Crepúsculo Encontrarte (En Edición)

Rastreadores

La lluvia golpetea el cristal del auto, el clima completamente nublado y frío se asemeja mucho a mi estado de humor.
Estoy tratando de mejorarlo, de concentrarme en lo que tengo que hacer, mi actual tarea, debo de estar concentrada no pensando tonterías, no soy una adolescente, a partir de ahora me dedicaré a hacerlo, dejar de ser tan infantil y ver lo que tengo en frente, no hay tiempo para pensar en Edward o nadie más.

"¿puedes calmarte ya?" Miro a Jasper con cara de pocos amigos, era justo a quién menos debería tener como compañero. 
"Ya! Lo haré" contesté volviendo la vista al frente. 
"Mira, entiendo que esta no sea tu tarea favorita pero somos una familia, es lo que hacemos...."
"Protegernos y ayudarnos, lo entiendo" termine por él fríamente, asiente serio, pude deducir que me quería decir algo aunque no lo hizo.
"Tú y él son unos completos estúpidos"
"Dime algo que no sepa, crees que no sé que todos hablan acerca de lo que pasa, de ella, que tengo que estarla cuidando cuando en otro tiempo la habría quitado de mi camino?" Me hundo en el asiento evitando mirarlo.
"No quería decir eso, sabemos tu pasado, sabes él mío, sólo que están perdiendo el tiempo, espero que cuando esto se arregle ambos recapaciten" sentencia dejando el tema, mejor para mí. 

"Mira, ya viene" señaló la casa de donde sale Bella tratando de cubrirse la lluvia con la mano.
Abrí la puerta trasera para que subiera, completamente empapada entró temblando, tal vez debería haber salido con alguna sombrilla, vaya chica.
Jasper bajo y subio maletas al auto, volvió un segundo después igual de mojado, arrancamos en dirección a nuestra casa estando bien atento de que nadie nos siguiera o estuviera cerca.
Se suponía que la lleváriamos a un lugar seguro, tendríamos que deshacernos de su padre en primer lugar algo que ella había hecho más rápido de lo que creí y que había obedecido sin chistar, realmente crei que se opondría peroal parecer hace todo lo que dice Edward.
Sólo faltaba deshacernos de James, Laurent y Victoria, una parte de mí estaba deseosa por hacerlos pedazosy acabar con esto.

La chica temblaba abrazándose a si misma, su aliento cálido contra el cristal, recordándome lo que yo ya no podía sentir y ella estaba dispuesta a desperdiciar.
"Toma, cubrete" le arroje una sudadera, Jasper me miró curioso pero no dijo nada, controle mis emociones tal cuál sabía controlar a las personas.
"Alice ya nos estará esperando, tengo entendido que te llevas mejor con ella ¿verdad?" Pregunté.
"Sí...es decir, es muy simpática" asentí mirándola por el espejo retrovisor, poco a poco su frío se estaba yendo, estábamos encerrados con una humana, no creía poder aguantar más su....aroma, el calor que desprendía su cuerpo, a pesar de mi autocontrol era una situación difícil.

Después de varios kilómetros por fin estacionamos y ayude a bajar las maletas, la lluvia convertida en llovizna era como una caricia en la piel, deje que los demás se metieran a la casa, sola me permití cerrar los ojos, un respiro nunca estaba mal.
"Por fin llegaste, Carlisle te quiere adentro, estamos planeando que haremos"  
Me obligue a abrir los ojos, ahí con el cabello húmedo y pequeñas gotas deslizandose por su rostro está Edward viéndose más atractivo que nunca. 
"Bien, vamos entonces, sólo dame un minuto" contesto apartando mi mirada de él.
"Espera, nosotros...¿estamos bien?" Se ve claramente angustiado, debería hacer lo mismo que yo y olvidarlo, no tiene caso.
"Estamos bien" afirmo lo más serena que puedo. "Edward, dejemos de lado lo que sea que es esto, debemos pensar en otras cosas"
Me abraza rápidamente, un gesto tan efímero y espontáneo, un abrazo que no tendría que pasar, menos con su novia en casa, pero me permito aspirar su aroma que se a intensificado por la lluvia y la humedad aferrándome a la sensación de él atrayendome a su pecho como si no quisiera dejarme.
Lo que no sabe es que esto es una despedida para mí, después de esto no hay nada para nosotros, ya lo entendí.
"Tenemos que hablar" dice a mi oído, asiento contra su pecho antes de tomar la iniciativa de separarme y entrar a la casa.