Una Madre En La Mafia

Capitulo 36

CAPITULO 36

Melissa

- No te desbordes ¿Vale? – Asentí aun sabiendo que Ash no podía verme.- Joder cariño, sé que debes estar aterrada, sé que seguramente quieres matar a todos e irte a la mierda, pero por favor no te hundas Mel.- Imploro.- Christian aun te necesita, yo te necesito amiga.

- No puedo.- Vi como mis labios temblaron al hablar, a través del espejo.- Simplemente esto me supera, no puedo creer que expuse a mi hijo a esto, lo sabía Ashley, yo sabía perfectamente que todo esto iba a pasar si me casaba con Alexander, igual así mi deseo y mis sentimientos se impusieron antes que mi propio hijo.- Solloce.- ¿Sabes cómo me siento? Como la más mierda de todas las madres, deje que mi bebe fuera víctima de este puto mundo una vez más, deje que fuera herido en mi propia casa. No puedo.

- Si pudiste aguantar que la puta cabeza de mi amado osito saliera por tu puto agujero de la vagina, podrás aguantar esto.- Rio sin ganas.- Tu eres fuerte Melissa, no te rindas ahora.

No rendirme.

[...]

- Melissa.

Di media vuelta y quede cara a cara con Alexander, estaba apoyado en su antebrazo, dos bolsas negras adornaban debajo de sus ojos, como yo también debía tener. No hemos dormido nada, en dos noches básicamente.

- ¿Dónde está Christian? – Murmuro mirándome.- Acabo de pasar por su habitación y no está.

- Lo deje con mi padre y mis hermanos.- Suspire.- Creo que quiero sentirme segura respecto a él, pero ni siquiera yo sé si estoy segura aquí.

- Joder, Mel.- Se acomodó y me abrazo, quedando cara a cara.- Lo lamento mucho hermosa, sé que he sido una gran mierda, en muchos sentidos. Pero créeme cuando te digo que nunca creí que esto pasaría, no tan lejos, me siento muy jodido, no puedo protegerlos y Christian salió herido.

No dije nada, solo lo mire.

- Melissa, quiero hablar del tema que tocamos, antes de que todo pasara.

- Alex...

- Escúchame.- Pidió.- Sé que todo lo que dijiste era cierto, lo único que he hecho todo este tiempo fue tenerte en mi cama y llenarte de cosas, que en el fondo sé que nunca te gustaron. Te encerré en esta casa, queriéndote proteger, cuando aún sabía que podías hacerlo sola. Te aleje del mundo en el que te criaste, solo por miedo.- Mojo sus labios.- Soy inútil, para estas palabras, pero créeme cuando te digo que verdaderamente te amo, eres y siempre serás esa persona dueña de mí, de mi corazón. Una vez te deje, pero no quiero hacerlo ahora.

» ¿Quién me creería, no? – Me sonrió.- Te digo que te amo, cuando hace menos de tres días, me encontraste con alguien más. Y aunque ya te aclare eso, quiero volver a hacerlo, no estoy en mi mejor momento.- Rio.- En este mundo, te presionan por donde vayas, te amenazan por lo que sea que hagas y aunque antes eso nunca importo, ahora los tengo a ustedes.- Acaricio mi mejilla.- No quería hablarte al respecto, pero tampoco quería amargarte por mi culpa. Me distancie de ti, aun cuando sabía que podía contar contigo. Prácticamente te he estado usando y sé que eso no es amor.- Apretó sus labios.- Aquella noche, cuando te negaste, algo toco mi corazón Mel, la única cosa que hacíamos juntos, se había acabado, aunque sé que el sexo no lo es todo era algo que nos mantenía juntos de alguna manera.- Sus dedos rozaron mis labios.- No quise volver a intentarlo, no hasta que tú no quisieras, los días pasaban y creo que cada vez me volvía mas loco y ahí estaba ella, tus mismos rasgos, en otra persona, entonces lo pensé ¿Porque no? Lo pensé demasiado, no quería forzarte y ella dijo palabras que necesitaba, no es excusa.- Informo.- No me excuso, acepto que pensé en serte infiel, acepto que desee a esa mujer, pero solo por pensar en ti, acepto que todo lo que he esta haciendo es una mierda, pero también acepto que te amo más que a mi vida Melissa Hermitonw, eres.- Cerré mis ojos.- Y siempre serás, mi más única amada.- Sentí la humedad de sus labios posarse sobre los míos.