Secuelas de suerte.

Capítulo cinco.

Niall se apresuró hacia mi, sonriendo divertido por ver mi cara de asombro.

Tendió su brazo hacia mi, para dejar aquella gran funda negra sobre mi regazo.

Sin esperar ni un segundo más, deslice la cremallera poco a poco para ir descubriendo lo que había en su interior, averiguar si era lo que imaginaba.

Lo era. Era una guitarra acústica preciosa, curiosamente idéntica a la que tenía cuando aún estaba en Madrid, con mi madre.

Ese recuerdo hizo que me emocionara y mis mejillas acabaran mojadas por el recorrido de mis lágrimas.

No podía creerlo, no sabia ni como ni porqué, pero habían conseguido que ni un solo detalle fuera diferente. Pero sabía que no era la misma, era imposible, la perdí cuando conocí a Zayn. 

-¿Cómo...? — pregunté, sin poder acabar la pregunta.

-Conseguimos contactar con tu amiga Raquel, para que nos describiera como era exactamente tu guitarra, ya sabes... el color, la marca — explicó Harry.

-Si — continuó Niall — y después de conseguirla pensamos que te gustaría que te la dedicara Zayn, así que... nos compinchamos.

Miré a Zayn ilusionada, que me miraba con una gran sonrisa tímida, que bese nada mas contactar con su mirada.

Seguidamente giré la guitarra. En una orilla había algo escrito. Lo leí.

"Se que no es la guitarra con la que empezaste y que no te traerá los mismos recuerdos cuando mires esta que la antigua, pero prometo intentar que eso cambie, que cuando mires esta en un futuro, recuerdes lo feliz que llegaste a ser, a pesar de todo lo que has sufrido.

                                            Zayn."

Me quedé pensativa tras leer esto. Tenia razón, no seria lo mismo, ni mucho menos, pero podría ser mejor aún.

Y fue cuando me di cuenta de que ya estaba siendo mejor, mucho mejor. Y cuando también me di cuenta, de que era mejor solo por el, por Zayn.

Me sentí la mas afortunada del planeta Tierra.

-Chicos, yo... — balbuceé — os lo agradezco muchísimo, en serio. Me ha encantado, por si aun no se ha notado...

Todos sonrieron.

-Bueno, aun queda otro regalo — dijo Louis.

Asintieron todos a la vez, como si lo tuvieran todo planeado. Entonces Niall extendió su otro brazo con la bolsa, pero esta vez a Zayn.

-¿Para mí? — preguntó señalandose a si mismo.

-Ajá — respondió Liam.

-A ver que se os ha ocurrido ahora... — murmuró.

Los miró mientras sacaba el sobre que había dentro de la bolsa. Desplegó la solapa del sobre, para sacar dos papelitos.

-Joder — dijo con la boca abierta — muchas gracias tíos.

Se giro hacia mí para enseñarme que esos papelitos eran entradas para el concierto de Bruno Mars en Londres. Me podía imaginar su ilusión, a veces me parecía que solo sabía escuchar su musica.

-Para que vayas con Valeria — añadió Louis. — es el próximo fin de semana.

-Madre mía... ¡quién me iba a decir a mi que hoy iba a tener entradas para ver a Bruno! — exclamó gesticulando.

A partir de ahí brindamos todos por esa gran noche. Sin darnos cuenta casi había anochecido. No lograba acostumbrarme a que anocheciera tan temprano en Londres.

-Lo hemos pasado genial — comenté yo cuando estábamos en la puerta del local.

-Sí, ha sido un gran día — contestó Liam.

-Gracias por todo... por venir, por los regalos... — dijo Zayn.

-Bah — soltó Louis mientras Liam y Harry asentían agradecidos.

-No tenéis que agradecernos nada — dijo Niall.

Me acerqué para darle un abrazo a cada uno y agraderle mi regalo individualmente. Mientras Zayn encendía un cigarrillo y charlaba con Louis, que fue al ultimo que abracé.

Después de agraderles una vez mas su visita, Zayn y yo comenzamos a andar hacia su apartamento.

-Lo he pasado bien — dijo dando una larga calada a su cigarro.

-Yo también, muy bien — confesé.

Oí mi nombre a mis espaldas, me paré en seco y me giré, observando a Harry, que movía la palma de su mano hacia alante y atrás.

-Espera aquí, Harry me llama — le dije a Zayn, dejándole en sus manos la guitarra.

Me acerqué hacia el, los demás estaban mas lejos, hablando entre ellos.

-¿Qué pasa? — pregunté preocupada.

-Perdoname — dijo serio, sin responder a mi pregunta.

-¿Eh? — pregunté de nuevo, sin saber a que se refería. Agacho su cabeza mirando al suelo.

-No debí enfadarme — continuó.

Comprendí que hablaba de aquel día digno de no recordar más.

-Te dije antes que no tenías que disculparte — contesté seria, mirándole directamente a los ojos.

-Solo quería que lo supieras — se excusó. — buenas noches, Valeria.

Sonreí. Lo entendía, tenía que decirlo, ni si quiera le había permitido pedirme disculpas una sola vez, pero eso no significaba que las aceptaba. Nunca ha sido culpa suya.

-Buenas noches Harry — contesté, sonriendole para darle un fuerte abrazo.

Volví con Zayn, que estaba de espaldas a mi. Aproveché de que no se dio cuenta fe que iba hacia el, cogí carrerilla y me subí a su espalda, abrazando su cuello. Su cigarro calló al suelo.

-Mierda Valeria... — dijo tras agarrar mis piernas con sus manos y mirar la colilla en el suelo. — menudo susto.

-Lo siento, no he encontrado ningún taxi — me excusé divertida.

Se rió, aunque un poco desanimado al ver que no solo tendría que cargar conmigo, si no también con la guitarra.

-¿Que quería Harry? — preguntó.

-Nada — contesté — solo... darme las buenas noches.

Se que es un cap muy aburrido, pero por favor, necesito votos y que me lea mas gente, esto desanima mucho :'(