Capítulo veintinueve.

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Había estado pensando desde que Zayn habló con mi padre y sólo había conseguido crear un lío enorme en mi cabeza. Necesitaba saber qué había traído aquí a mi padre después de tantos años si buscarme, desaparecido de mi vida.

Tenía que averiguarlo, y la única manera desgraciadamente era hablando con el. Me enfundé una sudadera y unos vaqueros para salir a la calle. Zayn no estaba en casa, dijo que iría con los chicos, cosas de trabajo.

Salí de casa, el frío de la calle se estampó en mi cara inesperadamente. No sabía a donde iba, ni a donde ir. Pero finalmente acabe yendo a la parada de autobús en la que lo vi por primera vez aquí.

Ni siquiera sabia para que iba hacia allí, pero lo hice. Sin saber por que, el estaba allí sentado. Lo observé unos minutos y no se subió a ninguno de los dos autobuses que se pararon. Me pregunte si estaría esperándome.

Harta de estar ahí parada, me acerque. Me pare justo a su lado. Apenas había cambiado, seguía con su pelo grisáceo y su corta barba del mismo tono.

-Quiero saber por qué has venido a por mi —le dije sin molestarme en saludarlo.

-Oh —se hizo el sorprendido.— ¿Quieres que lo hablemos aquí? —pregunto haciendo referencia a la parada.

-Podemos... ir a mi casa —ni siquiera sabía por qué lo estaba invitando a mi casa. Pero algo en mi me impulso a hacerlo. Quizá la pena, quizá la nostalgia.

El simplemente asintió y me siguió. Tardamos unos quince minutos andando sin soltar una sola palabra, murmullo o suspiro. Absolutamente nada.

Entro en casa y le ofrecí sentarse en el sofá del salón. Me senté tras quitarme la sudadera y lo miré con aire confuso, deseando que me lo explicara ya.

-Puedes empezar —le avisé al ver que no soltaba prenda.

-¿Estas bien?

-No lo sé —respondí seria.

-Bueno, es normal. Quiero que sepas que no lo hice de la mejor manera posible y que soy consciente de ello, pero cuando te enamoras sientes impulsos que no puedes negar —hablaba tranquilo y pausadamente, sin dejar de mirarme. Entendía lo que había dicho sobre enamorarse, lo entendía a la perfección, pero no era una excusa.

-Quizá si hubieras tenido veinte años menos y no hubieras tenido una familia hubiera estado bien ese impulso.

-Quizá, sí, sólo me deje llevar y no me importó nada.

-Ni nadie —repliqué. El asintió costoso por su orgullo, o eso deducía.

-Lo hice lo peor posible, lo se, y no hace falta que me lo recuerdes, pero nunca me olvide de vosotras.

-Tus actos costaron la vida de mamá —dije cada vez mas enfadada.— Y eso no te lo puedo perdonar ahora ni nunca.

-Si hubiera sabido esto no me hubiera ido —aseguró.

-Escuchame bien, te lo voy a explicar solo una vez. Algunas parejas se divorcian, dejan de quererse, y eso no es motivo para quitarles el dinero y la casa, porque al menos, por todos los momentos que has compartido con tu familia, merecíamos un hogar, yo merecía unos estudios, todo el mundo nos miraba cuando nos veía dormir en el suelo tapadas con cartones, todos. Y todo por tu culpa, podrías haberte ido con tu querida amante y habernos dejado una vida digna, al menos la que mama se merecía, porque si no nos hubieras dejado en la calle, mamá estaría aquí ahora mismo, mirándote con pena y desprecio, pensando en todo lo que te quiso y en todo lo que nos hiciste. Y si no fuera por Zayn ahora mismo yo podría estar como mamá, se lo debo todo a el, y no necesito que ahora aparezca mi padre a hacerse el héroe con sus disculpas inútiles. He sabido vivir sin ti, no te necesito.

Tras decir la ultima palabra cree un silencio absoluto que volví a romper yo.

-Quiero saber por qué has venido.

-Mi querida amante —dijo imitando mis palabras y agachando la cabeza.— Me ha abandonado. Por eso he venido, porque ahora os entiendo, y prácticamente estoy en la calle. Pensé... bueno, pensé que podrías ayudarme, algo de dinero...

-Fuera de mi casa ahora mismo —interrumpí su discurso.— Me arruinas la vida y ahora quieres que te ayude... Ahora vas a sentir lo que es morirte por un trozo de pan o por algo caliente, te lo mereces de verdad, y lo harás sin mi ayuda, como yo lo hice sin mi ayuda. Adiós —y me levanté, haciéndole entender que se fuera.

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⏰ Última actualización: Nov 12, 2014 ⏰

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