberme quedado congelada en el tiempo, atravesando la adolescencia incluso si mi cuerpo jamás envejeció, solo para, años más tarde, estancarme en la etapa en la que supongo, se alcanza la madurez de un joven adulto, con mucha experiencia de por medio.
De todos modos, seguir conformándome con asistir al colegio, una y otra vez, repetidamente, me ha dado muchas adolescencias para atravesar. Lo que ha bastado para darme cuenta que he tenido suficiente.
Edward, por otro lado, dispuesto a ignorarme la mayor parte del tiempo parecía estarlo encontrando estimulante, al menos por los últimos días. Con aquellas míseras palabras, se levantó de nuestra mesa y ante mi perplejidad, caminó hacia Bella, algunos metros lejos.
No debería sorprenderme, me repito. Hacia días que Edward confesó que habían comenzado a salir, incluso si no era completamente formal. Sin embargo, el dolor que atravesó mi muerto corazón fue completamente real.
Su confesión no resultó del todo bien. Atreviéndose a ser deliberadamente estúpido por primera vez en décadas, se atrevió a decirlo frente a todos.
Salir con una humana. Vaya idea.
La incomodidad que me produjo su anuncio solo se comparó con la comparecencia con que todos en la familia me miraron, desde Esme mostrándose tan rota por mí, Jasper alejándose de la habitación, Carlisle poco dispuesto a mostrar su decepción y finalmente, Rosalie, negándose a dirigir una sola palabra a Edward. Nunca les pedí que se pusieran de mi parte, de todos modos.
Lo único que lo empeoró fue, quizás, su última declaración. No bastándole actuar de una manera tan estúpida, se atrevió a confesarle nuestra naturaleza. Al hacerlo, poco sirvió que Emmett intentase frenar a Rosalie, deseando abalanzarse sobre Edward y consiguiéndolo solo por unos segundos.
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Crepúsculo Encontrarte (En Edición)
FanfictionAllison Carson siempre ha sido enigmática, un hecho que la inmortalidad no ha podido arrebatarle. Ahora, convertida en una vampira solitaria, escéptica y de carácter explosivo, poco podría imaginarse que el verdadero cambio en su existencia no suced...