Ella había sido su confidente mucho antes de conocer a Cloe, incluso antes de Aime y que decir de Shirley; Ailen había estado con él desde el primer momento en el colegio.
Aquella que lo acompaño cuando era apenas un chiquillo, un huérfano abandonado por sus padres y dejado bajo el mando de su tía y su insoportable primo.
Sin ella diría que no habría podido sobrevivir. Fueron muy buenos amigos, había sido su chica por muy poco tiempo, pasaban la mayor parte del tiempo juntos y se veían involucrados en muchas aventuras.
Aunque su relación se fracturó al ingresar al bachillerato. Casi no se veían y con su popularidad poco a poco se fueron alejando.
La extrañaba. Por supuesto que sí, pero sinceramente no se había percatado de lo mucho que le faltaba pues siempre estaba rodeado de gente.
-Ailen...-la miró tras haberse separado.
¿Qué había hecho? ¿Esto significaba algo o solo lo hacía para no sentirse herido?
Estaba confundido.
No obstante la sensación le agradaba.
Al escucharlo colocó uno de sus dedos sobre los labios del chico para pedirle silencio. Y acercando sus labios a los de Austin, lo volvieron a hacer.
Dirigiéndola al sofá, se dejó caer con delicadeza tras llevarlo consigo. Colocado frente a ella y tratando de no dejar caer todo su peso sobre la chica, la tomó por la cintura y con su mano derecha acarició su rostro, conocía cada parte de su ser.
Su respiración se tornó mas pesada y todo en su mente había desaparecido. Se enfocó en ella, en el momento que estaban viviendo. Y en el sitio en el que estaban.
-Austin...-dijo entre jadeos-. Te había extrañado.
Besando su cuello con pasión y delicadeza, se dejó llevar. Inundado de su olor, aspiró hasta la última molecula de su aroma.
-¿Dónde habías estado todo este tiempo?-expresó exhausto de todo lo que había vivido.
-Siempre estuve ahí...-su tono sonaba algo apagado-no era nuestro momento...-finalizó con un beso sobre su boca, atrayendolo más a ella.
Se reincorporo por unos segundos para poder deshacerse de su camiseta y aprovechó para despojarla de su atuendo.
Con agilidad, ella bajó su cremallera luego de haberle quitado el cinturón. Quedando en boxers para tan solo sobresalir una parte de él.
Si, la deseaba. La deseaba ahora y no sabía...tal vez lo haría después.
-Ailen, te amo-soltó sin más. Sin percatarse de lo mucho o poco que podrían significar todas estas palabras juntas.
Lo dijo de manera inconsiente y no seguro de saber lo que había dicho.
Tomó su miembro en sus manos, provocandole una sensacion increiblemente buena.
Y su cara, ante ella fue toda una obra de arte porque lo miró entusiasmada junto con una sonrisa de satisfacción.
La despojó del resto de su ropa que hasta hace pocos minutos lo separaban de ella, y bajando sus boxers para dejar resplandecer lo que tanto había deseado.
Los papeles se habían invertido. Ahora su cara era todo un poema. Sin perder oportunidad se acercó a ella, rozando su piel y cubriéndose con el calor que emanaban.
-Ahora es nuestro momento-dijo expresando seguridad.
Tenía razón. Ahora era su momento.
A decir verdad, nunca antes se habían besado de tal manera, nunca antes habían estado tan cerca el uno del otro. Y nunca antes Austin había sentido aquella fuerte atracción hacía ella.
Es que era algo indescriptible. Que de haberlo sabido antes...él simplemente, no sabía lo que habría pasado.
Tal vez no era el momento. Tal vez su oportunidad aún no debía darse...por algo pasaban las cosas. Puedes vivir creyendo estar con la persona indicada pero de una u otra forma algo ocurrirá que te hará volver a donde siempre debiste estar. Así que no importa lo que pasé, llegarás a donde tengas que llegar con la persona que tengas que estar.
De eso es de lo que se trata el amor.
-Teníamos que vivir lo que teníamos que vivir-respondió algo consiente.
Tras finalizar, se quedó recostado con ella. Ansiando volver a repetir esta ocasión...pero también deseoso de saber lo que vendría.
-Se por lo que estas pasado y antes de que digas algo-intervino al notar que hablaría-...quiero que te pienses bien las cosas.
Lo miró con aquellos ojos tan penetrantes. Con aquel tacto delicado y con esa dulzura en su voz.
-No puedes decir algo o elegir algo que no sabés si querrás. Para serte sincera, es tal vez eso lo que te hizo llegar hasta donde estas ahora.
La miró, claramente dándole la razón.
-No te precipites a tomar una decisión, si lo haces puede que de nuevo salgas herido y no solo tu...otros más a tu alrededor.
Recargando su cabeza sobre su pecho aun desnudo, lo reconfortó con un calido abrazo.
-Gracias por todo-expresó al tiempo que procesaba lo que le había dicho.
Tenía que poner su vida en orden para luego saber lo que realmente quería.
-Hey, en unos días habrá un festival de música, el mejor de todos y aunque este año no estaré como me gustaría estar, me encantaría que fueras conmigo-sonrió deseando que accediera.
-Si, por qué no.
Mencionó ya estando completamente vestida.
-Ven, vamos a caminar un rato-dijo nuevamente tomándolo de la mano como lo había hecho un par de horas atrás. Hecho que lo hizo reír.
Caminaron junto al otro, charlando sobre lo que veían a su alrededor. Ahora que habían roto el hielo las cosas parecían estar mucho mejor.
***-***
Feliz navidad 👌❄
Tal vez suba nuevo capítulo antes de terminar el añoAtt: Gi Maelys
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LUNES 3 (Nuevo comienzo)
Chick-LitEsta es una historia más de como el amor sigue siendo amor a pesar de las desventuranzas que se puedan tener. El amor no es perfecto y no se trata de una sola persona para toda la vida, mucho menos si se trata de un amor joven, de un amor adolescent...