Capitulo 15

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El gemelo de Marcus seguía aplaudiendonos, Ian lo estaba mirando enojado, note que apenas lo vio todos sus músculos se tensaron, su cuerpo y ojo destilaban rabia e ira.

-Linda escena- sonrió burlón-, merecen un oscar a mejor drama- volvió a aplaudir.

-¿Qué haces aquí? - pregunté sorprendiendo a Ian quien inmediatamente volteo a mirarme.

-¿Lo conoces? - me pregunto apretando su agarre en mi cintura, esta vez lo mire yo.

-No

-¿A que viene la pregunta entonces?

-¿Van a pelear otra vez? Esperen y buscó el snack- dijo el gemelo irónico.

-Espera... ¿Tu lo conoces? - ignore al gemelo, este bufo en respuesta e Ian me prestó atención de nuevo.

-Si - dijo entre dientes.

-¿Quién es?

-¡¿Pueden dejar de hablar como si no estuviera aquí?! - grito el gemelo desesperado- princesa mi nombre es Aiden.

-El indeseable... ¿Qué haces aquí? - dijo Ian, seguíamos en la misma posición de hace un rato, Aiden nos miro diciéndonos con la mirada que nos separaramos, yo empuje suavemente a Ian pero este no me soltó.

-La princesa debe saber que busco- me señalo, Ian alzó una ceja.

-¿No que no lo conocías?

-Lo vi una vez- lo mire - no es momento para una escena de celos- volví mi mirada hacia Aiden.

-Volviendo al tema, la última vez le comente que la guerra se acerca y no miento.

-¿Y vienés a unirtenos? - Ian río amargamente- traicionaste a tu hermano,  Aiden.

-Siempre con lo mismo- el puso los ojos en blanco-,  pasa la página Ian.

-Lo dejaste morir ahí, Marcus es mi amigo y más que nada no se merece lo que tu hiciste- espeto Ian, Aiden bufo, lo siguiente fue que Ian me soltó par darle un puñetazo supongo, al soltar me caí sobre plantas con espinas venenosas mágicas, poco comunes de encontrar, creo que eran rosas, el punto es que duele tener mil espinas en el trasero por culpa de un imbécil.

-Mierda- espetó de espaldas a mi, vi como los músculos de su espalda se tensaban del miedo, podía oler su miedo pero debía tenerlo lo voy a matar, esto duele como el demonio - Alena...

-¡TU MADRE IMBÉCIL! - le grité- ¿COMO SE TE OCURRE HACER SEMEJANTE COSA? - bajo la mirada haciendo que me enojara mas- NO TE QUEDAS PARADO COMO UN IDIOTA ¡AYUDAME MALDITA SEA!- él reaccionó y me jaló demasiado rápido por lo que grite del dolor.

-Princesa... -  dijo Aiden, lo jale de la camisa y lo acerque a mi para que me mirara a los ojos.

-No me importa lo que vayas a decir, nos seguirás y no huirás hasta que yo te diga- el asintió y con ayuda de ambos llegue a la base, donde estaba Leah discutiendo con Gael, al verme se le fue el color de la cara.

-¿Que demonios le pasó? - dijo Leah mientras corría preocupada hacia mi.

-Este... - Ian se rascón la nuca nervioso.

-Este troglodita me dejo caer sobre algo con espinas que ahora están en mi trasero- Leah me llevó hasta una sala con cosas médicas así que asumo que es la enfermería, me quito el pantalones y la ropa interior dejando mi trasero desnudo.

-Tendré que quitar las que quedaron,que gracias a tu pantalón no son muchas, dolerá mucho pero luego te curare con magia para que no sientas el ardor pero eso si tendrás un dolor en el trasero por días- asentí a sus palabras y con eso empezó la extracción, admito que he sentido peores pero condenado señor del universo cada espina que sacaba dolía más que la anterior, después de lo que me parecieron horas Leah conjuró algo y me dijo que me quedará quita que me iba a aplicar algo para que mi trasero no doliera tanto.

-¿Como... Wou- se giro inmediatamente al ver mi trasero desnudo, se rascó la nuca, si no lo quisiera matar ahora me estaría riendo- ehh... Yo... Ahh...

-¿Si, Ian? - dijo Leah sonaba exasperada y calmada a la vez ¿Como hacia eso? Ni idea.

-Q-quería saber cómo estaba Alena- dice de espaldas a nosotras.

-¿Para que?¿Tirarme de nuevo? Mejor vete con el tal Aiden y dejame en paz- dije con frialdad.

-Alena...

-Ian deja que se le pase, luego te disculpas- Ian asintió y se fue de la Sala, mi madre me unto lo que sea que fuese y me levante para irme y gruñí, definitivamente Leah tenia razón, esto dolería por un rato, a paso cojo logré llegar a la puerta, Ian estaba apoyado en la pared, al lado de la puerta, me intentó ayudar pero yo lo alejé.

-Ni te pienses que voy a dejar que me vuelvas a tocar idiota- le espeté entre dientes, estaba molesta, irritada y cualquier otra mala emoción que exista en mi cerebro y corazón.

-Alena lo siento- se tiro del pelo, la verdad no estaba prestándole mucha atención, intentaba caminar -, no quise soltarte pero él me saca de mis casillas- ya estaba empezando a acostumbrarme a caminar cuando la alarma de evacuación sonó.

Mierda.

Camine más rápido para llegar a la esquina cuando me di cuenta que Ian seguía hablando como niño regañado y le tapé la boca, señalé mis oídos para que entendiera que nos podían oír y que corríamos peligro si seguía soltando balbuceos incoherentes. Alguien había entrado a la base, desde arriba vi como los soldados se ponían en posición de ataque.

-Alena... ¿Qué sucede? - susurro Ian en mi oído provocando que se me erice, lo tomo de la muñeca y corro como puedo hasta mi habitación.

-Debajo del tapete hay un escotilla, abrela y metete ya voy- le ordené a Ian mientras cerraba la puerta, camine hacia el librero y lo moví, saque un arma que tenía oculta ahí, la balas eran de una piedra preciosa la cual debilitaba a cualquier ser sobrenatural. Corrí hacia la escotilla, la cerré y con ayuda de mis poderes rodé el tapete a su sitio.

-Toma- le dí un arma como la mía- la necesitarás- caminé por el pasillo hasta una puerta metálica, ingresé el Código de Seguridad y entré dándole espacio a Ian para entrar también, adentro había todo lo necesario para sobrevivir por 1 mes, comida, agua, baño, unos cuantos muebles y un circuito de televisores que me dejaban ver por las cámaras.

-Solange debió mandarlos- dijo Ian acercándose, negué.

-Nadie sabe que estamos aquí- lo miré- y Jamina... - entonces lo recordé, mande a Justin a que la dejará botada en algún lado, Solange debió encontrarla y ella nos delató, tomé mi celular y le marque a Justin.

-¿Si? - respondió cansado y agitado debido a las peleas, por las cámaras veía como tenía el teléfono en el oído mientras peleaba.

-¿Dónde dejaste a Jamina? -escuche unos gruñidos de esfuerzo y luego quejidos.

-Perdón ¿Qué dijiste?

-¿Dónde dejaste a Jamina, Justin?

-En las afueras de la ciudad- escuche como esquivaba algo y luego otro gruñido-,  murió poco después de eso- colgué. ¿Entonces como sabían dónde estábamos? Mire las cámaras y note que todos nuestros invasores eran vampiros.

-Ian... Ven a ver esto- él se colocó detrás de mi, sosteniéndose del espaldar de mi silla.

-Son vampiros- dijo casual y se alejó pero casi de inmediato volvió con sus ojos sorprendidos, gire los ojos- ¡¿Vampiros?!- entonces entro una chica alta,tenía rasgos asiáticos, pelirroja, esbelta con mirar de niña pequeña a la que le quitan un dulce pero claramente esta es más amenazante, Ian la señala y suspira.

-Anika- bufa y se aleja.

¿Quién era ella?

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Holaaaaaaaa
Este capitulo me mato sinceramente.
¿Quien creen que será Anika? ¿Quien la mando?

Por cierto pobre trasero de Alena

-Dawn💕

Mystical FreezeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora